Última licitación del mes para contener la deuda en pesos: la oferta de Massa para calmar al mercado
El ministro de Economía Sergio Massa afrontará este lunes 29 de agosto un nuevo examen en el mercado local en lo que es la última licitación de deuda del mes en la que el Tesoro buscará cosechar fondos por $90.000 millones.
Los analistas prevén que esta operación será una prueba sencilla tras el exitoso canje voluntario de deuda en pesos realizado el 9 de agosto por el cual se postergaron a 2023 vencimientos por $2 billones. Se trataba de compromisos de deuda que vencían entre agosto y octubre de este año.
Con ese canje, Massa buscó calmar la incertidumbre financiera que reinaba cuando asumió el cargo el 3 de agosto y normalizar el mercado de deuda en pesos luego de la corrida que sufrieron los títulos CER -que ajustan por inflación- en junio y parte de julio en medio de rumores de reperfilamiento
Al respecto, Massa aseguró que "despejar los vencimientos nos posibilita trabajar de manera más ordenada sobre los recursos y gastos que tenemos para administrar las cuentas públicas, además de dar certidumbre a la economía doméstica".
¿Cuál es el menú ofrecido?
Para enfrentar el desafío, la secretaría de Finanzas ofrece una gama de cuatro instrumentos de deuda.
Hay una Letra de Liquidez del Tesoro a descuento (LELITE) que vence el 30 de agosto de este año, que puede ser suscripta sólo por Fondos Comunes de Inversión (FCI).
También hay dos Letras del Tesoro a descuento a tasa fija (LEDES), una con vencimiento el 16 de diciembre de 2022 (S16D2), y la otra caduca el 31 de enero de 2023 (S31E3)
Y ofrece además una Letra ajustada por CER (LECER) que expira el 16 de junio de 2023 (X16J3).
La recepción de las ofertas comenzará a las 10.00 horas de este lunes y finalizará a las 15.00 horas.
Los analistas de Delphos Investment evaluaron que "el menú ofrecido parece adecuado para las condiciones del mercado, que muestra gran dificultad para absorber títulos con vencimiento más allá de fines de 2023".
En este sentido, un informe de Facimex Valores resaltó que "la estrategia del Tesoro sigue centrada en colocar instrumentos con vencimientos previos a las elecciones primarias del próximo año".
De hecho, indicó que "es la cuarta licitación consecutiva en la que el equipo económico no ofrece activos con vencimientos posteriores al 31 de julio de 2023 (excluyendo al Bote 2027 y los Bonos Duales)".
"Hacia adelante habrá que ir monitoreando las licitaciones porque, a medida que transcurren las semanas, el calendario pre-electoral se va achicando y, en algún momento no muy lejano, el equipo económico se verá forzado a testear el roll over colocando instrumentos con vencimientos después de las elecciones", señalaron.
Por otra parte, enfatizaron que "la particularidad de esta licitación radica en que solo se ofrecen nuevos instrumentos".
¿Qué expectativas tiene el mercado?
Pedro Siaba Serrate, estratega de PPI, comentó que "vencen alrededor de $91.000 millones" y consideró que "la licitación no será una prueba muy dura para el Tesoro, que debería alcanzar a refinanciar estas necesidades sin problemas".
En sintonía, en Facimex Valores afirmaron que "estamos ante una nueva prueba que mostrará el roll over del sector privado" aunque recalcaron que "el Tesoro está bien perfilado ya que con el canje y la primera licitación de agosto cubrió los vencimientos del mes"
En el grupo SBS también creen que "ante un vencimiento bajo, que puede pagarse con el rollover de la licitación anterior, lo más destacable a tener en cuenta post-licitación pasará por las tasas convalidadas"
Y es que destacaron que "ninguno de los nuevos instrumentos tiene precio ni tasa de referencia, algo que solía ocurrir en licitaciones anteriores cuando se licitaba un título nuevo".
Con igual lectura, la consultora LCG planteó que "el ojo estará puesto en la tasa que convalidará Finanzas teniendo en cuenta que buena parte de los vencimientos de agosto y de los próximos dos meses fueron despejados por el canje de principios de mes que trasladó la carga de pagos, ahora indexados por CER y tipo de cambio, a 2023 en los meses previos a las elecciones".
La consultora advirtió que "aún así, la demanda de financiamiento sigue siendo alta considerando que el Gobierno se comprometió a no demandar más asistencia del BCRA y la posibilidad de alcanzar la meta de déficit primario de 2,5% del PBI en lo que queda del año luce muy baja".
Al respecto, Siaba Serrate estimó que "mirando el mercado secundario, la nueva letra ajustable por CER podría salir alrededor de +0,5/+0,75%".A su vez, en Delphos prevén que "el Tesoro continuará manteniendo tasas alrededor de 6 o 7 puntos porcentuales por encima del rendimiento de la tasa de las LELIQs (69,5% TNA) en las LEDES cortas como forma de atraer demanda para sus instrumentos".
Y es que Massa en su primera conferencia de prensa anunció que "no se van a utilizar AT por lo que resta del año" y que el objetivo del Gobierno "es no pedir más plata de emisión para financiar" las cuentas públicas.
Más carga sobre la deuda
La decisión de frenar la asistencia monetaria al Tesoro implica una mayor presión sobre la deuda a colocar en el mercado.Y es que para poder cerrar el programa financiero de este año no alcanzará solamente con renovar los vencimientos de deuda si efectivamente se quiere cumplir con la meta de déficit fiscal anual de 2,5% del PBI acordada con el FMI.
Se deberá conseguir en el mercado local un financiamiento muy superior al estimado previamente: entre $700.000 millones y $1,1 billones, según los distintos cálculos privados.
Según los cálculos de la consultora Pxq, que dirige Emmanuel Álvares Agis, "en caso de que se cumpliera la meta con el FMI serían, en promedio, $200.000 millones de financiamiento neto por mes con un pico en diciembre por estacionalidad del gasto", y opinó que "luce como un objetivo desafiante".