Berenjena, el súper alimento: ¿qué beneficios tiene y cada cuánto se recomienda comer este vegetal?
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La berenjena es un vegetal muy versátil. El sabor suave que posee hace que se pueda incluir en casi cualquier preparación y aporta una textura muy particular a las comidas. Además del sabor y de su textura, la berenjena tiene algunos componentes que la convierten en un alimento muy positivo para el organismo.
Se trata de una verdura rica en potasio, fósforo, ácido fólico, y otras vitaminas como la C y B1. Todas estas características la convierten en un alimento antioxidante, al igual que sucede con la remolacha por ejemplo.
Es importante tener en cuenta, además, que la berenjena ayuda a la reducción y el control del colesterol, al igual que a la prevención de arteriosclerosis. Por otro lado, también contribuye a reducir los niveles de glucemia, por lo que se constituye como una de las verduras recomendadas para las personas que padecen diabetes y aquellas que tienen tendencia a las enfermedades cardiovasculares.
De acuerdo a lo indicado por Sputnik News, la berenjena es una aliada ideal al momento de "limpiar" el organismo de las toxinas acumuladas. Es así que si se consume este alimento al menos una vez a la semana se contribuye a disminuir el deterioro mental en las personas de la tercera edad. Esto sucedería porque ayuda a preservar la materia gris en las zonas del cerebro que responden por la memoria y las emociones.
Además, el efecto antioxidante de las berenjenas ayuda a que el cuerpo permanezca más protegido del deterioro celular y del envejecimiento.
10 recetas con berenjenas (para todos los gustos)
Antes de hablar sobre recetas que incluyen berenjenas es importante tener en cuenta que existen varios tipos de este vegetal. Conocer cada uno de ellos es clave para utilizarla adecuadamente al momento de cocinar.
Berenjena jaspeada: Los frutos son redondos ovalados, el color de su piel es bicolor (blanca con morado o verde) y la pulpa es casi completamente blanca.
Berenjena globosa: los frutos tienen forma esférica, el color de su piel es morado oscuro y brillante, mientras que su pulpa es de color verde.
Berenjena alargada: los frutos tienen forma alargada, el color de su piel es morado oscuro y brillante, la pulpa es de color verde.
Berenjena esférica: los frutos tienen forma redonda, el color de su piel es morado oscuro, brillante y uniforme, la pulpa es de color verde con vacíos.
Las especies más consumidas son las que poseen color negro o violeta oscuro brillante, más allá de cuál sea el color de la pulpa -que puede ser blanco o tirando a verde-. La realidad es que al momento de preparar una receta no cambia demasiado cuál de estas variedades se use, solo se debe considerar que el tiempo con sabor más intenso es la de cáscara negra.
Albóndigas de berenjenas
Esta receta es ideal para personas que llevan una alimentación vegetariana. Se puede preparar en una versión vegana, pero en ese caro habría que eliminar el huevo que lleva esta preparación.
Para hacer este plato se deben tener en cuenta las mismas pautas que para las albóndigas de carne. Solo es necesario considerar que se debe usar la pulpa de las berenjenas, no la cáscara. Para que no pierdan su sabor se recomienda cocinar las berenjenas en el horno, con la piel, y luego retirar la pulpa del interior, que es lo que se usará para las albóndigas.
Moussaka o musaka
Se trata de un plato griego que se elabora con berenjenas y carne picada. Es similar a una lasagna, y de hecho tiene sentido porque ambas regiones de Europa comparten muchos ingredientes en su gastronomía clásica.
Aunque la versión griega es la más famosa, hay que decir que la moussaka es un plato tradicional en los Balcanes y en Medio Oriente. La palabra es de origen árabe y proviene de saqqaʿa.
La receta de musaka es parecida a la lasagna de carne, pero la diferencia es que tiene un sabor y textura diferente, precisamente por las berenjenas que la primera no lleva.
Berenjenas rellenas
Para preparar berenjenas rellenas solo es necesario cocinarlas un poco antes de colocar el relleno, de modo que se ablanden levemente. Es importante tener en cuenta que el relleno se debe colocar cuando estén cocidas pero todavía firmes, dado que si no se corre el riesgo de que se desarme la preparación en el horno.
¿De qué se hace el relleno? Literalmente, de cualquier mezcla que sea del gusto de quien cocina y de quienes vayan a comer. Se puede hacer con carne o pollo, para aquellas personas que comen estos productos, y también se puede hacer en versiones vegetarianas o veganas.
Queso, cebolla, puerro, ajo, morrones, lentejas, espinaca, acelga, brócoli, entre una larga lista de vegetales, se pueden incluir en una preparación para rellenar una berenjena y que quede perfecta.
