Eduardo Feinman le ganó un juicio al Partido Obrero por difamación

El periodista Eduardo Feinmann y el canal de noticias C5N le ganaron un juicio al Partido Obrero al obtener un fallo favorable de la Cámara Civil, que rechazó una demanda iniciada por esa agrupación política contra el conductor de televisión, el canal y el entonces ministro de Justicia, Aníbal Fernández.

El PO había hecho la presentación luego de que Feinmann denunciara en su programa que militantes de ese partido y de Quebracho habían sido responsables de los destrozos ocurridos durante una manifestación que incluyó la quema de vagones de la línea Sarmiento en 2008, en línea con las acusaciones que había hecho Aníbal Fernández.

Sin embargo, la Sala M de la Cámara Civil, con la firma de los jueces Elisa Díaz de Vivar, Mabel de los Santos y Fernando Posse Saguier revocó el fallo de primera instancia del juez Juan Pablo Rodríguez, quien había condenado al periodista y a Telepiu SA (C5N) a pagar $150 mil más intereses al PO y a José Escobar, militante de ese partido y ex candidato a intendente de Merlo.

En el fallo, los magistrados hacen referencia a la defensa de la libertad de expresión, según indicó Infobae. "No cabe duda que reunirse, asociarse, propagar las ideas, peticionar a las autoridades, orientar la opinión pública, hacen al ejercicio de la libertad individual, de palabra y de asociación; en fin, al legítimo ejercicio de los derechos", dice el escrito, al que accedió Infobae.

En ese sentido, los jueces consideraron que "a lo largo del expediente varios entes oficiados dieron cuenta de la autenticidad de las publicaciones que referían marchas con participación de diversos sectores entre los que aparecen los protagonistas".

Los demandantes acusaron a Feinmann de actuar con real malicia, esto es, con difamación, que existiría inexactitud de las manifestaciones y que obró con dolo. Ello porque habló de "delincuentes" sobre los militantes y les atribuyó la responsabilidad de los destrozos y quemas en los vagones, sin tener pruebas al respecto, según señaló en ese entonces el PO.

"Las siguientes manifestaciones que señala el actor, no exceden el límite exigible ni resultan denigrantes sino que se refieren a hechos y no son juicios de valor", consideraron los jueces sobre esto. O sea, para la Cámara Civil no hubo real malicia por parte de Feinmann.

"Es preciso detenerse en lo que emerge de numerosos fallos, para concluir que frente a una arremetida o agresión que se pretende deshonrosa, la atenuación al derecho al honor no se limita a los funcionarios públicos, sino que comprende a las personas públicas, es decir, aquellas que salen voluntariamente del ámbito de privacidad del ciudadano común o mero particular, para insertarse en la esfera del debate público, sea en temas de interés público o gestión de intereses de la comunidad, por lo que se ven expuestos a un riesgo mayor de sufrir afrentas", concluye el fallo reproducido por Infobae.

De esta manera, la Cámara Civil rechazó los argumentos del juez de primera instancia, quien calificó el año pasado de "terrible" el daño causado "por las noticias agraviantes" que "involucraron injustamente" al PO y a Escobar "en los gravísimos hechos de Merlo y Castelar", en referencia a los graves incidentes provocados por pasajeros furiosos, que quemaron vagones en protesta por los reiterados desperfectos de los trenes.

En aquella ocasión, Aníbal Fernández, en conferencia de prensa, habló de un "sabotaje" y responsabilizó a Escobar, ex candidato a intendente de Merlo por el Partido Obrero.

La noticia fue reproducida por el canal C5N (por entonces en manos de Daniel Haddad, hoy del empresario K Cristóbal López), pero el periodista Feinmann se hizo eco de la denuncia y agregó datos dados por certeros, que para el PO y Escobar fueron suficientes para denunciarlo a él y a la empresa, además de a Fernández, en lo que consideró "complicidad para intentar destruir la reputación y personalidad de una fuerza política opositora", señaló en un comunicado.

Por ello presentó demandas civiles contra Fernández, Feinmann y C5N, por un lado, y por otro contra Fernández y el Estado.

"El tema de fondo no es la sanción a un periodista, sino a una operación del Estado y de Aníbal Fernández a través de C5N y Feinmann", destacó en ese entonces el líder del Partido Obrero, Jorge Altamira, al ser consultado por Perfil.com.

Y agregó: "Aquí no hay judicialización de la libertad de expresión, aquí hay una sanción contra la acción difamatoria del Estado y del monopolio mediático. Feinman no es más que un chirolita".