Los dólares paralelos "volaron" en junio: ¿qué pasará en el segundo semestre?
Los dólares paralelos se recalentaron en junio en medio de un escenario de estrés en la deuda en pesos que inició en los primeros días del mes y esta semana se profundizó por el endurecimiento del cepo a las importaciones para frenar el drenaje de reservas. Así, la entidad monetaria pudo terminar el mes con compras netas por $950 y cumplir con la meta de reservas con el FMI acordada para el primer semestre.
El dólar blue cerró junio a $238 (y este viernes trepó a $239) con lo cual en el mes aumentó $31, la mayor suba mensual en lo que va del año, y la brecha con el mayorista oficial se ensanchó de 72,2% que alcanzaba a fin de mayo al actual 90,1%.
El dólar informal registró en junio un valor récord de $239, y en lo que va del año acumula un alza de 14,4%.
En sintonía, los dólares financieros que se negocian en el ámbito bursátil mediante la compra venta de bonos también se aceleraron en junio. El Contado Con Liquidación que había finalizado mayo en $210,5 terminó el mes en $252,71, con un nivel récord de operaciones en la jornada, y la brecha con el mayorista oficial que cerró el mes en $125,23 se estiró a 101,7%.
Asimismo, el dólar MEP o Bolsa ascendió en el mes de $207,35 a $249,59.
Dólares paralelos: ¿se mantendrán estables en estos valores?
Para la mayoría de los analistas consultados por iProfesional, los dólares libres en el segundo semestre que se inicia tendrán recorrido alcista en un contexto de excedente de pesos debido a que el Banco Central (BCRA) aceleró la emisión monetaria en junio para asistir al Tesoro ante un creciente déficit fiscal y para comprar bonos de la deuda en pesos para sostener su precio.
Pablo Repetto, economista de Aurum Valores comentó a iProfesional que "estimamos que la emisión de pesos y las trabas a las importaciones van a poner más presión cambiaria en el segmento libre".
"Sin freno a la emisión no esperamos que los dólares libres se estabilicen. Menos con expectativas negativas", enfatizó.
En sintonía, Diego Martínez Burzaco, jefe estratega de Inviú dijo que "no veo una estabilización de los dólares libres aún, hasta que se tomen decisiones y el mercado las procese". Y evaluó: "Hay una especie de feriado cambiario por el lado de la venta de dólares del BCRA y eso impide tener visibilidad. Es un equilibrio inestable el actual, con debilidad en el balance del BCRA y con un gran desequilibrio entre la oferta y la demanda de dólares".
De igual lectura, el analista Gustavo Ber auguró que "los dólares financieros continuarán al alza durante el segundo semestre".
Según su visión, los dólares libres tenderán a la suba por "ruidos tanto internos como externos al acentuarse el nerviosismo, la elevada nominalidad de la economía y los desequilibrios fiscales, monetarios, y cambiarios con un ‘combo de más pesos, menos dólares, que seguirían activando coberturas".
Por su parte, Emiliano Anselmi, líder del equipo macroeconómico de PPI, advirtió que las mayores restricciones a las importaciones "redundarán en menos pesos corriendo contra el dólar oficial y más corriendo contra los financieros libres, lo que repercute en más brecha". En PPI estiman que "por la evolución de la medida más amplia de liquidez de la economía (M3 Privado) versus la evolución del CCL desde que asumió Alberto Fernández queda trecho por recorrer. El M3 Privado todavía está 14,5% adelantado" al CCL, lo que redunda en un tipo de cambio 'de convergencia' de $281".
A su vez, Tobías Pejkovich, de Facimex Valores, señaló que "el tipo de cambio implícito en acciones subió casi 20% en junio y recién ahora parece estar más alineado con la cantidad de pesos que hay en la economía". Y advirtió: "Sin embargo, creemos que el balance de riesgos continúa sesgado al alza ante tanta emisión monetaria, el contexto de estrés en el mercado de deuda en pesos y la profundización de las restricciones a las importaciones".
En cambio, Lucio Garay Méndez, economista de Eco Go, cree que "los dólares financieros encontraron unos valores en los cuales van a rondar en el corto plazo". Y argumentó: "Más que una aceleración veo probable que caigan un poco. Luego de la corrida del 8 de junio, el gobierno respondió y trató de dar señales tranquilizadores en cuanto al déficit, y otra señal fue la suba de tasas".
Dólar: ¿qué factores presionarán en el segundo semestre?
Sobre las razones que hay para que los dólares paralelos sigan con tendencia alcista, Fernando Baer, economista de Quantum Finanzas, enumeró: "emisión monetaria, estacionalidad por el fin de la cosecha (menor liquidación), tensiones políticas, y registros de inflación altos y sostenidos".
De igual diagnóstico, la economista Natalia Motyl aseguró que "las nuevas restricciones a las importaciones acentúan la crisis de confianza en los mercados al evidenciar los problemas del BCRA de mantener estabilizado el mercado de cambios, y por el otro obligan a las empresas a conseguir los dólares en el mercado paralelo".
Así, la analista vaticinó un segundo semestre "complicado" y con "tendencia ascendente" de los dólares paralelos por: "una caída en la oferta de dólares que llegan del exterior y porque ya no se pagan los impuestos de bienes personales y ganancias que obligaba a vender los dólares; dificultades del BCRA de acumular reservas por el shock energético, la necesidad de volver a recurrir a la emisión monetaria para financiar el déficit fiscal; la emisión monetaria para sostener el precio de los bonos del Tesoro; y, una caída de la demanda de pesos ante la falta de previsibilidad económica del Gobierno" .
Un factor clave, las licitaciones de deuda
Pejkovich prevé que "en el segundo semestre la emisión monetaria se mantendrá elevada por la estacionalidad y magnitud del déficit primario, lo que puede profundizarse en caso de que no se recupere el roll over privado en las licitaciones de deuda en pesos".
Garay Méndez coincidió en que "el recorrido del dólar dependerá de que pase con las licitaciones de deuda en pesos, si el gobierno logra recuperar el financiamiento neto positivo quitará presión sobre la emisión y eso influirá positivamente sobre la brecha".
El Tesoro consiguió renovar los vencimientos de junio, el próximo desafío será la licitación de deuda está prevista para el 13 de julio, aunque deberá afrontar vencimientos por solo $8.000 millones.