¿Tarjeta de crédito o efectivo?: esto debés tener en cuenta al momento de elegir cómo pagar
En momentos en los que la financiación con tarjetas de crédito permite comprar o reponer artículos del hogar que pueden considerarse imprescindibles, es conveniente darle una mirada a los planes que ofrecen cada una.
¿Tarjeta de crédito o efectivo?: así es la tasa de interés al pagar en cuotas
A manera de ejemplo, tomando una compra de un artículo para el hogar que tiene un precio de $25.000, si se analiza el cuadro de cuotas y tasas de interés implícitas que se cobran en el caso de las tarjetas Visa y Mastercard, se aprecia claramente que se aplica una escala ascendente que parte de un piso elevado, pues para tres pagos es del 10,7%. Este porcentaje se eleva a poco más del 11% cuando se duplica el plazo, avanza hasta casi el 12% para 9 pagos y concluye en el 12,9% para el año y medio.
De la aplicación de estos porcentajes, surge que las cuotas parten de los $10.176 para tres pagos, pasan a $5.932 para 6 cuotas y llegan a los $3.631 para las 18 cuotas.
Haciendo una cuenta muy sencilla, si se empieza pagando $25.000 al contado, se terminará pagando casi $66.000 divididos en 18 cuotas, pero lo más interesante es observar que ocurre si se ajustan las cuotas en función de la inflación esperada, para tener una idea aproximada de cuanto se estaría pagando en relación con el precio contado. Este cálculo habitualmente es tomado en cuenta para tener una idea aproximada si realmente conviene esta opción, con el argumento que la "inflación la termina pagando sola".
Tomando como base la información que proporciona el REM (Relevamiento de Expectativas del Mercado) que difunde mensualmente el Banco Central, que estima una inflación minorista del orden del 4,5% mensual para los próximos meses, en el caso de Visa / Mastercard, en el plazo más extendido se estaría devolviendo 1,7 veces el artículo que se compró, pues el monto ajustado rondaría los $43.000.
Pero si se decide financiar la compra con Amex, esa proporción ya se supera para las 9 cuotas, pasa a más de dos veces para el año de plazo y trepa hasta por encima de las 3 veces cuando se paga en 18 cuotas.
¿Qué pasa con los precios al utilizar la Cuota Simple?
La Cuota Simple es el plan de financiamiento que permite comprar diferentes productos y servicios en 3, 6, 9 y 12 cuotas con tu tarjeta de crédito. En la práctica, es una derivación de la famosa Ahora 12, aunque con algunas limitaciones.
Cuota Simple presenta varias limitaciones, siendo las más importantes las siguientes:
- Se aplica solo a una lista relativamente acotada de determinados productos o servicios de origen nacional
- Los plazos de financiación van desde las 3 a las 12 cuotas, dependiendo del producto o servicios que se deseen adquirir
- Los lugares de venta deben estar adheridos al Plan
Uno de los aspectos que pueden generar confusión al momento de realizar la compra es que el comercio no informa la tasa de interés que se aplica, sino el recargo correspondiente. Es decir, que si bien despeja las dudas sobre el monto de las cuotas a pagar, no toma en consideración este dato, por lo que no permite hacer comparaciones entre el costo financiero y la inflación futura.
En lo que hace a los recargos, estos toman como base una tasa nominal anual del 50% y a partir de ella se calculan los recargos, que van desde el 7,88% para las 3 cuotas, suben al 16,08% para las 6, al 24,85% para las 9 y finalmente al 34.22% para los doce pagos mensuales.
En este caso, se terminará pagando entre unos $27.000 y $33.555 según los plazos, pero lo interesante del caso es que si se recalculan las cuotas en función de la inflación esperada prácticamente se está devolviendo el monto original e incluso algunos pesos menos según los plazos. En este caso, entonces, la inflación terminará "neutralizando" los intereses.