Dólar versus plazo fijo: cuál puede ser la apuesta ganadora de aquí a fin de año
Se viene el mes de octubre y ya comienzan las especulaciones sobre la inflación de septiembre. Si fuera de un 6,5%, los precios acumularían una suba anual del 83,6%; si fuera de un 7,0%, se llegaría a una inflación anualizada del 84,4%; mientras que, si fuera de un 7,5%, acumularía 85,3% en los últimos 12 meses.
Si el Banco Central copiara el patrón de decisiones de los meses anteriores, el plazo fijo debería pasar del 75% al 80% anual, con lo que la tasa efectiva anual quedaría en el 116,9%.
El dólar mayorista está llamado a subir el 6,3% en el mes de septiembre, con lo cual estaría trepando a una tasa efectiva del 108,2% anual. Así, su valor sería de $147,35.
El dólar MEP, si terminaría el 30 de septiembre en $300, estaría subiendo 5,3% en el mes, lo que implicaría una tasa efectiva del 86,8% anual.
El mes de septiembre podría terminar con una inflación subiendo el 7%, lo que implicaría una tasa efectiva del 125,2% anual. La tasa de plazo fijo se ubicaría con una tasa efectiva del 116,9% anual. El dólar mayorista subiría a un ritmo del 108,2% anual. El dólar MEP -o bolsa- subiría a una tasa efectiva del 86,8% anual. Claramente, en el mes de septiembre, posicionarse en pesos resultó muy conveniente respecto de las inversiones en dólares.
Inversión en pesos: qué ofrece la Tesorería
La Tesorería le ofrece al inversor productos en pesos que compiten en el mercado con las colocaciones a plazo fijo.
La letra de descuento a un plazo de 77 días rinde el 104,29%, que es una tasa inferior al plazo fijo, mientras que las letras de descuento ajustadas por inflación rendirían inflación menos el 4,52%, esto implica -claramente- una tasa inferior a la inflación.
Los bonos en pesos que ajustan por inflación y vencen a agosto del año 2023 rinden inflación más 2,2% anual. El Bonte 2023 con vencimiento 17 de octubre de 2023 rinde el 104,0% anual. Estos bonos pagan mucho menos que la inflación esperada. Sin embargo, son altamente demandados por el mercado. La pregunta obligada es ¿estamos en temporada de carry trade? Esto significaría: ¿nos colocamos en pesos porque el dólar pasará un largo rato tranquilo? Vamos a develarlo a continuación.
La operación blanqueo, clave para sumar dólares
El Gobierno tiene como objetivo aprobar el Presupuesto nacional e ir en busca de financiamiento internacional para engrosar las reservas. Va a recibir unos u$s4.000 millones del FMI, que se utilizarían durante el trimestre para pagar deuda con el mismo FMI. Es un dinero que ingresa por una puerta giratoria: así como llega, se va. Por otro lado, el Gobierno saldría a buscar unos u$s4.000 millones adicionales para engrosar las reservas. Si los consigue podríamos, pensar en que las reservas brutas, para fin de año, podrían ubicarse en torno de los u$s40.000 millones.
Los pasivos monetarios del Banco Central se ubican en $12,36 billones, dado que subieron $1,3 billones en 26 días del mes de septiembre. Si el Banco Central sigue aumentando la tasa de política monetaria a un ritmo inferior a la inflación, estimamos para fin de año que sus pasivos monetarios podrían ubicarse en torno de los $16 billones. Esto nos dejaría al dólar MEP en torno de los $400 para fin de año.
Una forma de incrementar las reservas fuertemente sería implementar un blanqueo de rápida aprobación y ejecución para compras de activos, como podrían ser bienes escriturales y registrables. Esto podría darle al Gobierno un ingreso de dólares que hasta hoy no están en el escenario económico. Si esta iniciativa es exitosa, el carry trade sería muy beneficioso, ya que la renta en pesos superaría a la renta en dólares.
Rendimiento de plazo fijo del último trimestre del año
Para el mes de octubre, veríamos crecer la tasa nominal de plazo fijo al 80% anual.
Si en octubre la suba de precios es del 7% mensual, la inflación anual sería del 90,6% y la tasa nominal de plazo fijo podría pasar al 85% anual.
Si en noviembre la inflación vuelve a ser del 7%, la inflación anual sería del 99% anual. Por ende, la tasa nominal de plazo fijo podría pasar a niveles del 93% anual.
En este escenario, esperamos para el último trimestre del año un rendimiento de los plazos fijos en torno del 24,3% trimestral.
Para igualar este rendimiento, el dólar MEP debería ubicarse en $372,90. Si el dólar MEP se ubica en $400 subiría un 33% en el trimestre.
Para el mes de diciembre, el dólar mayorista lo estimamos en $180,51, lo que representaría una suba del 22,5%.
Dólar vs. inversión en pesos: 3 escenarios
Si el Gobierno consigue financiamiento externo por u$s4.000 millones (adicionales al desembolso de u$s4.000 millones del FMI) y es un éxito el blanqueo que está poniendo en marcha, podríamos pensar que la temporada de invertir en pesos recién está comenzando y será un fiasco guardar dólares billetes. La probabilidad de ocurrencia de este escenario es un 30%.
En cambio, si el Gobierno consigue financiamiento externo por u$s4.000 millones (adicionales al desembolso de u$s4.000 millones del FMI) y el blanqueo pasa sin pena ni gloria, podríamos pensar que las inversiones en pesos podrían quedar relegadas frente a un dólar bolsa que podría ubicarse en torno de $400 y superar holgadamente a las inversiones en pesos. La probabilidad de ocurrencia de este escenario es un 60%.
Por otra parte, si el Gobierno no consigue financiamiento adicional al desembolso del FMI y el blanqueo es un fracaso, consideramos que las inversiones en pesos serán un fiasco y el dólar MEP o bolsa podría superar el nivel de $ 400. Esta situación podría precipitar una aceleración en la tasa de devaluación del peso, lo que ubicaría al dólar mayorista por encima de $200. La probabilidad de ocurrencia de este escenario es de un 10%.
Conclusiones sobre dólar, inflación y tasas
Creemos que el Gobierno seguirá languideciendo. Hoy, parece que las inversiones en pesos lucen muy atractivas nominalmente, pero cuidado porque el balance del Banco Central está muy deteriorado y esto le deja abierta la puerta a una gran suba de los dólares alternativos.
La versión sobre la puesta en marcha de un plan de estabilización económica al estilo del Plan Austral está recorriendo los pasillos de la City. Esto podría ocurrir después del desembolso de u$s4.000 millones que haría el FMI y el refuerzo de u$s4.000 millones adicionales de organismos financieros internacionales para engrosar las reservas. Si bien quisiéramos que todo plan económico sea un éxito para el país, si la idea del Ministro de Economía es un plan heterodoxo, con control de precios y sin un ajuste importante de las cuentas públicas, estamos ante un plan que es más de lo mismo y los resultados serán los por todos conocidos, más inflación y devaluación.
Ante este posible escenario no deje de tomar deuda, comprar activos estratégicos y distribuir dividendos para comprar dólares en cabeza de persona humana. Las empresas en esta coyuntura deben capitalizarse y ganar mercado: será difícil ganar dinero en este contexto.