Se disparan los gastos de los argentinos con tarjetas en el extranjero: ¿más presión sobre el dólar?
En medio de la presión en el mercado cambiario y la renovada ola dolarizadora, hay un dato adicional que incomoda al Gobierno y que da cuenta del momento particular: los gastos de los argentinos con tarjetas de crédito en dólares se dispararon en las últimas semanas.
Los argentinos gastan más con tarjetas de crédito en el exterior
De acuerdo a los últimos registros del Banco Central, los gastos en dólares treparon en mayo a los u$s547 millones.
Muestra un crecimiento del 63% versus los gastos dolarizados de abril. Y se trata del myor volumen en lo que va del año.
De hecho, es el monto más alto desde la devaluación de diciembre último. Ese mes se fueron u$s833 millones en plena temporada alta por la contratación de vacaciones en el exterior. Los u$s547 millones que se gastaron en el exterior durante mayo es similar al de mayo de 2023, cuando el atraso cambiario era indisimulable.
Justamente, el problema que existe ahora es que el mercado cree que el Gobierno debe tomar medidas para recuperar la competitividad del tipo de cambio.
Presión del dólar: ¿se viene lo peor?
El economista Miguel Kiguel dijo que esta dinámica puede empeorar en las próximas semanas.
En su cuenta de la red X posteó que "Aparece un problema nuevo. El dólar turista estaba tan alto que nadie compraba dólares para viajar. Con la suba de la brecha y tomando las percepciones,hoy de nuevo es más barato comprar dólar turista que pagar con dólar MEP. Vuelve a abrirse esa canilla".
Esa demanda adicional, entonces, se daría en una dinámica que ya de por sí luce preocupante ya que viene en expansión.
Las alarmas sonaron cuando el Banco Central finalizó el mes de junio con ventas de divisas, a pesar de la cosecha gruesa.
Santiago Bausili , titular del BCRA, sostuvo durante la conferencia del último viernes que entre junio y septiembre habrá una caída de reservas por unos u$s3.000 a u$s4.000 millones. Así y todo, en bancos y consultoras económicas desconfían del camino oficial.
La pregunta es si esta estrategia funcionará como una especie de puente hacia el próximo programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que incluya el desembolso de dinero fresco para las reservas, determinante para salir del cepo.
El dólar, bajo la lupa de los inversores
La clave es el incipiente atraso cambiario, que tanto Luis Caputo como Bausili desestimaron durante la conferencia del viernes último.
De hecho, lo que para el ministro de Economía se trata de la "solidez del cepo", para el mercado, no es otra cosa que "atraso" en el tipo de cambio.
El propio FMI alertó por esa dinámica en su último reporte trimestral. Dijo directamente que el tipo de cambio real se viene atrasado "bruscamente", y que ya está en valores parecidos a los que existía en la época de Sergio Massa, en la previa a la devaluación de agosto 2023.
Bajo esas circunstancias, ahora el Gobierno reafirmó que no tiene pensado atacar esa distorsión en el valor del dólar.
Ni mediante una devaluación -el típico caso de un "stop and go"- ni mucho menos eliminando las regulaciones cambiarias.
"Nuestro objetivo principal es erradicar la inflación", enfatizó Caputo cuando el viernes le preguntaron por el levantamiento del cepo.