Pesos vs dólar: quién es el ganador en una canasta de monedas en Argentina, según un gurú de la city
En un escenario económico marcado por la incertidumbre y la volatilidad, el análisis minucioso de las opciones de inversión se vuelve crucial para los agentes económicos. En este contexto, surge una tendencia sorprendente: el peso argentino emerge como un ganador frente al dólar estadounidense en términos de rentabilidad, desafiando las expectativas tradicionales, según el análisis que hace el gurú de la City Salvador Di Stéfano.
La inflación proyectada para marzo de 2025, según estimaciones internas, se sitúa en un asombroso 137,4% anual. Ante este panorama, Di Stéfano destacó que "surge la necesidad" de identificar las inversiones más atractivas. Contrario a lo esperado, el dólar futuro, en promedio, muestra una tasa efectiva del 128,4% anual, apenas por debajo de la inflación prevista en un 3,8%. Este indicio revela la falta de expectativas de que el dólar mayorista supere el ritmo de la inflación en el corto plazo.
En el análisis de los instrumentos dolarizados, se proyecta una devaluación del dólar mayorista del 108,9% anual, lo que lo sitúa aproximadamente un 12% por debajo de la inflación esperada. Por otro lado, el dólar CCL muestra una disminución del 26,1% en comparación con la inflación proyectada. En ese sentido, el analista financiero dijo que estas cifras, que pronostican un dólar mayorista a $1.830 y un dólar CCL a $1.922 para marzo de 2025, refuerzan la tendencia a favor del peso argentino.
En el ámbito de las inversiones en pesos, el plazo fijo tradicional sobresale con una tasa de interés positiva del 20,7% anual frente a la inflación. Este atractivo rendimiento impulsa a los agentes económicos a desprenderse de los dólares y colocarse en pesos, especialmente dado que esta tasa está respaldada por el Banco Central. En contraste, los plazos fijos UVA y los Bonos UVA muestran rendimientos similares a la inflación, pero no alcanzan el atractivo del plazo fijo tradicional.
Qué pasa con el Bopreal
Di Stéfano dijo que el caso del Bopreal, un título en dólares, "también merece atención". Esta serie se abrió en cuatro partes, con precios de adquisición que oscilaron entre U$S65 y U$S72. Suponiendo una compra a U$S 70, se observa una ganancia significativa en las primeras dos partes de la inversión, aunque las series C y D aún se mantienen cerca de los precios de compra. La posibilidad de arbitraje entre los títulos Bopreal y los bonos soberanos, como el AE38, añade complejidad al análisis.
En resumen, el analista dijo que "la diversificación de inversiones" se presenta como una estrategia clave en un entorno económico caracterizado por la competencia entre monedas. Los bonos ligados al dólar mayorista muestran tasas negativas, mientras que los bonos ligados al dólar CCL ofrecen rendimientos que oscilan entre el 8,0% y el 10% anual. Por su parte, los bonos ligados al dólar MEP muestran una amplia gama de rendimientos, desde el 11% hasta el 30% anual, dependiendo de su respaldo y plazo de vencimiento.
El dólar blue, una referencia popular en Argentina, proyecta un rendimiento entre un 20% y un 26% inferior a la inflación prevista a un año. Mientras tanto, el plazo fijo tradicional ofrece un rendimiento positivo del 20,0% anual a un año vista.
Es importante destacar que, mientras el Banco Central mantenga las tasas de interés positivas frente a la inflación, es probable que el dólar permanezca estable. Sin embargo, esta política puede tener implicaciones negativas para la actividad económica a largo plazo, especialmente en un contexto de baja capitalización.
En conclusión, para Di Stéfno las inversiones en pesos muestran un desempeño sorprendente frente al dólar en el actual escenario económico argentino. Sin embargo, la diversificación y la consideración cuidadosa de los riesgos siguen siendo fundamentales para los inversores. La búsqueda de un equilibrio entre activos dolarizados y pesos se vuelve crucial en un entorno marcado por la incertidumbre y la volatilidad.