Revive el plazo fijo UVA: expertos recomiendan ir "abandonando" el tradicional por la alta inflación
En los últimos días los ahorristas tuvieron una serie de noticias que impactan en su bolsillo, como nuevos datos de inflación al alza, movimientos en el dólar y suba de la tasa de interés del plazo fijo. Por lo que ahora los inversores precisan saber si, con todas estas condiciones, se gana más con un depósito tradicional o con uno que ajusta por UVA.
Sobre todo, la preocupación se acentúa porque las cifras reflejadas por el índice de precios al consumidor (IPC), que en febrero fue de 6,6%, están tendiendo a acercarse a las estimaciones más pesimistas de los economistas. De hecho, para todo marzo se espera un porcentaje mayor, como consecuencia de los numerosos aumentos en distintos ítems, como servicios públicos, nafta, prepagas, transporte, colegios, alimentos, entre otros.
Desde el lado de la inversión, se debe recordar que días atrás el Banco Central aumentó 3 puntos porcentuales la renta que ofrece el plazo fijo tradicional, desde la previa 75% hasta 78% actual de tasa nominal anual (TNA), para las colocaciones realizadas por personas físicas por montos inferiores a los 10 millones de pesos.
Así, hoy se obtiene una ganancia de 6,41% en un depósito realizado a un período de 30 días, que es el mínimo de tiempo exigido por el sistema financiero.
Al respecto, la inflación de febrero (6,6%) superó a esta mayor tasa y las perspectivas de los economistas en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), que es la encuesta que realiza el BCRA entre más de 40 expertos, esperan que sea más alta en marzo y abril.
"Las estimaciones de suba del IPC Nacional para el resto del trimestre colocan en una señal de alerta a los pequeños inversionistas. Es que si tomamos las estimaciones del REM para el corriente mes hasta los optimistas anticipan una suba mínima de precios del 6% mensual, porcentual que se eleva a casi el 7% para la franja de los pesimistas", dice a iProfesional Andrés Méndez, director de AMF Economía.
Plazo fijo tradicional versus Plazo fijo UVA
Así, los economistas más pesimistas consideran que en marzo puede haber una inflación del 6,9% y que en abril puede llegar a ser del 6,6%, que superan a la actual tasa de interés del plazo fijo tradicional, de 6,41% a 30 días. Mientras que para mayo y junio podría ubicarse por debajo de ese nivel.
En tanto, los analistas consideran que estas cifras posicionan al plazo fijo UVA, que es el ajusta por precios de la economía, como el más seductor, al menos hasta mediados de año, donde le ganaría a la tasa de la versión tradicional.
En resumidas cuentas, "la UVA que se aplicará entre mediados de abril y similar lapso de mayo próximo debería de estar comprendida en el rango señalado. Es que el 50% de las chances la ubican por encima del 6,30% y un 25% de probabilidades en las inmediaciones del 7% mensual", suma Méndez.
Cabe recordar que este instrumento UVA toma la inflación de los 45 días previos y de los 45 días posteriores a la colocación. Por lo tanto, el período mínimo de encaje que requiere es de 3 meses.
Respecto al rendimiento del plazo fijo UVA, Méndez detalla que si bien se advierte que a partir de abril comienzan a declinar las expectativas de subas mensuales de precios, "puede trazarse un panorama de los rendimientos para el próximo trimestre y su relación actual con la tasa de rendimiento mínimo de los plazos fijos minoristas a tasa preestablecida".
Qué plazo fijo ganará de ahora en más
En base a las diferentes estimaciones (optimista, moderada y pesimista) de los economistas en el REM que confecciona el Banco Central, de mantenerse la tasa de interés actual, en abril próximo el plazo fijo tradicional "perdería con el UVA", salvo en los casos en los expertos que contemplan niveles de crecimiento de los precios más benévolos (apenas el 25% del total), donde las proyecciones optimistas esperan que el plazo fijo UVA rinda 6,3% mensual.
"Avanzando en el trimestre, en mayo y junio, el plazo fijo tradicional se reposicionaría y superaría a los pronósticos moderados, pero no así a los pesimistas. Esto quiere decir que, de acuerdo a las estimaciones inflacionarias realizadas a fines de febrero, más del 50% de las proyecciones sobre evolución del IPC le están dando chances al depósito tradicional en los dos últimos meses del segundo trimestre del año", analiza Méndez.
Aunque alerta que la relación entre la encuesta del REM y la suba de los precios internos está marcando que la balanza "se inclina por los resultados más pesimistas, los que, incluso, son desbordados por la propia realidad. Es que, por ejemplo, en febrero pasado todas las estimaciones fueron superadas por la suba del IPC nacional", completa.
En consecuencia, Méndez sentencia que "podría darle mayor crédito a las estimaciones más negativas que sostienen que la inflación ´le gana´ al plazo fijo tradicional".
En este escenario, el gran interrogante es cómo puede reaccionar el Banco Central. Es decir, si volverá a incrementar las tasas de interés como hizo a mediados de este marzo, o si esperará a comprobar cuál es la medición del IPC de los próximos meses, por parte del Indec, con la expectativa de que se ubique en una cifra más acorde a las mediciones "moderadas" para mantener la renta actual.
"Estas preguntas se presentan, claro, sin olvidar los deslizamientos que llevaron a los expertos a corregir al alza sus proyecciones del REM del mes pasado. En este caso, correspondería preguntarse si, tal como lo advierten los economistas pesimistas del REM, la suerte del plazo fijo tradicional está jugada y en el próximo trimestre puede perder mes a mes con el ajustable UVA. Y, sobre todo, qué efectos habrá en el consumo tener una economía que ofrece al ahorrista una tasa de interés real negativa", concluye Méndez a iProfesional.