Baja la tasa del plazo fijo y el mercado enciende sus alarmas: ¿impactará en el precio del dólar?
En una muy "riesgosa" medida, según las propias palabras que ejecutivos de bancos mencionaron a iProfesional, el Banco Central bajó la tasa que paga el plazo fijo unos 23 puntos porcentuales hasta un 110% anual.
Hecho que enciende todas las alarmas del mercado por la escalada tan elevada que muestra la inflación y la necesidad que tienen los ahorristas de cuidar el poder de compra de sus pesos.
Por ende, las miradas apuntan también ahora en saber qué puede ocurrir con el precio del dólar y con el plazo fijo UVA, que es el que ajusta por el índice CER (inflación), dos jugadores clave que están vinculados de forma directa a los depósitos en pesos.
"En el contexto de un excedente significativo de liquidez y de elevada inflación, el Directorio del BCRA consideró prudente mantener una tasa de interés mínima para los depósitos a plazo fijo, que decidió establecer en 110% nominal anual", comunicó la entidad monetaria este lunes.
De esta manera, la tasa nominal anual (TNA) deja de ser de 133% para las colocaciones bancarias realizadas por personas físicas por montos menores a los $30 millones, para pasar a validarse en 110% anual.
Es decir, se ganará en un plazo fijo un 9,04% cada 30 días, una reducción sensible respecto al 10,93% que se obtenía hasta este lunes.
Plazo fijo con peligro de inflación y dólar
En este escenario, el plazo fijo tradicional pierde más atractivo frente al avance de los precios de la economía, ya que la inflación de noviembre fue de 12,8% y, según proyecciones de economistas privados, este diciembre sería de 25% o más.
Por ende, el 9,04% que ofrece a partir de ahora quedaría muy por detrás, y con renta negativa, comparado con el ritmo de la escalada de los precios.
Quizás por eso el Banco Central aclaró que quiere impulsar los plazos fijos UVA, que son los que ajustan por el índice CER (inflación) y cuyo período de encaje es de un mínimo de 90 días.
"Resulta necesario que el sistema bancario continúe ofreciendo al público depósitos a plazo fijo ajustables por UVA. Para otorgarle previsibilidad a la disponibilidad de los recursos, decidió eliminar la tasa mínima de precancelación de estos últimos", indicó la autoridad monetaria.
El problema es que los bancos no le encuentran mucho atractivo a pagar como la inflación, cuando la tasa de referencia, que ahora es la de los Pases a un día, será a partir de este martes de 100% nominal anual.
"Es una locura, suena muy voluntarista y es muy jugada esta medida. Se pone mucha tensión en un momento donde se sabe que la inflación será muy alta, ya que hay que ver cuánto se convencerán los ahorristas que hacen plazos fijos en dejar la plata ahí. Puede salir bien, puede salir mal", advierte a iProfesional un ejecutivo de un importante banco.
Al respecto, agrega Claudio Caprarulo, economista principal de Analytica Consultores: "Es una medida riesgosa, el ahorrista minorista tiene más incentivos a dolarizarse. De hecho, hay más expectativas de suba del dólar oficial, ya que se anunció que se iba aplicar una devaluación de 3% mensual".
Bancos en alerta y plazo fijo UVA en el foco
La medida oficial de bajar las tasas de interés de los plazos fijos al 110% nominal anual y pretender que las entidades brinden más depósitos UVA, mientras que la tasa de referencia cayó al 100% (Pases), causa también un desincentivo a que los bancos deseen ofrecer estos instrumentos a los ahorristas.
"Hay que ver qué esquema piensa el Gobierno sobre los bancos para que lleven el financiamiento que estaban teniendo en las Leliqs (Banco Central) hacia el Tesoro", sentencia Caprarulo a iProfesional.
En este sentido, una fuente bancaria afirma que se debe esperar hasta la licitación oficial del miércoles para conocer cuál será la tasa que recibirán los bancos por las LEDES, que son las Letras a Descuento (o bonos) que emite el Tesoro Nacional en plazos cortos.
Si bien todavía no hay definiciones, desde el ámbito bancario se prevé que rindan 15% de tasa efectiva mensual, o sea, alrededor de 180% de tasa nominal anual (TNA).
"Creo la combinación de la baja de tasa de plazos fijos tradicionales y el mantenimiento de los plazos fijos UVA puede disparar la demanda de estos últimos, en un momento en que los bancos tienen pocas opciones para calzarlos y, en consecuencia, vienen desincentivándolos. De hecho, en los últimos días se conocieron reportes de bancos que no los estaban ofreciendo o no estaban disponibles en home banking", advierte a iProfesional Isaías Marini, economista de Consultatio.
Por lo tanto, acota que "es posible que esta demanda se vuelque, entonces, a otros instrumentos de cobertura y que la brecha cambiaria, que está en mínimos de los últimos años, vuelva a ampliarse".
En tanto, Andrés Salinas, economista e investigador de la Universidad de La Matanza (Buenos Aires), "la última vez que la tasa de plazos fijos a 30 días había bajado fue el 19 de octubre de 2020".
Y completa: "La clave está en que con esta tasa la licuación va a ser aún mayor. Estamos transitando meses de inflación a dos dígitos, de hecho, algunas consultoras ya midieron un 18% para la primera quincena de diciembre. Y para el primer trimestre de 2024 se proyectan tasas aún mayores, rondando los 25% a 35% mensuales, por lo cual la tasa ahora va a estar en terrenos reales mucho más negativa que en el pasado. Es decir que esto proporciona una mayor flexibilización de los bancos para poder financiar al Tesoro, ya que así su dinero se les licuaría menos rápido".