Curar el cáncer: científicos argentinos lograron reducir células tumorales
Hablar de cáncer es entrar en un universo tan amplio como complejo. Si bien es un término general para nombrar a una serie de patologías que tienen características en común, la realidad es que cada tipo de cáncer es un mundo diferente, que a su vez también varía de persona a persona.
Es por eso que hablar de lucha contra el cáncer es una expresión demasiado general. Los avances en el campo oncológico se hacen de manera paulatina y las investigaciones se realizan en tipo de cáncer puntuales.
Recientemente se publicó una investigación con resultados esperanzadores acerca del hepatocarcinoma. Publicado por la revista Scientific Reports, explica que un grupo de científicos del Conicet y de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) lograron detener en pruebas in vitro el avance del hepatocarcinoma, uno de los cánceres de hígado más letales. Es importante aclarar que pudieron hacerlo mediante el quite de glucosa y la administración de una droga utilizada en el tratamiento de la diabetes.
El grupo de investigadores que llevó adelante el trabajo pertenece al Instituto de Fisiología Experimental de la UNR. Liderado por Christian Favre, el equipo también tuvo la participación de Anabella Ferretti, Evangelina Almada, Facundo Tonucci, Cecilia Larocca, Alejandro Pariani y Florencia Hidalgo.
En diálogo con Infobae, el responsable de la investigación explicó que "el carcinoma hepatocelular o hepatocarcinoma es un cáncer de hígado que ocupa el segundo puesto entre los cánceres más letales". Al mismo tiempo, agregó que "esto se debe, en gran parte, a su alta velocidad metastásica intra y extra hepática". Esto significa que es un tipo de cáncer que se expande hacia otras partes del cuerpo de manera rápida, incluso más que otras patologías oncológicas. De esa manera, el biólogo justificó la importancia del descubrimiento realizado, que hasta el momento fue realizado únicamente en soporte in vitro. "En este caso se estudió la migración y la invasión de células, cómo se modificaban ante un estrés de energía, que es básicamente sacarle a las células su comida", señaló Favre.
Aclaró, además, que en células de hepatocarcinoma probaron "como estrategia de activación de AMPK (son las siglas que hacen alusión al conjunto enzimático capaz de regular el organismo al nivel energético celular) usar metformina, una droga usada como hipoglucemiante en pacientes diabéticos, en combinación con la condición metabólica de restringir la glucosa del medio de cultivo celular".
De acuerdo a los dichos del especialista publicados por Infobae, así lograron "que AMPK, que parece estar especialmente inactiva en este tipo de tumor, se hiperactive a niveles que no se alcanzan de otra forma y pueda entonces conducir a nuevas respuestas antitumorales".
Es necesario destacar que "cuando se analizó la capacidad migratoria e invasiva de esas células, se comprobó que ante la falta de glucosa, más la presencia de metformina en su medio de cultivo, las células migraban e invadían en menor medida que en condiciones normales", concluyó.¿Qué es el carcinoma hepatocelular?
Se trata del tipo más frecuente de cáncer primario de hígado; es una patología que se desarrolla más frecuentemente en personas que padecen enfermedades hepáticas crónicas, como cirrosis causada por hepatitis B o C.
El diagnóstico temprano, por supuesto, es una de las variables más importantes al momento de tratar el carcinoma hepatocelular. Para eso resulta fundamental el conocimiento de los signos y síntomas que manifiesta la enfermedad en el cuerpo del paciente.
La pérdida de peso involuntaria, la pérdida del apetito, la sensación de saciedad después de haber comido poco o no comido, las náuseas y los vómitos, se encuentran entre los principales síntomas de este tipo de cáncer. Además, es común que la persona presente un aumento de tamaño en el hígado, al igual que del bazo, dolor en el abdomen, hinchazón o acumulación de líquido en el abdomen e ictericia -color amarillo en la piel y en los ojos-.
Una vez que se detecta la clave es el tratamiento adecuado para el tipo de carcinoma y, además, para la persona que lo padece. De acuerdo a todas las variables mencionadas, el especialista podrá elegir tratarlo de la manera más efectiva.