El preocupante pronóstico sobre la inflación que lanza reconocido economista
La economía y la política se encuentran en un momento de tensión, por los niveles de inflación tan altos, la falta de dólares en las reservas y la incertidumbre por las elecciones presidenciales. En este marco tan delicado, iProfesional dialogó con Claudio Caprarulo, economista principal de Analytica Consultores.
A su entender, si el Gobierno no gana credibilidad en estos meses, "podemos ver otro salto en la inflación y alcanzar los dos dígitos mensuales".
En cuanto a la crisis económica, considera que la Casa Rosada tuvo un rápido diagnóstico de la crisis de la falta de divisas por la severa sequía, pero "aun no llegaron las soluciones".
Respecto al futuro inmediato, sostiene que "todos sabemos que va a haber un cambio de régimen macroeconómico a partir de diciembre, pero nadie tiene bien en claro hacia cuál vamos".
-¿Qué lectura hace de la situación económica actual y la reacción del Gobierno para enfrentarla?
-Cuando meses atrás analizábamos la sequía y sus impactos, descontábamos un escenario de mayor fragilidad producto de la falta de dólares y el aumento de la inflación. El Gobierno tuvo un rápido diagnóstico pero aun no llegaron las soluciones. Su apuesta es que los organismos internacionales, principalmente el FMI, pongan una parte de los dólares que se perdieron por la caída en las exportaciones.
Mientras eso no sucede, y al no querer frenar el nivel de actividad, se tensa la soga al límite. Por caso las reservas internacionales netas del Banco Central son negativas y debe recurrir a líneas de financiamiento con otros bancos centrales. La otra cara es que la economía, contra todos los pronósticos, creció en el primer trimestre.
-El tipo de cambio subió fuerte en las últimas semanas, ¿qué puede ocurrir con el precio del dólar en las próximas semanas?
-En mayo el dólar oficial mantuvo durante muchos días una tasa de depreciación menor a la de abril, sin embargo, ya llegó al 7% mensual. Esa tasa, de todas formas, implica una profundización del atraso cambiario. Esto se debe a que la inflación del mes pasado se ubicó cerca del 9%.
-Mientras tanto la brecha cambiaria sigue siendo alta entre el billete oficial y los dólares libres…
-La brecha cambiaria volvió al 100% y ese es su piso. Es que sin dólares no hay otro escenario posible. A la menor oferta de divisas que mencionamos por la sequía hay que sumar una mayor demanda producto de posiciones de cobertura de ahorristas y empresas en un año electoral.
Entonces, la incertidumbre propia de la economía se ve reforzada por la de la política. Todos sabemos que va a haber un cambio de régimen macroeconómico a partir de diciembre, pero nadie tiene bien en claro hacia cuál vamos.
-En el marco del poco ingreso genuino de divisas, ¿en qué puede derivar la escasez de reservas en el Banco Central?
-La única forma de que aumenten las reservas es que el Gobierno logré cerrar el acuerdo con el FMI. Y ahí se abren varios interrogantes. El primero es si existirá un desembolso de dólares superior a los vencimientos que tenemos este año. Así, de ser solo un adelanto, las reservas van a crecer solo transitoriamente.
Por el contrario, si el préstamo incluye desembolsos netos, el Gobierno puede verse tentado a convalidar un mayor nivel de actividad y también veremos un incremento transitorio.
La tercera opción es que, por el contrario, se busque tener una posición más robusta que permita dar credibilidad a la tasa de depreciación, alejando los fantasmas de un salto cambiario, pero a costa de un menor nivel de actividad.
-La inflación tiene una inercia muy alta y en mayo se ubicó en torno al 9%, ¿cómo puede seguir el comportamiento de los precios en este año electoral?
-Estamos en un régimen de alta inflación, cada día que pasa hay más precios indexados y las expectativas rápidamente se traducen en mayores precios. En el mejor escenario, los próximos meses la tasa mensual se ubicará cerca del 8%. Pero todo depende de la credibilidad que logre darle el Gobierno a la política económica y de que evite una fuerte devaluación. Caso contrario, podemos ver otro salto en la inflación y alcanzar los dos dígitos mensuales.
-Entonces, ¿qué escenario se puede presentar hasta fin de año?
-Las condiciones objetivas son muy duras, como régimen de alta inflación, sequía histórica y sin acceso a los mercados de crédito. La solución de manual sería una devaluación y buscar el equilibrio en el mercado de cambios. Pero sin un posible aumento de la oferta de dólares en el corto plazo, y en su último año de gestión, es lógico que el Gobierno no busque ese camino.
Así, Massa y equipo apuestan a llegar a diciembre sin cambios bruscos a costa de profundizar los desequilibrios. Por ahora, y con los costos asociados, vienen logrando su objetivo. Por eso, en los próximos meses, a medida que nos acerquemos a las elecciones y el agro liquide aún menos dólares, la situación va a ser más compleja poniéndose a prueba nuevamente su estrategia.-