Con una inflación acumulada de más del 60%, en qué bonos recomiendan invertir desde la City
Este martes, el INDEC dio a conocer el dato de inflación de mayo, que fue de 5,1%, menos al 6% de abril, pero aún elevada. Este porcentaje deja a las claras que uno de los mayores problemas de la Argentina en materia económica por estos días es el alza de precios, que es un gran desafío para el inversor, que suele buscar resguardar su dinero para que no pierda valor como consecuencia de esa variable. En consecuencia, desde la IOL invertironline brindaron una serie de recomendaciones para tener en cuenta en pos de lograr ese objetivo.
Este año se está caracterizando por una elevada indexación de precios en todos los países del mundo como coletazo del dinero extra que se volcó a la economía para contener el efecto del Covid-19 y agravado por la guerra que se desarrolla en estos momentos entre Rusia y Ucrania. Argentina también ha registrado un aumento contundente de la inflación.
De hecho, desde el comienzo de 2022, el Índice de Precios al Consumidor reflejó aumentos considerables. Tal es así que, con el 5,1% de mayo, la inflación de los primeros cinco meses del año alcanzó a 29,3%, mientras que, medida de manera interanual (de los últimos 12 meses), llego al 60,7%, el peor dato desde enero de 1992, cuando el acumulado anual había sido del 76%.
"A su vez, el dato también confirmó que la economía del país ya lleva 12 meses consecutivos con una inflación interanual por encima del 50%", advierten desde IOL invertironline. Y explican que uno de los factores que más incidió en los últimos meses fue el contundente impulso de las materias primas, que se produjo luego del inicio del conflicto bélico entre Ucrania y Rusia, que disparó el precio de la energía y el de los alimentos.
Atención inversores: mala perspectiva de inflación
Pero, más allá de lo preocupante de esos datos, Maximiliano Donzelli, Head of Research de IOL invertironline "aún quedan por delante otros factores que hacen considerar que la inflación podría continuar en estos niveles por mucho más tiempo". Ese es un gran problema para el inversor a la hora de planificar sus movimientos en este contexto.
Sucede que el atraso en tarifas y subsidios del transporte ha causado que los precios regulados estén considerablemente por debajo del índice general, generando fuerte presión para las cuentas fiscales. A su vez, se espera que las tarifas de electricidad aumenten en promedio un 17%, mientras que las de gas aumenten en promedio un 20%.
"Bajo este escenario, y teniendo en cuenta el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que publicó el Banco Central, pronostica que la inflación va a ser de un 72,6% en 2022, lo que refleja una suba de 7,5pp respecto del informe anterior", menciona Donzelli.
Caída de bonos: un elemento a tener en cuenta
Pero, además, indica que, a la variable inflacionaria, en estos últimos días también se sumó otro elemento que se debe considerar a la hora de evaluar alternativas de inversión para protegerse de la suba de precios en la y es lo que pasó en las últimas jornadas con el principal instrumento de renta fija que sirve como cobertura contra la inflación: los bonos CER.
Durante la semana pasada, estos activos tuvieron una caída histórica en su cotización y el informe de IOL invertironline señala que esto cortó las ganancias de los últimos meses y generó dudas sobre el futuro de la deuda nacional en pesos.
Recuerda en este sentido que se venía observando en el último año y medio que los activos ajustados por CER venían con gran demanda y con buenos rendimientos en dólares, superando al Índice Merval y los bonos soberanos hard-dollar.
"Si bien existieron diferentes rumores para justificar la caída, lo cierto es que, en el centro del movimiento se encuentra la preocupación sobre el futuro de la financiación del Gobierno nacional en el próximo año y medio", señala Donzelli.
Advierte que, en base a las cotizaciones y rendimientos de los distintos instrumentos CER, se observaba que el mercado asignaba una cierta probabilidad de una futura reestructuración de la deuda para el 2024, pero no consideraba ese riesgo para aquellos instrumentos que vencían en 2022 y 2023. Sin embargo, aclara al respecto que, desde 2019, la deuda en pesos indexada por CER ha pasado de representar el 27,3% a un 61,2%, con el 69,8% de la deuda bruta venciendo en 2022 y 2023, según lo reportado por el Ministerio de Economía.
"Con este panorama, y las tasas de refinanciamiento de deuda bajando respecto a enero de este año, el mercado se adelantó ante una eventual reestructuración", dice Donzelli sobre lo sucedido con los bonos CER. Aunque indica que en el escenario base de IOL invertironline no consideran que exista un problema de deuda para los próximos doce meses.
Bonos CER: ¿el mercado sobrereaccionó?
En consecuencia, observan que es posible que el mercado haya tenido una sobrerreacción en el tramo corto de la curva CER.
Así las cosas, Donzelli observa que, hoy, los bonos CER pueden representar una oportunidad para inversores que puedan mantener los instrumentos al vencimiento. Señala que, sobre la base de los vencimientos de deuda que quedan a futuro, "tenemos un segundo semestre menos cargado que el primero en términos de vencimientos, especialmente los próximos meses". El único gran vencimiento que se viene, según detalla es el T2X2, en septiembre de 2022.
Asimismo, considera que otro justificativo para tomar posición en bonos CER refiere a la dinámica de inflación futura, ya que, "con doce meses con la inflación interanual por encima del 50%, el escenario no parecería mejorar si nos basamos en lo reportado en el último REM del Banco Central".
Las mejores inversiones ante la alta inflación
Ante este panorama desafiante, desde el equipo de Research de IOL invertironline, creen que una de las mejores opciones para los tenedores de bonos o instrumentos de corto plazo que tengan vencimiento en el año 2022 o 2023 es no innovar en sus carteras y mantenerlos.
Por otro lado, para tenedores de bonos o instrumentos con vencimiento posterior a 2024, señalan que sería ideal rotar parte de la cartera a instrumentos de menor plazo, ya que consideran que el escenario no mejoraría significativamente a futuro y podrían aumentar las dudas sobre el tratamiento de la deuda posterior 2023.
Y, por último, para los inversores que no estén posicionados en estos instrumentos y se pregunten si es un punto de entrada, mencionan que hay que considerar algunos aspectos, a saber:
- En primer lugar, los precios actuales han hecho que los rendimientos de los instrumentos CER sean los más altos en los últimos dos años.
- En segundo lugar, con niveles altos de inflación como los actuales y los proyectados, los rendimientos superan a otros instrumentos en pesos.
No obstante, también hay que considerar que, a medida que nos acerquemos al año 2023, la percepción del mercado sobre los riesgos de estos bonos puede aumentar, afectando las cotizaciones para aquellos inversores que no los mantengan al vencimiento.
En este sentido, aseguran que, considerando las proyecciones de inflación del REM, "una buena opción son los bonos más líquidos y de menor vencimiento, pero con buenos retornos". ¿Cómo cuáles? Pue bien, Donzelli incluye en este grupo los siguientes:
- Las letras X16G2, que vence en un plazo aproximado de 60 días.
- La letra X20E3, que vence en unos siete meses.
- Y también menciona como una buena alternativa el TX23, pensando en una inversión al vencimiento, dentro de unos nueve meses.