Ushuaia, un viaje al fin del mundo: cómo llegar, dónde alojarse y qué no te podés perder en ese lugar
Ushuaia tiene un gran punto a favor: aún cuando hay muchas formas de presentar un viaje, pocas son tan espectaculares como contar que nos vamos al fin del mundo. Pero es una descripción bastante exacta: Ushuaia es la ciudad más austral del mundo y una gran oportunidad para conocer una de las regiones más bellas de nuestra Patagonia.
Uno de los puntos más importantes es seleccionar muy bien en qué momento del año queremos conocer la ciudad. Por su posición al extremo sur, la cantidad de horas de luz por día varía mucho de acuerdo a la época del año. Por ejemplo, en junio, pleno invierno, el sol puede salir alrededor de las 10 de la mañana, y ponerse antes de las cinco de la tarde. En cambio, en verano la noche es muy corta. El sol sale alrededor de las 5 y se oculta más allá de las 22 horas. Meses como abril y mayo son muy lluviosos y grises, y son la temporada baja para el turismo. Por ello, muchos lugares suelen cerrar en esa época debido a la escasa cantidad de turistas.
Ushuaia: cómo llegar, hospedarse y moverse
Al ser una isla, la mayor parte de los visitantes que llegan por allí lo hacen en avión. Aerolíneas Argentinas y JetSmart tienen vuelos diarios hasta el aeropuerto de Ushuaia, aunque las frecuencias varían y en verano hay más opciones de horarios. Los vuelos directos son de alrededor de tres horas y media. Al momento de escribir esta nota, los valores de los viajes ida y vuelta iban desde los 52 mil hasta los 65 mil pesos promedio.
Se puede cruzar en auto, pero eso requiere un paso por territorio chileno, ya que allí está el punto más cercano con el continente. Ese cruce es más que nada usado por los residentes locales, o por turistas que quieren hacer todo ese trayecto en automóvil, algo no demasiado popular debido a la gran distancia que hay que recorrer entre los centros urbanos de la Patagonia.
Antes de la pandemia, Ushuaia había experimentado un sostenido desarrollo turístico, con muchos visitantes que llegaban tanto de Argentina como del exterior. Debido a ello van a encontrar una muy buena disponibilidad de oferta de alojamientos, y una amplia dispersión de precios. Los alojamientos más económicos pueden arrancar en estas épocas en los 12 mil pesos por día y superar los 50 mil. El momento del año en que viajen tendrá mucho que ver con los valores que paguen.
La temporada de esquí (julio - agosto) y el verano (en particular desde fines de diciembre a principios de febrero) son los momentos con los precios más caros. Abril y mayo son los meses de precios más económicos, pero el clima es muy lluvioso e inestable, y por eso es la temporada baja de la ciudad.
Dentro de la ciudad tienen servicios de varias líneas de colectivos, que unen los distintos barrios. Excepto se encuentren alojados en algún hotel más bien alejado del casco urbano, no van a tener mayores problemas en movilizarse. Para llegar al Parque Nacional, así como a destinos cercanos, hay combis la mayor parte del día.
Qué hacer en Ushuaia
El primer paso es recorrer la ciudad a pie, y no concentrarse sólo en el centro turístico. La mayor parte de los hoteles ubicados en el casco urbano se encuentran en las calles paralelas al canal de Beagle. En esta parte van a encontrar una gran cantidad de comercios y restaurantes. También pueden recorrer toda la costanera, lo que incluye el puerto, desde el que salen los catamaranes con las excursiones por el Canal de Beagle. Es muy recomendable visitar esa zona por la noche, ya que las luces del puerto y de los barcos son un espectáculo bien particular.
Si quieren recorrer la parte más cercana del Canal de Beagle, hay varias empresas que tienen servicios de excursiones desde el puerto de Ushuaia. Estos los llevarán al faro Les Eclaireurs, a algunas pequeñas islas en el canal, y a la zona de lobos marinos. En verano es posible hacer recorridos un poco más extensos, hasta las pingüineras y la Estancia Harberton. En la estancia se puede hacer un recorrido por su casco principal, conocer la zona de esquila y visitar la casa de té allí instalada. El regreso a la ciudad se realiza por vía terrestre. La última parte del recorrido es accesible normalmente entre octubre y marzo. El resto del año la excursión se limita al Canal del Beagle, con ida y vuelta por barco.
Una visita imperdible y clásica es al presidio de Ushuaia. Se trata de la cárcel más famosa de Argentina, usada desde principios del siglo XX para criminales peligrosos y luego para presos políticos. El edificio está construido como un panóptico, que permite a los guardias, ubicados en el centro, vigilar los cuatro pabellones. Uno de ellos está reconstruido, y podemos ver cómo vivían los presos, y el tipo de celdas. Pero las partes originales y sin reconstruir son muy interesantes. El frío que hace allí es impresionante, sobre todo si la visitan durante el invierno. Hay visitas guiadas, que vale la pena realizar, ya que la cárcel tiene grandes historias. Allí se alojaron presos famosos, como el "Petiso Orejudo", un asesino serial de niños que murió en la cárcel. En uno de los lados de la cárcel hay una reconstrucción del edificio del Faro del Fin del Mundo, originalmente ubicado en la Isla de los Estados (y no que no deben confundir con el Faro Les Eclaireurs, en el Canal del Beagle).
El Parque Nacional de Tierra del Fuego es uno de los más interesantes de Argentina. Por su extensión no van a poder conocerlo en un solo día, en particular porque tiene muchos senderos y zonas para recorrer. Debido a que tiene un importante número de visitantes, cada sendero está señalizado y tiene una duración aproximada en horas. Uno de los recorridos más interesantes es la Senda Costera, que los llevará por las márgenes del parque hacia el canal del Beagle. Los paisajes son inolvidables, pero la duración de la caminata es de varias horas, por lo que se recomienda hacerla en los meses con más horas de luz. Para llegar hasta el parque hay combis que salen del centro de la ciudad y que los dejarán en los caminos principales del parque. Consulten los horarios para saber hasta qué hora hay transporte disponible.
Otra excursión muy tradicional es el Tren del Fin del Mundo. Aunque el recorrido es un poco corto y algunas de las zonas por las que pasa no son las más atractivas de la isla, tiene una gran relevancia histórica. Originalmente construido por los presos de la cárcel para facilitar la explotación de madera, hoy es un tren turístico que desde las afueras de Ushuaia los dejará en el Parque Nacional. Desde allí pueden tomar algunos de los senderos y conocer mejor la zona.
Si les gusta esquiar, desde ya tienen que visitar Cerro Castor en sus meses de apertura, en julio y agosto. Es la única pista de esquí de fondo de Argentina. Pero si no les interesa tanto este deporte, es un gran lugar para encontrar mucha nieve, incluso en meses en los que no es usual en la base. Hay medios de elevación -aunque están abiertos para la temporada- y restaurante.
Por último, si tienen tiempo para salir de la ciudad, pueden visitar Tolhuin, una ciudad a 100 kilómetros de Ushuaia. Es la tercera población más grande de la isla. Ubicada en los márgenes del lago Fagnano, es un excelente lugar para hacer excursiones y caminatas. Algunas de ellas salen desde Ushuaia, y primero permiten recorrer las orillas del lago en las épocas en que esto sea posible, hacia primavera y verano. Uno de los sitios más famosos de este lugar es la Panadería La Unión, un comercio muy tradicional. Si bien en 2021 un incendio destruyó por completo el antiguo edificio, fue reinaugurado a comienzos de este año con nuevas instalaciones.