El dólar blue alcanzó un nuevo récord de $1.365 y la brecha cambiaria llegó al 50%
En una rueda al rojo vivo, el dólar blue se vendió este martes con una suba de treinta y cinco pesos, a $1.365 en las cuevas del microcentro porteño, con lo que marcó un nuevo máximo histórico nominal. En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación se negoció a $1.312; y el MEP se ofreció en $1.309. De esta manera, todas las cotizaciones libres superan los $1300 y la brecha cambiaria con el dólar blue se encuentra en el orden del 50%.
En el complejo escenario económico actual, los analistas relevados por iProfesional pusieron la lupa en la dinámica económica y cambiaria de Argentina. A pesar de algunos signos positivos, como el quinto superávit fiscal consecutivo y una inflación por debajo del 5%, surgen preocupaciones sobre un posible atraso cambiario.
¿Qué elementos respaldan esta inquietud? En primer lugar, las tensiones en el sector externo se hacen evidentes. El contexto internacional no favorece, y el fortalecimiento del dólar a nivel global complica aún más la situación. La Reserva Federal de Estados Unidos, tras una demora en la subida de tasas, ahora enfrenta dificultades para bajarlas. Esto dejó un dólar fuerte, impactando indirectamente en la economía argentina. Además, el real brasileño experimentó una depreciación significativa en las últimas semanas, que fue acompañado en la misma dirección por otras monedas latinoamericanas.
Por esta razón, los expertos observaron que la dinámica del Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) podría anticipar una salida del cepo más temprana, en un escenario de alta demanda privada, que indicaría que la acumulación de reservas mediante el cepo parece agotada. El debilitamiento de las commodities agropecuarias, como la soja y el trigo, también añade presión al sistema. La soja ha caído un 14% en términos nominales o un 17% en términos reales en comparación con el promedio de 2023. Además, los dólares paralelos se han escapado, y el spread cambiario supera el 40%, generando preocupación.
En este contexto, algunos expertos sugieren que levantar el cepo podría ser necesario para impulsar una recuperación más sólida. Aunque implica riesgos, un tipo de cambio más flexible podría ser el antídoto frente a las dificultades externas y los vientos en contra. Los fundamentos fiscales sólidos respaldan esta operación, y la decisión deberá tomarse con cautela y visión estratégica.
Shocks externos y la brecha complican la situación
De acuerdo con Econviews, el quinto superávit fiscal consecutivo, una inflación bastante debajo de 5% y una actividad que pareciera comenzar marcarían el inicio del sendero de recuperación. Sin embargo, advirtieron que en el camino de estas buenas noticias se cruza la discusión sobre si hay o no atraso cambiario.
"Nuestra visión es que, independientemente de si hay atraso o no, comienza a haber tensiones en el sector externo, y que el contexto internacional no ayuda. Es un problema que se empieza a notar, aunque no uno fulminante a mediados de junio de 2024", explicaron.
En este sentido, detallaron que el real en Brasil cotizaba hace algunas semanas a 4.9 por dólar mientras que hoy está por encima de u$s5,4, con otras monedas latinoamericanas que siguieron caminos similares y con un dólar que se fortalece en el mundo.
"La Reserva Federal tardó en subir y ahora tarda en bajar (quizás por buenas razones, ese juicio está fuera del espectro de esta editorial) y ahora eso deja un dólar fuerte. Es decir que sin comerla ni beberla a la Argentina le queda un peso más fuerte del que estaba dispuesto a asumir el gobierno con el pequeño efecto positivo de que las importaciones de Brasil y otros lugares son más baratas", comentaron.
¿La dinámica del MULC anticipa una salida del cepo más temprana?
Para Portfolio Personal Inversiones, el ritmo de liquidación del agro no se acelerará mucho más del nivel actual, dado que el costo de apalancamiento muy bajo (tasa de pases pasivos en 40% TNA) sumado a la perspectiva de salida del cepo conspira en contra de la liquidación.
En este sentido, explicaron que la media móvil de cinco días se encontraba en u$s132 millones y la de diez días en u$s123 millones, ambas oscilando en máximos de la administración Milei, pero por debajo de los niveles esperados debido a la alta estacionalidad. Y alertaron que incluso estos indicadores podrían estar "algo inflados", ya que se habría anticipado liquidación al haber sólo un día hábil la semana pasada.
La autoridad monetaria vendió en seis de las catorce ruedas de junio, acumulando menos de u$s100 millones en lo que va del mes, monto que contrasta notoriamente con lo acumulado en los primeros catorce días hábiles de los meses anteriores.
"Si bien la demanda privada se encuentra en máximos de la gestión actual dado que cada vez más importaciones pueden acceder al MULC, el esquema de acumulación de reservas con cepo empieza a lucir agotado con una oferta que ya no tracciona como antes. Ante una demanda y una oferta privada que comienzan a jugar en contra de uno de los principales objetivos de la administración Milei, nos preguntamos si la salida del cepo podría anticiparse", detallaron.
Por esta razón, según PPI, es una señal de alarma que las ventas del BCRA se hayan adelantado del tercer trimestre a junio, un mes que se caracteriza por la alta estacionalidad de la liquidación del agro y la acumulación de reservas.
Nuevos problemas para el BCRA
De acuerdo con la consultora que dirige Miguel Kiguel, otro problema, que no es independiente del fortalecimiento del dólar, es el debilitamiento de las commodities agropecuarias, con una soja que ya está debajo de 420 dólares la tonelada. Y que, comparado con el promedio de 2023, la soja cayó 14% en términos nominales o 17% en términos reales.
"No es una pérdida menor. Los precios del trigo también cayeron fuertemente y el maíz algo menos. Los términos de intercambio no son tan malos en términos absolutos, pero también reflejan una caída, más manejable, de 3% interanual al primer trimestre del año, seguramente algo más cuando tengamos datos del segundo trimestre", señalaron.
Por otro lado, alertaron que en el plano local también aparecen algunos nubarrones y explicaron que los dólares paralelos se escaparon cuando el Banco Central bajó mucho la tasa de interés y había dudas sobre la aprobación de la Ley de Bases, y no bajaron significativamente una vez que la ley se aprobó. El spread cambiario está por encima del 40%, un valor que consideran preocupante.
"El segundo dato es que en junio el Banco Central casi no compró dólares en el mercado cambiario, a diferencia de meses anteriores en que compraba más de tres mil millones de dólares por mes. Ahora que necesita urgentemente aumentar reservas y no lo está logrando es un problema. Esto nos lleva a pensar que si la situación no mejora necesitará más flexibilidad cambiaria, en línea con lo que recomienda el FMI en el informe del staff report."
Para Econviews, para pasar de un vuelo bajo a algo más robusto "habrá que correr riesgos" y levantar el cepo. Esto es una operación que potencialmente tiene más beneficios que costos, especialmente dado que los fundamentals fiscales son sólidos. Además, señalaron que un tipo de cambio más flexible traerá los antídotos que se necesitan si la cuestión externa se pone aún más difícil y el viento de frente lastima.
A cuánto cotiza el dólar blue hoy
El dólar blue se ubicó en $1.365 para la venta y a $1.335 para la compra.
Cómo operan los dólares financieros
En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación se negoció a $1.312 y el MEP se ofreció en $1.309.
Cuál es el precio del dólar oficial
La cotización del dólar minorista del Banco Nación cerró a $927,50.
El dólar mayorista se negoció a un promedio de $910,50.
Por su parte, el dólar solidario y dólar tarjeta se ubicaron en $1.484.
La brecha cambiaria
Por último, la brecha cambiaria entre el dólar mayorista y los diferentes tipos de cambio, se encuentra de la siguiente manera:
• Blue: 50%
• CCL: 44%
• MEP: 44%