Las metas del FMI están en riesgo: si se incumplen, ¿habrá waiver o se caerá el acuerdo?
Las tres metas relevantes del acuerdo con el FMI -la de acumulación de reservas, la de déficit fiscal y la monetaria- corren alto riesgo de ser incumplidas en el segundo trimestre, aunque el portavoz del organismo internacional, Gerry Rice, ratificó que no habrá cambios en las pautas del programa.
En ese marco, la duda que empieza a surgir en el mercado es si ante un eventual pedido de waiver (perdón) de parte de Argentina, las autoridades del FMI lo concederán o puede caerse el acuerdo e interrumpirse el envío de los desembolsos previstos.
Para los analistas, un eventual fracaso a solo dos meses de haberse cerrado el acuerdo con el FMI -fue aprobado formalmente por el directorio de esa institución el 25 de marzo- es producto de "errores de diseño" y "culpas compartidas".
FMI: ¿por qué habría un incumplimiento de metas tan pronto?
Adrián Yarde Buller, economista jefe de Facimex Valores, afirmó que "los desvíos que se están acumulando tan temprano son demasiado grandes y eso es una señal contundente de que el programa estuvo mal diseñado de entrada. Hubo supuestos que no se cumplieron, como el de la inflación", que se fijaba en un rango anual de entre 38% y 48%.
"Es un programa que nació con claras inconsistencias. Tal vez, la más importante haya sido combinar una política fiscal muy gradual con una restricción agresiva al financiamiento con emisión monetaria del BCRA", analizó.
En sintonía, la consultora LCG planteó que "ya se nota un aire de fracaso del acuerdo" y sostuvo que "hay responsabilidades compartidas por múltiples actores". Y cuestionó: "En primer lugar, está el diseño del paquete de medidas. El programa se realizó en un contexto enel cual la inflación impulsada por el precio de la energía estaba generando problemas a nivel global. Las premisas de inflación con las que se ha trabajado hasta el momento ya quedaron desactualizadas".
Además, LCG mencionó "la falta de volumen político para llevar adelante el programa" y alegó que "la necesidad del apoyo de la oposición para que sea aprobado (en el Congreso) ya implicó un inicio débil para un acuerdo que supone un ajuste". Por último, la consultora consideró que "hay una responsabilidad" que "le cabe al gabinete económico por la falta de voluntad para impulsar las políticas a las que se comprometió".
FMI: ¿si hay un incumplimiento, concederá un waiver o puede caerse el programa?
Yarde Buller evaluó en una exposición virtual organizada por Facimex que "hay incentivos de ambas partes para que Argentina permanezca dentro del programa". El economista argumentó que "del lado del FMI un incentivo es que ellos el gran desembolso lo hicieron en marzo. Y, a partir de ahora, casi todos los desembolsos netos del resto del programa son negativos; es decir, que ante cada revisión los fondos que nos van a girar no alcanzan a cubrir los vencimientos de deuda que tiene el país".
A su vez, "del lado de Argentina, el equipo económico sabe que tiene que evitar un escenario de default porque podría tener efectos disruptivos en términos macro", fundamentó. El analista destacó que "estamos ante un programa que refinancia vencimientos pero no hay plata fresca para desembolsar" lo cual, dijo, lo diferencia del acuerdo stand by que se había firmado a mediados de 2018 con el FMI. "El FMI ve la situación de la macro argentina y sabe que si el acuerdo se cae el país no está en condiciones de ir pagando los vencimientos", subrayó.
De igual lectura, el economista Federico Glustein señaló a iProfesional que "el FMI sabe, porque avaló ciertas perspectivas económicas, que Argentina tenía posibilidades altas de no llegar a todas las metas, entonces será laxo y dará un waiver". Y agregó: "Además, el FMI es el principal acreedor de nuestro país y Argentina es el crédito más grande de la historia del organismo, hay un win-win (ganar-ganar) en sostener el acuerdo a pesar de algunos desvíos". No obstante, Glustein cree que el FMI "se va a ir endureciendo a medida que avance el tiempo y los incumplimientos sean cada vez mayores, lo que impactará más en el futuro gobierno".
Por su parte, Fernando Baer, de Quantum Finanzas, juzgó que "el waiver vendrá, porque el programa está concebido para ir incluyendo waivers, pero si los desvíos son muy marcados, se podría poner difícil. No descarto que en ese caso el programa se pueda caer en el tercer o cuarto trimestre".
Para LCG, ante un incumplimiento de metas "el gabinete económico y el FMI deberán analizar la conveniencia de seguir con el programa actual; no será fácil digerir un fracaso tan rápido ya no para el ejecutivo, sino para el propio organismo".
Metas con el FMI: ¿se mantendrán sin cambios?
Yarde Buller sostuvo que los dichos de Rice de que las metas y los objetivos del programa permanecerán sin cambios "no tienen mucho sentido cuando el grueso del desvío es causado por fallas en el diseño del programa", por lo que "lo más razonable es que haya cambios sustanciales".
Además, el analista explicó que "cuando el programa se firmó, se fijó que las metas del primer semestre eran criterios de ejecución; es decir, que tenían que ser cumplidas. Pero las del segundo semestre eran indicativas, solo se convertirían en objetivos firmes si el programa avanzaba en línea con lo que estaba planteado al momento de firmarlo, algo que claramente no ocurrió".
"Hay elementos de sobra para pensar que esas metas del segundo semestre se pueden cambiar y que cuando se conozcan los nuevos criterios de ejecución de la segunda mitad del año veamos números diferentes. También es probable que aparezca algún ajustador al gasto social que permita disimular un poco lo que va ser el desvío de la meta fiscal", especuló.
En ese marco, el analista cree que "es probable que hacia adelante tengamos un programa un poco más balanceado, tal vez con metas monetarias y de reservas más laxas, compensado con una política fiscal un poquito más dura, y supuestos de inflación más realistas, creemos que se va a tratar de convalidar algo intermedio en zona de 65%".
En este contexto, LCG aseveró que "si hay algo que preocupa no es tanto cambiar el programa con el FMI sino que ello retardará aún más el regreso de Argentina a los mercados de deuda y la salida del cepo".