Por qué el mercado anticipa que la rentabilidad del plazo fijo no repuntará en el corto plazo
Ni la aprobación de la Ley Bases ni del paquete fiscal nuevamente en la Cámara de Diputados podrán hacer que en el corto plazo los bancos empiecen a remunerar mejor los depósitos en pesos del público. Puede ser que sea un proceso que recién comience.
En la última presentación pública que hizo el ministro de Economía, Luis Caputo, anticipó que "el tiempo de las tasas de interés negativas terminó", y que se aproxima un momento en el que la gente va a ser remunerada justamente por ahorrar sus pesos.
¿El plazo fijo volverá a ser negocio?: esto tiene que suceder
No está claro si ese proceso de reversión se va a producir por una suba de las tasas o porque el Gobierno espera que siga bajando la inflación y con ello, sin alterar nada, se produciría ese resultado naturalmente.
Para los banqueros, todavía eso está en un terreno indefinido. Hay que recordar que -actualmente- la tasa de referencia de política monetaria del Banco Central es el 40% anual nominal, lo que da un rendimiento estimado de un 2,6% mensual.
Lo que es cierto es que la denominada tasa Badlar que es la que pagan los bancos por los depósitos a plazo fijo mayoristas se ubica en 36,4% nominal anual, según datos del Banco Central. Los bancos en la plaza ofrecen menos que eso a los ahorristas.
El titular del Palacio de Hacienda quiere que los bancos tomen como referencia la tasa que el Ministerio de Economía le paga al mercado. Hoy es de 4,25% mensual y equivale a la inflación y que eso se pueda ver reflejado en los depósitos del público ahorrista.
Caputo parece haber puesto el freno de mano al traspaso de deuda del BCRA al Tesoro, que es la clave de todo esto: cuando los $20 billones que tiene todavía el BCRA en pases estén en el Tesoro, ahí es cuando se podrá empezar a ver si la tasa de Lecaps se torna en la tasa de referencia para los bancos.
En la última licitación de Letras Capitalizables vencían unos $5,4 billones y tomó financiamiento neto por solo unos $200.000 millones más.
Se está lejos todavía. Adrián Rozansky, de la consultora 1816 no descarta que se termine convergiendo hacia ese nivel, pero considera que "es un proceso gradual". Desde su perspectiva, "se pretende que la tasa de pases del Banco Central sea testimonial".
"Cuando el Gobierno decida eliminar los pasivos remunerados, el Tesoro va a tener que ofrecer licitaciones sin tope de emisión", dijo Rozanski, quien consideró que esa va a ser la primera señal de que la tasa del Tesoro será la nueva referencia del sistema.
Pero además advirtió que se van a tener que hacer cambios normativos, como es el caso de permitir a los bancos que accedan a un mercado secundario de Lecaps. "No estamos ahí, pero estamos yendo hacia ahí", explicó en una reciente charla con inversores.
Por su lado, Eric Ritondale, de Puente, no descarta que en algún momento el Gobierno tenga que ir a un esquema de tasas de interés más altas a través de Lecaps, en un contexto en el cual tenga que sacrificar parcialmente el ancla cambiaria.
Por esa razón, los operadores están evitando colocaciones a 2025, porque creen que puede haber un overshooting de tasas. O van por los tramos cortos o tratan de ir hacia el 2027 y 2028. Los precios de los bonos estarían marcando un ambiente de menos restricciones.
Aumentan levemente los depósitos de plazo fijo
Después de tres meses, los depósitos a la vista crecieron -en mayo- a un ritmo del 8,5% mensual real. En términos anuales siguieron en terreno negativo (26,7%).
Los plazos fijos continuaron creciendo, aunque desacelerando su ritmo respecto al mes previo: +2,8% mensual real contra 20,4% de abril. De todos modos, es el depósito con peor caída interanual, con el 47,6% real.
El rubro que refiere principalmente a depósitos remunerados de FCI, volvió a marcar una caída real, este mes del 6,9%. En términos anuales es el único en mostrar un aumento: 11,8% real.
El mes pasado el agregado monetario M3 privado, que es el circulante del público más los depósitos privados, registró un incremento de más del 4% en términos reales tras 15 meses consecutivos de caída.
Lo más relevante fue que, a diferencia del mes anterior cuando hubo un esbozo de mejora de la mano del crecimiento de los depósitos, esta vez fue la demanda de circulante la que subió en términos reales a niveles de casi $8,6 billones promedio mensual.