Deuda en pesos: Massa enfrenta última licitación del mes, ¿puede haber un episodio de "estrés"?
El ministro de Economía Sergio Massa enfrentará este miércoles 27 de septiembre la última licitación de deuda del Tesoro del mes en la que buscará cosechar fondos para cubrir vencimientos por unos $246.000 millones.
Se trata del tercer test del mes en el mercado dado que el 1 de septiembre hubo una colocación de deuda que no estaba prevista en el calendario original de operaciones y que la mayoría los analistas vincularon a la necesidad de conseguir financiamiento para las medidas del Plan Platita que el gobierno anunció para mitigar los efectos de la devaluación.
Los analistas prevén que el Tesoro no tendrá dificultades en renovar los vencimientos de esta semana, dado que es un monto bajo y además porque esperan participación del sector público dado que el Banco Central estuvo comprando títulos de deuda en pesos en el mercado secundario.
Para los especialistas, la clave en esta oportunidad estará en ver dónde estará la demanda del mercado en un contexto de debilidad que exhibe la deuda en pesos durante septiembre. Al respecto, Pedro Siaba Serrate, estratega de PPI remarcó que "septiembre fue un mes muy flojo para la deuda en pesos, lo más relevante fue el incremento de la percepción de riesgo de estos instrumentos ante la incertidumbre sobre el panorama macroeconómico".
"En los últimos años, el componente indexado de la deuda en pesos trepó desde 54,9% a fines de la administración de Macri hasta alrededor de 96,1% en agosto 2023. No obstante, si los inversores creen que la nominalidad se espiralizará, es lógico observar una disminución del apetito incluso de los títulos indexados", alegó.
De cara al último trimestre del año, habrá que afrontar vencimientos de deuda por alrededor de $4.4 billones. A eso se sumarán las necesidades de financiamiento que implicarán las medidas del plan Platita que si se quiere evitar un incumplimiento de la meta monetaria con el FMI deberían buscarse en el mercado de deuda local. En ese contexto, algunos analistas advierten que el mercado de deuda "no está exento de sufrir un estrés" en el tramo final del año.
Deuda en pesos: este será el menú de la licitación
Los analistas de PPI estiman que el 95% de los vencimientos se encuentra en manos de privadas. A su vez, en Facimex Valores calculan que 33% están en manos de Fondos Comunes de Inversión, y 8% en poder de bancos.
Para esta subasta que se desarrollará en un escenario en el cual el dólar blue pegó el martes un salto de $13 y el CCL se acerca a $780, la secretaría de Finanzas elaboró un menú de 6 instrumentos de deuda, casi todos ajustados por inflación en un escenario donde las proyecciones de consultoras estiman que el costo de vida en septiembre también será de dos dígitos.
En el menú hay una Letra de Liquidez del Tesoro (LELITE) con vencimiento el 18 de octubre de 2023 que puede ser suscripta solo por FCI.
Además ofrece dos Letras del Tesoro ajustada por CER (es decir que indexa por inflación) con vencimientos el 18 de enero de 2024 (X18E4) y el 20 de febrero de 2024 (X20F4)
Contempla también dos bonos del Tesoro ajustados por CER (Boncer) que dan cobertura inflacionaria y caducan el 20 de mayo de 2024 (T6X4), y el 14 de octubre (T4X4)
A su vez brinda un nuevo Bono Dual que ajusta por inflación o por tipo de cambio oficial, lo que rinda más a la fecha de vencimiento, que expira el 30 de junio de 2024.
Con este menú, Economía pretende inicialmente conseguir $45.000 millones en títulos en moneda local y el equivalente a u$s50 millones. La recepción de las ofertas comenzará a las 10.00 horas de este miércoles y finalizará a las 15.00 horas.
Deuda en pesos: las perspectivas de los analistas
Los analistas de Facimex Valores esperan que "el Tesoro logre un roll over mayor al 100% por dos razones: es el tercer vencimiento más liviano del año a precios constantes, superando solamente a los del 27 de enero, y el BCRA compró deuda en pesos por $59.000 millones desde la última licitación".
Y es que los especialistas explican que un mecanismo recurrente para garantizar un buen resultado durante este año de incertidumbre electoral fue que el BCRA compra letras y bonos en el mercado secundario para proveer de liquidez a entidades públicas que pueden así luego ingresar en las licitaciones.
Así, en Facimex consideran que "la verdadera clave de la licitación estará en ver dónde está la demanda del mercado en un contexto que muestra curvas flojas, y en un contexto donde crece el estímulo fiscal". Al respecto, estiman que el costo de las medidas post PASO asciende a 0,9% del PBI.
A su vez, Siaba Serrate juzgó que "los vencimientos no parecen ser desafiantes ya que rondan la cifra de $246.600 millones", y afirmó que "no cabe duda de que lo más complicado en esa oportunidad es el contexto de debilidad que exhibe la deuda en pesos".
El analista destacó que "Finanzas ofrece el bono Dual (TDJ24) que se llevó la mayor parte de lo capturado en la última licitación (representó casi el 60%), y no ofrece en sus propuestas bonos con cobertura pura a través de dólar linked que no generó tanto interés y representó tan solo el 0,5% de lo levantado".
"Teniendo en cuenta que la deuda en pesos viene muy golpeada las últimas semanas, creemos que las LECER cortas pueden captar un poco más de interés, aunque es importante destacar que todas las alternativas caen en la nueva administración".
Además, prevé que el Bono Dual "podría ser un refugio para los pesos excedentes si ofrecen una tasa superior a la operada en el secundario". Es decir que cree que "el Tesoro debería ofrecer rendimientos mayores a del secundario para atraer la demanda en un contexto donde los inversores privados buscan evitar el riesgo soberano a toda costa.
El analista financiero Gustavo Ber también opina que el Tesoro "podrá superar sin inconvenientes la licitación, consiguiendo posiblemente una vez más un importante financiamiento neto ya que vuelve a ofrecer en el menú títulos ajustables por CER y Duales que son en la actualidad lo más demandados". Sobre la ausencia de títulos dólar linked, el experto esgrimió que "no venían captando mucho interés recientemente, más allá de las expectativas de nuevas devaluaciones a futuro, a raíz del deterioro de la competitividad".
Deuda en pesos: ¿puede haber un episodio de estrés en el último trimestre?
Un informe de la consultora LCG calculó que las medidas del llamado plan Platita tendrán un costo fiscal total de 1,2% del PBI con lo cual proyectó que el déficit primario "cerrará en un mínimo de 3% del PBI este año". Y sostruvo que "la posibilidad de financiar esta brecha fiscal tendrá al BCRA también como protagonista, ya sea por la transferencia de recursos vía Adelantos Transitorios o por la compra de títulos del Tesoro en el mercado secundario para sostener y habilitar nuevo fondeo de privados".
En ese marco, la consultora estimó que "las necesidades de financiamiento para lo que resta del año suman $ 7,4 billones (equivalentes a 3,9% del PBI) entre vencimientos de deuda en pesos ($ 4,4 billones) y gap fiscal ($ 2,9 billones)".
"Sin la demanda de asistencia directa al BCRA, cubrir el total de necesidades implicará una tasa de rolleo de los vencimientos superior al 200%. En medio de un proceso electoral que conlleva gran incertidumbre respecto a la situación económica de los próximos meses, cabe pensar que los giros del BCRA para financiar la brecha serán determinantes. Todavía cuenta con un margen de $ 3,2 billones, que cubrirían 40% del total".
No obstante, la consultora planteó que " 2023 terminará estando muy lejos de la convergencia fiscal planeada a principios de año y acordada con el FMI y que en 2024 la corrección de algunos precios atrasados redundará en una inflación aún alta" y advirtió que "en esa transición el mercado de deuda no está exento de sufrir un estrés por las dudas acerca de la capacidad y voluntad de pago de un nuevo gobierno", y acotó que "habrá que esperar hasta octubre o noviembre para tener un panorama más certero".
Por su parte, Sebastián Menescaldi, director de Eco Go, indicó que "el BCRA está comprando la deuda en el mercado, está emitiendo pesos y se los da al sector público para estar preparado para poder afrontar todos los gastos que está comprometiéndose en el último trimestre del año, con lo cual no veo riesgo de la deuda en pesos porque creo que va a seguir emitiendo para rescatar esa deuda"
Según su visión, "si hay un episodio de default no va a ser hasta el 10 de diciembre de este año". Y admitió que después de esa fecha que asume el nuevo gobierno "puede haber un episodio de stress y pérdida de valor teniendo en cuenta la expectativa del que venga y lo que diga que va a hacer con la deuda".
Por su parte, la economista Natalia Motyl aseguró que "parte de la deuda en pesos va a terminar siendo licuada con la aceleración de la inflación, representa $3 de cada $10 de deuda que son títulos sin ajuste, no es muy preocupante eso".
"Ahora, $7 de cada $10 pesos se ajustan o a inflación o a evolución del tipo de cambio y eso sí es un problema", alertó. La economista auguró que "el problema lo vas a tener en 2024, en el primer cuatrimestre vas a tener que afrontar $20 billones, 3 veces más de lo que tuviste que afrontar en el último cuatrimestre del año".
Para el economista Federico Glustein "sin dudas el plan Platita le pone un manto de riesgo a la deuda en pesos, dada la situación macro, la inflación crece, y una gran parte de la deuda está atada a CER, el panorama el complejo".