Cuánto debe pagar el plazo fijo para que vuelva a ser negocio, según el mercado
El ahorrista está ignorando volcarse a los plazos fijos porque la renta que están pagando realmente es muy baja, y hace unas semanas se encuentra perdiendo frente al ascenso del precio del dólar como también respecto al avance de la inflación. Por eso, en los últimos días comenzó a tomar fuerza la idea que el Banco Central subiría la tasa de interés de las colocaciones para incentivar a las inversiones en pesos y desalentar la escalada del blue y el Mep. Al respecto, el mercado arriesga cuánto debería ser la "tasa ideal" para los depósitos.
En concreto, hoy la tasa nominal anual (TNA) de política monetaria es de 40%, por lo que los plazos fijos están ofreciendo un promedio de 31% anual en los bancos. Es decir, una renta de 2,55% a 30 días, que es el período mínimo de encaje establecido por este instrumento.
En tanto, la inflación, según distintos economistas se está ubicando en un piso superior al 4% mensual, mientras que el dólar escaló 11% en junio y en la primera semana de julio ya avanza 4%.
Por ende, el plazo fijo perdió todo atractivo en el ahorrista conservador y surge la necesidad de algunos bancos de incentivar a que se apueste más a los depósitos en pesos, por eso las entidades subieron unos puntos porcentuales la renta para llegar hasta un máximo de 35% anual. Una cifra que sigue siendo muy escueta si se la compara con el resto de las variables de la economía.
"Así, para una TNA del 31% promedio del sistema, una colocación a 30 días arroja una tasa efectiva anual (TEA) del 35,81%, algo que se ubica muy por debajo de la inflación esperada para el resto del año. A modo de ejemplo, una inflación del 4% mensual equivale a una TEA del 60,10%", afirma Roberto Geretto, economista y portfolio manager de FundCorp.
Y agrega: "De ese modo, se tiene que un plazo fijo tradicional no llega a compensar la inflación esperada en el corto plazo, aunque en algún mes particular pueda ganarle. Es que el problema para los plazos fijo radica en que si la inflación mensual es mayor al 2,58%, la TEA actual del 35,81% no resulta suficiente, produciendo una licuación del capital. Y para peor, en caso de ocurrir un salto cambiario al momento de salir del cepo, muy probablemente la inflación mensual sea mayor".
Para Andrés Méndez, director de AMF Economía, "está claro que el punto de ruptura fue cuando el Banco Central fijó la tasa de política monetaria en el 40%, y a partir de ahí comenzó a contraerse el stock de plazos fijos tradicionales. De hecho, en junio el promedio mensual del volumen de las colocaciones no ajustables por UVA se estuvo contrayendo 0,7%", sentencia.
Plazo fijo y tasa más alta necesaria para ahorrista
Las cifras indican a las claras que el ahorrista necesita un incentivo extra para volver a ver seductor al plazo fijo tradicional.
"Para que tenga atractivo un plazo fijo en pesos, hay que compensar al inversor no solo por la expectativa de inflación, sino otorgarle una prima por los riesgos asumidos, donde a priori no hay certezas sobre la inflación en los meses próximos", resume Geretto.
Por lo tanto, este economista considera que si la inflación se posiciona ahora en torno al 5% mensual promedio a futuro, la tasa nominal anual (TNA) de los plazos fijos debería estar en 60% para igualarla, para que la tasa efectiva anual (TEA) de la inflación y de las colocaciones bancarias se igualen en 79,60% aproximadamente.
Para Lorenzo Sigaut Gravina, director de análisis macroeconómico de Equilibra, también el plazo fijo debería pagar alrededor de 4,5% a 5% de tasa mensual, "para que no pierda contra los precios de la economía".
En ello concuerda Méndez, al afirmar que, por lo menos, el BCRA debería subir la tasa unos 20 puntos porcentuales, "o quizás algo más, para que el plazo fijo se ubique por encima del 50% anual".
"Hay dos variables que se deben tener en cuenta para que el Gobierno logre atraer a los ahorristas, la inflación y las expectativas de devaluación. En el primer caso, la tasa mensual de los plazos fijos debería ser superior al 5%. En tanto, respecto al segundo aspecto, resta esperar a ver el nuevo equilibrio transitorio que alcancen los dólares paralelos. Claro que todo, obviamente, debe ser coordinado dentro del programa monetario", resume a iProfesional Claudio Caprarulo, economista principal de Analytica.
Es que si siguen en aumento los precios de los dólares paralelos, esto puede empezar a impactar en una mayor inflación. Algo que volvería a dejar retrasada a la tasa de interés.
Plazo fijo, tasas y otros aspectos que se deben analizar
Más allá del porcentaje "ideal" que debería pagar un plazo fijo tradicional, para los economistas consultados por iProfesional se deben tener en cuenta otros aspectos que conforman a la política monetaria y que afecta a la tasa de interés de referencia.
Cabe recordar que la nueva referencia fijada por el Ministerio de Economía es que la tasa de referencia para la economía sean los títulos de deuda de corto plazo, denominados "Lecaps" (Letras Capitalizables), emitidos por el Tesoro.
"Con esto, se busca no solo mejorar el financiamiento del Tesoro, sino ir eliminando los pasivos remunerados del Banco Central, lo cual permitiría que los bancos paguen mejores tasa de plazo fijo. Sin embargo, al momento los Pases pasivos siguen siendo la referencia para los bancos, donde está costando más de lo esperado el cambio de referencia buscado", grafica Geretto a iProfesional.
Entonces, para que esto ocurra, lo que se considera es que debería acelerarse el desarme de pasivos remunerados del BCRA, y eliminar ciertas restricciones a las inversiones en Lecaps.
"La situación actual tiene muchas restricciones y problemas macro por solucionar. Uno de ellos es el stock de pasivos remunerados del Banco Central (la llamada ´bola de pases y Leliqs´). Entonces, si el BCRA sube la tasa interés para que sea positiva en términos reales, esto agrava el déficit cuasi fiscal. Por tanto, para solucionar esto ´vía licuadora´, tal como suele ocurrir en la economía argentina, lo más probable es que continúen las tasas de interés por debajo de la inflación", reflexiona Geretto.
Por eso considera que, si luego la situación macroeconómica "se acomoda y se tiene como meta salir del cepo, ahí sí es probable que se pase a tasas reales positivas. No solo por la necesidad de defender el tipo de cambio sin cepo en dicho contexto, sino porque el déficit cuasifical debería ser un problema atenuado o ya resuelto", completa este analista.
Según Joaquín Marque, economista y director de UG Valores, "la cancelación total de los Pases remunerados le permitirá al BCRA hacer política monetaria, con tasas de interés positivas, y será útil para contener el dólar y la inflación".
Por el lado de Méndez, considera que a partir de la "limpieza" del stock de Pases pasivos, las tasas de interés van a "jugar más por oferta y demanda, ya que con los Pases, o anteriormente en Leliqs, había una sobredosis de pesos, por lo tanto, si no se fijaba una especie de tasa sostén, los rendimientos se derrumbaban. Y con una tasa de política baja, los pesos comenzaron a irse del plazo fijo tradicional".
En resumen, desde el mercado se olfatea que, con menos pesos en la economía, habrá una tendencia al alza para la tasa de interés, pero se deberá mirar de reojo al precio del dólar.-