Cómo funciona el "plazo fijo exprés": permite invertir por apenas 24 horas y es de muy bajo riesgo
Para los ahorristas que no tienen disponibilidad para esperar los 30 días requeridos de mínima para cobrar la renta del plazo fijo tradicional, existe una alternativa donde se puede hacer una colocación de una inversión a un período que puede partir desde un solo día en adelante. Se trata de la caución bursátil.
Al mismo tiempo, este instrumento también es una forma de conseguir liquidez para aquellos que necesitan financiamiento. Por eso existen dos tipos de cauciones: tomadora y colocadora.
"Una caución tomadora nos permite captar fondos en el mercado. Es para quienes necesitan financiamiento de corto plazo. En cambio, una caución colocadora nos permite realizar una inversión de corto plazo al colocar fondos a una tasa de interés", informan desde Balanz.
Otro dato a tener en cuenta es que las cauciones se pueden realizar tanto en pesos como en dólares.
Y, fundamentalmente, los plazos de la operación son cortos y flexibles, ya que van desde un día hasta un máximo de 120 días.
A diferencia de un plazo fijo tradicional, donde la tasa de interés de la colocación ya está establecida de antemano y se conoce cuánto se va a cobrar, en la caución bursátil se negocia en el mercado la tasa de interés nominal anual que aplica a la operación. Por eso varía entre la colocadora para invertir y la tomadora para financiarse.
Caución colocadora de fondos
La caución colocadora de fondos, según detallan desde Balanz, es una alternativa de inversión que "resulta muy útil para la administración de la tesorería de las empresas, como así también para quienes tienen excedentes transitorios de liquidez", y necesitan disponer de sus fondos casi en lo inmediato, a los pocos días.
Es que, si se la compara con un depósito a plazo fijo bancario, la caución tiene como principal ventaja ofrecer una mayor flexibilidad para establecer una constitución de tan sólo un día.
Por el lado de las tasas de interés son, en general, competitivas, aunque van variando de acuerdo a las inversiones realizadas en bonos y acciones. Por ejemplo, en la actualidad, si se hace una caución por un solo día se obtiene una tasa nominal anual (TNA) de 63,4%. En cambio, en un plazo fijo tradicional a 30 días la renta es de 75% de TNA.
"Otro atractivo de la caución colocadora de fondos es su bajo riesgo, pues son operaciones garantizadas por el propio mercado", aseguran desde Balanz.
Por otro lado, para determinar el retorno neto efectivo que se consigue con este instrumento, se debe tener en cuenta el costo que genera la transacción, que "suele ser bajo". En ello se incluyen las comisiones, el tratamiento impositivo y los derechos de mercado, que van cambiando con el paso del tiempo.
Cuánto se gana con un "plazo fijo exprés" de $100.000
De acuerdo a los datos provistos, desde la perspectiva del inversor en cauciones, los datos relevantes para definir la operación y calcular el retorno son:
- Moneda en la que desea invertir, debido a que se pueden elegir cauciones en pesos o cauciones en dólares.
- El plazo de la operación (1 a 120 días)
- Tasa de interés (TNA).
Entonces, se debe aplicar el capital que se dispone para invertir, para poder calcular el monto final que se obtendrá y los intereses a ganar.
En resumidas cuentas, si se invierten $100.000 por un período de 14 días y la tasa nominal anual (TNA) ofrecida por ese período es del 67%, después de esas dos semanas de encaje se obtendrá en la caución realizada un total de $102.570. Es decir, se ganarán intereses por $2.570.
En cambio, si se coloca ese mismo monto inicia a un plazo fijo tradicional a 30 días, se ganará tras un mes de espera un total de 106.250. O sea, un extra de $6.250.