Dólar cara chica y grande: cuál vale menos, cómo diferenciarlos y las claves para no perder dinero
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La cuestión del dólar cara chica siempre genera debates: por un lado, se encuentran personas que argumentan que "un dólar es un dólar" y consideran que deben ser aceptados. Por otro lado, hay quienes sostienen que existen razones legítimas para no aceptarlo.
La realidad es que este tipo de billetes no solo es desestimado en Argentina, sino también en gran parte de Latinoamérica y Europa.
¿Qué pasa con el dólar cara chica?
El dólar cara chica son aquellos billetes de u$s 100 con el diseño de Benjamín Franklin "pequeño" en comparación de los billetes más actuales. Este tipo de billetes es una serie emitida hasta 1996.
Las razones por la que no aceptan este tipo de billetes se deben a que tienen menos medidas de seguridad con respecto a los diseños más modernos, por lo que las empresas y comercios son más reacios en aceptarlos por miedo a recibir un billete falso.
Por otra parte, estos billetes, en la mayoría de los casos, presentan signos de deterioro, por lo que corren más riesgos de romperse o verse afectados y que sea muy difícil poder depositarlos u operar con ellos.
Sin embargo, en Argentina no solo los billetes "cara chica" tienen "menos valor", sino también los "billetes chicos", es decir, los billetes de u$s1, u$s5, u$s10, u$s20 y u$s50 tanto los diseños antiguos como los billetes más nuevos.
¿Por qué los dólares cabeza chica valen menos?
En pocas palabras se trata de una cuestión pura y estricta de oferta y demanda. Consultamos a expertos que prefirieron mantener su anonimato, sobre los por qué el dólar cara chica se toma a un valor por debajo de los billetes más nuevos.
"El dólar cara chica tiene menos valor porque la gente no los quiere, en las inmobiliarias o en las concesionarias de vehículos no los aceptan o lo toman con un valor mucho menor, sin contar que en muchas partes del mundo directamente no los están aceptando", explica el experto.
Frente a la consulta sobre las personas que sostienen que "el dólar es dólar" y todos los diseños valen lo mismo, el experto respondió lo siguiente:
"En el mercado tradicional como en las transacciones bancarias, todos los billetes valen lo mismo. Sin embargo, en el mercado libre todo se guía por oferta y demanda. El dólar oficial vale 130 pesos para la compra aproximadamente, por lo que si un ahorrista vende sus dólares en el mercado oficial les pagarán esos $130 sin importar si se trata de un billete cara chica o un cara grande", sostiene el experto.
"Sin embargo, la mayoría de los ahorristas no reconocen este valor como "el real", sino que lo venden en el blue por $318 en el que justamente se paga ese valor por encima del oficial por la oferta y la demanda de la divisa estadounidense", detalla el experto.
"Muchas de las personas que sostienen que "vale lo mismo", a la hora de comprar dólares, piden que los billetes sean los nuevos y si es posible los azules. Esto hace que las casas de cambio u operadores del blue les queden esos billetes "de clavo" y tengan que ingeniárselas para venderlos más baratos o ver la forma de hacerse de billetes nuevos. En pocas palabras, la misma gente que dice que valen lo mismo son los mismos que los rechazan, por lo tanto, por oferta y demanda (mucha oferta de caras chica y poca o nula demanda de estos), esos billetes valen menos", argumenta el experto.
Finalmente, el experto sostiene que es "ridícula" la discusión de si estos billetes valen menos o valen igual, ya que el mercado oficial se guía por sus reglas mientras que el paralelo se guía por otras.
"Es ilógico creer que en un mercado informal se van a aplicar las mismas reglas que en el mercado tradicional. La persona que desea operar en el mercado formal lo hará con las reglas de ese mercado, mientras que los que operen en el mercado paralelo lo harán con sus reglas. Si un operador del mercado informal se niega a comprar los billetes con diseño antiguo puede hacerlo tranquilamente, ya que, al ser un acuerdo entre partes, nadie puede obligar a la otra a que compre algo que no desee", concluye.
En el caso de las inmobiliarias son pocas las que aceptan el pago con billetes cara chica. Sin embargo, algunas están aceptando estos billetes como una atención a sus clientes. Este es el caso de la inmobiliaria O.A.P (Negocios Inmobiliarios Oscar Piazzale).
"Si bien en la mayoría de las inmobiliarias no toman este tipo de billetes o lo hacen a un valor muy bajo, nosotros solemos aceptarlos como una atención al cliente", explica Alejandro Piazzale, agente inmobiliario de O.A.P.
¿Qué diferencia tienen los dólares cara chica y grande?
La principal diferencia entre los dólares cara chica y cara grande es el diseño del billete.
Como mencionamos anteriormente, los dólares cara chica presentan el rostro de Benjamín Franklin en el centro del billete con un tamaño "reducido", mientras que los dos diseños actuales presentan el rostro del mismo prócer estadounidense, pero ocupando un mayor espacio del billete.
Dentro de estos dos billetes, en la jerga informal, se encuentran los "cara grande" que normalmente se asocia a los billetes emitidos desde 1996 hasta el 2009 con su clásico color verde y los "azules" o "banda azul" que son aquellos emitidos desde el 2009 hasta el presente. Este "apodo" se debe a la característica banda de seguridad 3D en color azul.
Ambos diseños presentan una mayor cantidad de medidas de seguridad como la banda de seguridad, la campana y tintero (presente en los billetes desde el 2009) que cambia de color verde a cobre cuando se mueve el billete, entre otras.