Las consecuencias que puede ocasionar morderse las uñas constantemente
Es un hábito común en muchas personas, pero la mayoría desconoce los efectos adversos que puede tener en algunos sectores del cuerpo
23/09/2017 - 07:30hs
El hábito de morderse las uñas es muy común en las personas. Ya sea por nerviosismo, ansiedad o miedo, hay mucha gente que lo hace, incluso de manera involuntaria. Lo que muchos desconocen es que puede tener diversas consecuencias físicas, tanto en las uñas o en los dedos como también en los dientes y la mandíbula.
Cuando la piel que rodea las uñas se estira o arranca con los dientes se abre una pequeña herida, que se puede contaminar con las bacterias que se transfieren desde la boca. Así, las personas que se muerden las uñas son susceptibles a una infección en la piel que las rodea conocida como paroniquia -conocida también como uñero o panadizo periungueal agudo-. La infección puede manifestarse con inflamación y enrojecimiento de la zona, destrucción de la cutícula e incluso supuración.
Por otro lado, este hábito también puede causar una alteración permanente en la mandíbula. De acuerdo a algunos especialistas en odontología, morderse las uñas de manera crónica puede ocasionar que la mandíbula adopte una posición poco favorable para la articulación de la mandíbula. En primer lugar, se produce un desgaste en el borde de los dientes incisivos, tanto superiores como inferiores. Al mismo tiempo, se puede dañar la articulación temporomandibular, es decir, la que une la mandíbula con el cráneo, y la persona puede sentir dolor y disfunción en el movimiento de la mandíbula y en los músculos de la zona.
Sin embargo, es necesario destacar que para que se produzcan este tipo de daños el hábito tiene que ser repetitivo y prolongado en el tiempo. Es decir, morderse las uñas esporádicamente no produce los daños mencionados en la mandíbula, aunque sí puede causar infecciones en lo que se conoce como el pliegue ungueal -donde se une el dedo con la cutícula y la uña-.
En los casos más graves, cuando las personas se muerden las uñas es necesario iniciar algún tipo de tratamiento. Puede ir desde la utilización de un esmalte de uñas en los casos más leves, hasta tomar algún tipo de medicación para controlar la ansiedad, que es la causa por la que las personas se muerden las uñas en muchos casos.
Es importante destacar que muchas veces los esmaltes comunes, incluso los que han sido específicamente diseñados para combatir este tipo de problemas, no funcionan porque las personas se muerden las uñas a pesar de ello. Si esto sucede, un método algo más efectivo puede ser pintar las uñas con esmaltes en gel, que endurecen las uñas e impiden que la persona pueda morderlas fácilmente.
Por eso, antes de iniciar un tratamiento específico, es necesario conocer cuáles son los matices personales del paciente, es decir, cuáles son las causas que lo llevan a morderse las uñas. En base a ese dato, el especialista podrá indicar el tratamiento más preciso y evitar que la persona continúe con el hábito de morderse las uñas.
Cuando la piel que rodea las uñas se estira o arranca con los dientes se abre una pequeña herida, que se puede contaminar con las bacterias que se transfieren desde la boca. Así, las personas que se muerden las uñas son susceptibles a una infección en la piel que las rodea conocida como paroniquia -conocida también como uñero o panadizo periungueal agudo-. La infección puede manifestarse con inflamación y enrojecimiento de la zona, destrucción de la cutícula e incluso supuración.
Por otro lado, este hábito también puede causar una alteración permanente en la mandíbula. De acuerdo a algunos especialistas en odontología, morderse las uñas de manera crónica puede ocasionar que la mandíbula adopte una posición poco favorable para la articulación de la mandíbula. En primer lugar, se produce un desgaste en el borde de los dientes incisivos, tanto superiores como inferiores. Al mismo tiempo, se puede dañar la articulación temporomandibular, es decir, la que une la mandíbula con el cráneo, y la persona puede sentir dolor y disfunción en el movimiento de la mandíbula y en los músculos de la zona.
Sin embargo, es necesario destacar que para que se produzcan este tipo de daños el hábito tiene que ser repetitivo y prolongado en el tiempo. Es decir, morderse las uñas esporádicamente no produce los daños mencionados en la mandíbula, aunque sí puede causar infecciones en lo que se conoce como el pliegue ungueal -donde se une el dedo con la cutícula y la uña-.
En los casos más graves, cuando las personas se muerden las uñas es necesario iniciar algún tipo de tratamiento. Puede ir desde la utilización de un esmalte de uñas en los casos más leves, hasta tomar algún tipo de medicación para controlar la ansiedad, que es la causa por la que las personas se muerden las uñas en muchos casos.
Es importante destacar que muchas veces los esmaltes comunes, incluso los que han sido específicamente diseñados para combatir este tipo de problemas, no funcionan porque las personas se muerden las uñas a pesar de ello. Si esto sucede, un método algo más efectivo puede ser pintar las uñas con esmaltes en gel, que endurecen las uñas e impiden que la persona pueda morderlas fácilmente.
Por eso, antes de iniciar un tratamiento específico, es necesario conocer cuáles son los matices personales del paciente, es decir, cuáles son las causas que lo llevan a morderse las uñas. En base a ese dato, el especialista podrá indicar el tratamiento más preciso y evitar que la persona continúe con el hábito de morderse las uñas.