RIGI: definen beneficio clave para empresas que ya operan en Argentina
El Gobierno clarificó un punto que era esperado por empresas que ya operan en el país, al especificar que en los supuestos de ampliación de Proyectos Preexistentes no adheridos al RIGI, que son operaciones que ya están en marcha en Argentina, la compañía deberá constituir una sucursal dedicada, con el fin de lograr diferenciar la aplicación de los incentivos.
Otro punto clave que se aclara es que la utilización compartida de la infraestructura y/o los activos entre la Sucursal Dedicada y el titular del Proyecto Preexistente (empresa que ya operaba en Argentina) no implicará incumplimiento de lascondiciones del RIGI.
Un ejemplo es el de una mina, donde normalmente un tramo está en explotación, pero por prospección se encuentran nuevas zonas de extracción y es necesario invertir otros u$s800 millones para equipar y poner en marcha el nuevo proyecto, unido a uno preexistente, explica Sergio Caveggia, del estudio Tavarone, Rovelli, Salem & Miani, y aclara que esto no solo ocurre con la minería.
El Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) prevé beneficios impositivos especiales y estabilidad fiscal por 30 años para inversiones por más de u$s200 millones.
Cuál es el beneficio del RIGI que precisa el decreto
El Decreto 1028, publicado este viernes en el Boletín Oficial, que establece las normas para Proyectos Preexistentes, establece que, en los casos en los que se solicite la adhesión al RIGI para la ejecución de un Proyecto Único cuyo objeto sea la Ampliación de un Proyecto Preexistente no adherido al RIGI, el proyecto de Ampliación podrá calificar como Proyecto Único beneficiario del RIGI cuando, a consideración de la Autoridad de Aplicación:
- El proyecto de Ampliación del Proyecto Preexistente cumpla con todos los requisitos previstos en el RIGI e iguale o supere el monto mínimo de inversión previsto para el sector correspondiente.
- El solicitante acompañe un plan que evidencie y por el cual se comprometa a que los incentivos del RIGI se aplicarán exclusivamente a la Ampliación del Proyecto Preexistente. En ningún caso, la admisión bajo el RIGI de un Proyecto Único consistente en la Ampliación del Proyecto Preexistente permitirá la aplicación de incentivos previstos en el RIGI en favor del Proyecto Preexistente.
Con el fin de lograr una adecuada y diferenciada aplicación de los incentivos previstos en el RIGI, el respectivo vehículo societario del Proyecto Preexistente objeto de Ampliación deberá constituir una Sucursal Dedicada que tenga por único objeto la ampliación del Proyecto Preexistente.
A los efectos de la correcta imputación de los incentivos del RIGI, se tendrá en cuenta la producción resultante de la Ampliación que exceda la correspondiente a la capacidad instalada del Proyecto Preexistente.
En estos casos, la utilización compartida de la infraestructura y/o los activos entre la Sucursal Dedicada y el titular del Proyecto Preexistente no implicará incumplimiento de las condiciones del RIGI.
La propuesta y viabilidad de separación del Proyecto Preexistente y su Ampliación será especialmente tenida en cuenta por la Autoridad de Aplicación al momento de analizar la aprobación de la solicitud.
Al momento de presentar la solicitud de adhesión al RIGI, la empresa deberá manifestar la aceptación de que tanto el VPU como sus socios o accionistas resolverán las disputas (incluyendo derechos, beneficios e incentivos obtenidos por sus miembros, socios o accionistas) mediante los mecanismos previstos en la Ley Bases.
El mayor proyecto del RIGI hasta el presente: un oleoducto de YPF
La petrolera de mayoría estatal YPF avanza en el proyecto del oleoducto Vaca Muerta Sur, la obra de la industria con la que Argentina se colocará como un jugador líder en la exportación de crudo regional y que generará exportaciones por u$s21.000 millones al año.
Para eso, la semana pasada se presentó al RIGI y la próxima se conocerán los nombres de los ganadores de la licitación de la construcción de los dos tramos que componen el ducto.
El objetivo es que en el tercer cuatrimestre del 2026 el proyecto esté listo para empezar a operar. Arrancará con 180.000 barriles y para el primer cuatrimestre del 2027 va a estar al nivel de los 390.000 barriles.
La obra requiere una inversión de u$s2.500 millones que con los intereses se convertirán en unos u$s3.000 millones totales. Este monto la ubica en la inversión privada más grande en lo que va del siglo y recién será desplazada cuando se concrete el proyecto de la planta de GNL.
El oleoducto Vaca Muerta Sur, o proyecto VMOS, será realizará en dos tramos, uno largo en el que hay dos empresas compitiendo por ganar y otro corto en el que es factible el ingreso de jugadores más pequeños. Los nombres de los que ganen la licitación se conocerá la semana próxima.
Los caños es un tema resuelto, la licitación la ganó Tenaris. Se trata de caños de 30 pulgadas, lo que lo convertirá en el oleoducto más grande de la Argentina.
"El proyecto VMOS ya se presentó al Régimen de Incentivos para grandes inversiones (RIGI) y se convirtió en el primer proyecto de la industria de O&G. Este es uno de los proyectos de infraestructura privado más importantes de la Argentina de los últimos 20 años", indicó a la prensa Horacio Marín, CEO de YPF.