Caputo relaja el cepo al dólar, pero sin descuidar reservas del BCRA: así funciona nuevo bono para empresas
El Banco Central (BCRA) licitará este miércoles 25 de junio un nuevo tramo de la serie 3 de los bonos para importadores, conocidos como BOPREAL. Se trata de la sexta subasta de estos instrumentos destinados a resolver el problema de las deudas comerciales del sector y se supo que analiza la posibilidad de lanzar otro bono destinado a canalizar el envío de utilidades y dividendos de las empresas hacia el exterior. ¿De qué se trata y cómo se enmarca la decisión en el objetivo de levantar el cepo que tiene el Gobierno?
Sería una nueva serie de Bopreales y el Gobierno ya comenzó a sondear e los potenciales interesados para ver qué posibilidades de éxito puede tener la iniciativa, que, tal como señala a iProfesional Joel Lupieri, de Epyca Consultores, apunta a "sacar a los dividendos retenidos de la ecuación del cepo cambiario" y explica que esto podría ser útil para mantener más estable la cotización de los tipos de cambio.
"Evidentemente, ante la falta de dólares, se busca administrar el flujo de salida de dividendos mediante este bono, pero, hay que ver qué nivel de aceptación tiene", apunta el economista Pablo Ferrari.
Dólar calmo y el levantamiento del cepo, objetivos del nuevo Bopreal
En igual sentido, el experto en economía y finanzas Salvador Di Stefano evalúa que "es una propuesta interesante porque sumará dólares presentes a las reservas y pasivos al Banco Central".
Y es que, para el economista Federico Glustein, "puede ser una solución para los u$s4.000 millones que saldrían en materia de dividendos y utilidades si se abre el cepo repentinamente, que se estima podría generar un stock reprimido". Explica que ese monto responde a que una parte de esos dividendos y utilidades ya se reinvirtió.
Así, tal como señala Lupieri, tiene sentido esta nueva licitación, "a fin de restar presión futura al tipo de cambio ante una eventual apertura del cepo".
Registro de dividendos: un paso clave para la puesta en marcha
Sin embargo, tal como lo hizo con la deuda de los importadores para los Bopreales, Gluetsin advierte que, para iniciar este proceso, "el BCRA debería abrir un registro para saber cuál es el número real del monto de dividendos y utilidades que entrarían en la licitación". Ese sería el primer paso que se debería dar para dar marcha a esta iniciativa, tal como se hizo con la deuda comercial.
Una vez hecho ese paso, sí se podría comenzar a licitar. Y Glustein asegura que tiene muchas chances de tener buenos resultados. "Le auguro éxito porque los BOPREAL fueron una buena medida para canalizar parte de la deuda comercial de los importadores, tiene cierta reputación en base a lo hecho por el Gobierno hasta ahora para resolver el asunto".
Asimismo, explica que sería una herramienta válida para avanzar en el proceso de salida del cepo porque podría servir para reducir la cantidad de deuda del BCRA y eso demandaría menos divisas para abrir las restricciones cambiarias y hacerlo más cerca en el tiempo
Nuevo Bopreal: posibilidades de éxito
Di Stefano coincide en señalar que, seguramente, "el Bopreal será un éxito, como todos los anteriores". Sin embargo, aclara que el gran tema hacia adelante es "ver si el gobierno tiene solvencia intertemporal para pagarlo".
Detalla que el Gobierno quiere tener superávit a cualquier precio para honrar los contratos, pero aclara que "no sabemos si las inversiones productivas podrán empujar al crecimiento del país para poder honrar las deudas sin grandes sacrificios".
Afirma, así, que se puede "emitir Bopreal, pero se necesita inversión para repagar a futuro los dólares que te dan hoy" y señala que, para eso, se necesita confianza. "Hoy el inversor argentino dice ‘ausente’ y el extranjero necesita leyes que, por ahora, no están aprobadas", apunta. Y anticipa que hay que ver qué sucede.
Por su parte, Ferrari alerta que, "ante la falta de dólares, el BCRA busca administrar el flujo de salida de dividendos mediante este bono", pero, por otro lado, hay que ver qué nivel de aceptación tiene. Y explica que, en definitiva, se trata de patear hacia adelante el flujo de dólares necesario.
"Lo que será clave será la aceptación que tenga y hay que ver qué tan viable es aplicar esta medida, sobre todo teniendo en cuenta las voces de alerta sobre el manejo de la economía que están realizando desde el Gobierno", concluye Ferrari.