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Las grasas en la dieta: cómo distinguir las saludables de las perjudiciales

Muchas personas piensan que hay que eliminarlas por completo de la dieta, pero la realidad es que son un componente necesario para el cuerpo
16/08/2019 - 15:13hs
Las grasas en la dieta: cómo distinguir las saludables de las perjudiciales

La buena alimentación es un elemento clave para llevar una vida saludable y mantener al organismo en buen funcionamiento. Cada vez más las personas toman consciencia de la importancia de este aspecto y, al mismo tiempo, cada vez hay más información disponible.

Una dieta para ser óptima y nutritiva tiene que cumplir, según aseguran los especialistas, una serie de características fundamentales. Una de ellas es la presencia de todos los grupos de alimentos, en las medidas adecuadas según las propiedades de cada uno. En este punto, es importante destacar que cuando se habla de todos los productos no es una generalización, sino que es una realidad que todos los alimentos son necesarios. Las frutas, las verduras, las carnes, los hidratos de carbono, entre otros, son productos clave, pero también lo son las grasas, aunque parezca una contradicción. La realidad es que la palabra grasa engloba a un conjunto muy diverso de este tipo de componente, lo cual implica que no todas las grasas son iguales y que muchas de ellas son necesarias para el buen funcionamiento del organismo. Así, es posible afirmar que las grasas "cumplen una función, y es importante comprender que hay al menos cinco tipos de sustancias ‘grasosas’, no solo un tipo de grasas", asegura la Lic. Laura Casparián, especialista en Nutrición del staff de Medicus. Cada una de esas sustancias, entonces, se comporta de manera diferente dentro del cuerpo, por lo que es clave comprender cuáles son las características de cada una. Así, será posible saber "cuáles son beneficiosas para la salud, cuáles deben ingerirse con moderación y cuáles conviene reducir o evitar", afirma la Lic. Constanza Machain Barzi. Por un lado, se encuentran las grasas saturadas, que suelen ser de origen animal, por lo que se encuentran en productos de dicha procedencia y sus derivados. Los lácteos, sobre todo los enteros, los fiambres y embutidos, y los amasados de pastelería son algunos de los alimentos que contienen este tipo de grasas. "También es posible que se encuentren en algunos aceites que han sido modificados por cocción, mucho más si se ha quemado", ejemplifica la especialista.

Además, están las grasas trans, que suelen estar presentes en productos catalogados como "chatarra". Los snacks, muchos panificados, las galletitas, las tortas, las barras de cereal, entre otros, contienen este tipo de componente. Asimismo, aunque no es similar a los alimentos mencionados, la margarina también contiene esta clase de grasas.

Por último, las conocidas como insaturadas son, en general, de origen vegetal, aunque algunos productos animales las contienen. "Los aceites, las frutas secas, la palta, las semillas y granos y las aceitunas, son algunos de los alimentos donde se pueden encontrar grasas insaturadas", afirma la experta de Medicus. Asimismo, los pescados y mariscos también son una fuente de este componente. ¿Cuáles son, entonces, las funciones que cumplen las grasas en el organismo?Se trata de un componente de todos los alimentos mencionados que brinda energía de depósito, transporta algunas vitaminas -como la A, la E, la D y la K-, y actúa como precursor de hormonas. Asimismo, aporta ácidos grasos esenciales -como en omega 6 y el omega 3-, ayudan a mantener la temperatura corporal y se constituyen como un componente de todas las membranas celulares. Por último, tienen una función más relacionada a los gustos que a su función en el cuerpo: dan sabor y textura a las comidas y sensación de saciedad, lo cual es clave para que la persona se sienta bien cuando come.

La presencia de grasas en el organismo se mide, a través de un análisis de sangre, con una prueba conocida como perfil lipídico. Este tipo de examen es útil para conocer los niveles de colesterol del paciente e indicar el tratamiento adecuado, si fuera necesario.

Si bien, en muchos casos, es necesario iniciar un tratamiento con medicación, "lo cierto es que hay muchas medidas naturales, sobre todo relacionadas a los hábitos, para mejorar el perfil lipídico", afirma la Lic. Casparian. "Disminuir el estrés, aumentar el consumo de fibra y de antioxidantes, así como el aporte de omega 3 y de fitoesteroles, son medidas que pueden contribuir a una mejoría de este aspecto de la salud", agrega. Asimismo, es importante incrementar la frecuencia de la actividad física y bajar el consumo de grasas animales puede actuar de manera positiva. MEDICUS TE INVITA: Seminario "Grasas saludables: cómo distinguirlas e incorporarlas", especialmente dirigido a familiares y pacientes con diabetes, a cargo de las Lic. Laura Casparián y Lic. Constanza Machain Barzi. Martes 20 de agosto, 17 hs. Centro Medicus de Salud Mental, Juncal 2184, CABA.