Efecto cepo: BCRA compró u$s536 millones y logra meta semestral de acumulación exigida por FMI
Este jueves, el Banco central (BCRA) compró u$s536 millones, cerró el mes con adquisiciones por u$s950 millones y, así, alcanzó la meta del primer semestre de acumulación de reservas establecida por el Fondo Monetario Internacional (FMI), según informaron en el mercado.
El BCRA logró comprar hasta junio más de u$s1.800 millones, lo que le permite alcanzar los objetivos fijados por el organismo internacional, en contra de la mirada pesimista que había predominado en el mercado respecto de que pudiera lograr este cometido hasta la semana pasada.
La meta de acumulación de reservas fijada en el acuerdo del FMI establece que el BCRA debía sumar unos u$s4.100 millones a sus arcas en el primer semestre del año, que termina este jueves.
En ese total se incluyen los aportes de organismos internacionales, de bancos de fomento y del FMI, mientras que otra parte corresponde a la compra de divisas en el mercado, por lo que, según estimaban en el mercado, lo que debía comprar el Banco Central equivalía, aproximadamente, a la mitad del total, tal como se desprende de los datos antes mencionados.
BCRA: las medidas que le permitieron recuperar el terreno
Dado que el BCRA venía perdiendo cerca de u$s600 millones en el mes en curso, esta meta parecía muy lejana hasta hace pocos días. Pero gracias a las medidas que tomó este lunes, cuando aplicó un refuerzo al cepo a las importaciones, el BCRA logró recuperar posición en materia de acumulación de dólares.
Lo que se hizo fue que, a través de la Comunicación "A" 7532, se reforzaron los controles a las importaciones con el objetivo de empezar a poner un freno la pérdida de reservas que genera el crecimiento del volumen de este tipo de operaciones.
En consecuencia, se incluyó dentro del tratamiento de la categoría "A" (que otorga el BCRA a ciertos importadores) a las Licencias No Automáticas, que, hasta ahora, estaban exceptuadas de tener que obtener alguna de las categorías.
Otra de las medidas que tomó el BCRA es que no se puede adelantar un 20% del cupo anual de la categoría A otorgada a los exportadores, que hasta ahora sí se podía, y se revió el cupo para empresas chicas que importaron menos de u$s1 millón en 2021. Así, se dispuso que a aquellas pequeñas y medianas empresas que en el año 2021 importaron menos de ese monto se les habilita un 15% más.
También se estableció que las SIMI B correspondientes a las Licencias No Automáticas podrán acceder al mercado a partir de 180 días del despacho a plaza y se resolvió ampliar las posiciones arancelarias de bienes equivalentes a los producidos en el país que tendrán acceso al mercado a partir de 180 días y la de bienes suntuarios, que podrán acceder a partir de los 360 días.
En tanto, para las importaciones de servicios, se equiparó el tratamiento al de bienes por el plazo señalado, permitiendo el acceso al mercado por el mismo monto que en 2021 y en caso de superar el importe el saldo a 180 días.
BCRA compró casi u$s1.000 millones: cómo lo logró y qué preocupa
Todos los cambios para las importacionese implementaron el lunes pasado a la mañana, justo una hora antes de que abriera el mercado y requieren toda una logística adaptación por parte de las entidades financieras. Eso, según aportan los analistas de las City trabó todas las compras al exterior. Así, en el marco de ese freno en la actividad, el BCRA logró comprar u$s150 millones el lunes, u$s250 millones el martes y u$s580 millones el miércoles gracias a que las últimas medidas paralizaron la salida de dólares del mercado único de cambios (MULC) por unos días.
Y, este jueves, continuó la tendencia compradora, ya que hizo el segundo mayor embolso que logra realizar la actual conducción del BCRA, en manos de Miguel Ángel Pesce. Recordemos que ayer había terminado el día con compras por u$s583 millones en el mercado de cambios y logró, así, revertir la pérdida de dólares que venía arrastrando a lo largo de junio.
Esa fue la compra más elevada desde la llegada de Pesce a la presidencia del regulador financiero (la anterior había sido de u$s300 millones el 7 de marzo pasado) y se trata de la segunda más importante desde 2016, cuando había embolsado u$s700 millones, aunque aquella vez se trató de una operación directa realizada con el Banco Nación.
Sin embargo, muchas voces del mercado critican que el BCRA compra reservas a costa de paralizar las importaciones y advierten que esto puede redundar en efectos negativos para la economía y para la producción, afectando la actividad y reduciendo la oferta de dólares.
Así, según apunta Lorenzo Sigaut Gravina, jefe de Macroeconomía de Equilibra, a iProfesional, "si bien es cierto que el fin justifica los medios, porque el BCRA venía perdiendo muchos dólares y gracias a esta jugada ahora pudo repuntar las compras del mes", es preocupante que la jugada afecte la producción y pueda redundar el algún problema de abastecimiento o incertidumbre sobre el costo de reposición de las mercaderías. Eso, según estima, "repercutirá indefectiblemente en mayor inflación".