La verdad sobre la baja del dólar que usan las empresas: ¿puede volver a acelerar?
El dólar contado con liquidación (CCL) retrocedió esta semana hasta la zona de los $740 y acompañó la baja del blue, que cerró este jueves a $720. Las bajas trajeron cierta calma luego de que la semana pasada el CCL superara los $800, lo que sembraba dudas sobre que el tipo de cambio mayorista logre quedar fijo hasta fin de octubre y planteaba interrogantes sobre el impacto en los precios.
Las bajas de esta semana llevaron algo de tranquilidad en un mercado recalentado por la incertidumbre electoral y la desconfianza que generan las propuestas de Javier Milei, además de los recientes anuncios de medidas del Gobierno que inyectarán más pesos en la economía.
Con una inflación acumulada del 113,4% anual y una estimación de precios de dos dígitos para los meses de agosto y septiembre, toda baja en los tipos de cambio genera algo de aire.
La semana pasada, los especialistas vieron en la espiralización del CCL una demostración de que el apetito por las divisas estadounidense buscaba canalizarse de cualquier manera, incluso convalidando precios que en términos históricos eran altos. Se comprobó cierto.
Dólar: ¿por qué se disparó el CCL en su momento?
Joel Lupieri, economista de la consultora Épyca, señaló que "el CCL subió como consecuencia de que los inversores buscaban tanto dolarizar como girar al exterior sus dólares, de manera simultánea. La compra de contado con liqui implica que la liquidación de la venta contra dólares se acredite en una cuenta en el exterior. Mientras más personas busquen salir del país, más demanda habrá y mayor será la presión sobre el tipo de cambio implícito".
En la misma línea, el Gerente Banca Empresas de Cocos Capital, Gabriel Menace, indicó a iProfesional que "la suba de los dólares financieros fue un indicativo de que la demanda de pesos se deprime cada vez más. En criollo, nadie quiere tener moneda local en la billetera. Los inversores buscaron refugiarse en moneda dura cada vez más, y eso redundó en una suba de los dólares financieros. El CCL tocó los 800 pesos por dólar y la brecha CCL/dólar oficial alcanzó valores máximos".
¿Crecen las chances de una nueva devaluación?
El Gobierno nacional realizó el día después de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) una devaluación del 22% en el tipo de cambio oficial mayorista y lo llevó a $350 por dólar. En ese momento, se anunció que quedaría fijo hasta fines de octubre. En el mercado no había tantas certezas acerca de la capacidad de fuego del Banco Central para mantener a raya el dólar en ese valor. Esa desconfianza se vio reflejada en los mercados de futuros, con una divisa que se negoció en valores superiores a $430 en los contratos de octubre y a $550 en los de noviembre. A partir de la baja del CCL y el blue, también retrocedieron los contratos de futuros que ahora se ubican en $409 y $509, respectivamente.
Fuentes del mercado señalaron que los dólares "habían subido mucho" y cuando eso pasa suele sucederlo un movimiento descendente, aunque nunca recupera los valores previos a las subas. Otros analistas también indicaron que la baja del CCL puede deberse a que a partir del nuevo Programa de Incremento Exportador (PIE) conocido como "dólar soja" que lanzó el Gobierno, el mercado se anticipa a esa posible mayor oferta o menor demanda de divisas que puede haber".
Los descensos en las cotizaciones son una buena noticia para el Gobierno, ya que la suba del CCL por encima de los $800 complicaba la posibilidad de mantener el dólar mayorista fijo hasta fines de octubre. En un escenario volátil como el actual, cualquier movimiento alcista aporta intranquilidad. El economista Joel Lupieri consideró que "el incremento del CCL puede provocar una mayor percepción de riesgo de devaluación en el cambio oficial, más que nada por el lado de lo que llamamos 'expectativas'. Si el CCL aumenta y el oficial queda quieto, probablemente las expectativas aumentarán la incertidumbre en el mercado en general".
Gabriel Menace agregó: "Sin dudas que la brecha aumente y que se prevea una inflación elevada termina deteriorando aún más el tipo de cambio real, lo que incrementa las chances de una nueva devaluación oficial (que eventualmente va a ser necesaria)".
Si la brecha entre el dólar oficial y los paralelos se incrementa, el dólar oficial mayorista (A3500) puede ser visto como retrasado, los inversores convalidar precios altos y eso aumentar las expectativas de una nueva modificación cambiaria. En este sentido, el economista Salvador Vitelli señaló que en la cotización del CCL "se manifiesta claramente qué valor están dispuestos a convalidar hoy los inversores".
¿Una suba del dólar CCL puede impactar en la inflación?
Otro de los factores a tener en cuenta es el impacto que el incremento del CCL puede tener sobre el nivel de precios de la economía nacional. En ese sentido, Lupieri afirmó que "los movimientos alcistas en el CCL aumentan la incertidumbre, lo que a su vez puede arrastrar al blue o viceversa, generando un aumento prospectivo y puramente especulativo de precios (y retroalimentando la inflación)".
Vitelli, por su parte, estimó que la inflación en agosto y septiembre será de dos dígitos, en un promedio de 12% mensual. Sus predicciones van en línea con lo que proyectan muchas consultoras.