El negocio del carry trade es récord y la ganancia en dólares en 2024 es la más alta en más de 30 años
La "bicicleta financiera" que está llevando a cabo el Gobierno de Javier Milei, bajo la gestión económica de Luis Caputo, ya es la más rentable de los últimos 32 años. No se trata de una casualidad, ya que el Gobierno apostó a incentivar las apuestas al "carry trade" para atraer un flujo de divisas que permita compensar el déficit de la cuenta corriente cambiaria y le permita al BCRA adquirir dólares, tal como sucedió en los últimos meses.
De hecho, economistas estimaron las ganancias en dólares que ha dejado la bicicleta financiera en los primeros once meses del año, según la tasa Badlar y el tipo de cambio "contado con liquidación". "El 'carry' acumula 45% en dólares. Así, tenemos el mejor año, al menos, desde el inicio de la convertibilidad".
El número sería aún más alto si se toma en cuenta el rendimiento que tuvieron otros instrumentos en pesos, como las Lecap o los Boncap. Pero el Badlar facilita la comparación histórica. De hecho, a falta de un mes para que termine, la ganancia de 2024 supera el el 39% de todo 2003, y se ubica muy por encima de cualquiera de los otros años con rendimientos positivos.
Luis Caputo apuesta al Carry Trade
La combinación de la "tablita cambiaria" en el oficial, la compresión de la brecha y las tasas de intereses en pesos que se mantuvieron constantemente por encima del ritmo de devaluación son los incentivos que procura mantener el Gobierno. Esto se debe porque el carry trade incentiva a las empresas a tomar crédito (bancario o en el mercado de capitales) en dólares y liquidarlo en el mercado oficial para luego poder repagarlo. También incide en la vocación de los exportadores de adelantar liquidación y de los importadores de demorar los pagos a sus proveedores para sumarse a la bicicleta.
Esto permitió inflar la oferta de divisas en el mercado oficial y le permitió al BCRA comprar unos u$s3.000 millones entre octubre y noviembre, un monto atípico para esta época del año. Sobre todo, explicado por la colocación de obligaciones negociables y el crecimiento de los créditos bancarios en moneda extranjera (en conjunto, aportaron u$s4.900 millones en el bimestre), a partir del plafón que generó el blanqueo de capitales.
Si bien existe un consenso en que el Gobierno tiene margen para extender el esquema al menos unos meses más, a partir de la gran capacidad prestable que dejó el blanqueo y del anclaje de las expectativas de devaluación, la "apuesta no está libre de riesgos". Una modificación en las expectativas o un eventual shock externo podría dar vuelta el flujo de capitales en caso de que se desarmaran parte de las posiciones de "carry". De esta forma, las acciones fueron lo mejor de noviembre ganaron 27,9% en dólares y le sacaron 18,6% a la inflación. En cuanto a los bonos del tesoro en pesos, estos dejaron 16,5% en dólares, 12% aproximadamente los Bonares, Globales y Bonceres, 9,8% para las Lecap y 7,7% del plazo fijo.