POLÍTICA MONETARIA

El dólar pierde la carrera contra la inflación en lo que va del año: ¿pondrá primera en abril?

Se esperaba una aceleración del dólar al nivel de la inflación para este año, pero las cosas no sucedieron así. ¿Cómo administrará el BCRA la devaluación?
FINANZAS - 31 de Marzo, 2022

A pesar de todos los pronósticos, que desde diciembre de 2021 venían anticipando que, una vez que se hubiera firmado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la evolucion del precio del dólar se iba a acelerar al ritmo de la inflación y que el nivel de microdevaluaciones diarias del peso (conocido como crawling-peg) podía llegar a un ritmo mensual del 4%, abril está a punto de comenzar y nada de eso se confirmó en los hechos.

Recordemos que, desde marzo del año pasado, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) viene aplicando una estrategia de evolución controlada para la apreciación del dólar, que hasta ahora iba por detrás del avance de la inflación, pero este año se anticipó que la tasa de ajuste seguiría la evolución de los precios de la economía. En ese marco, el dólar se apreció 2,2% en enero, 2,3% en febrero y 3,2% en marzo. 

Así, si bien, tal como explica a iProfesional la economista Candelaria Botto, "este año se está teniendo más en cuenta la inflación mensual para llevar adelante las micro-devaluaciones diarias", a la fecha, con una inflación acumulada del 8,6% en los dos primeros meses del año y alrededor del del 15%, si se considera la estimada para marzo, la devaluación del peso apenas roza el 8% en ese plazo.

En consecuencia, varios economistas advierten que, aunque se esperaba lo contrario, el Gobierno no está acelerando el tipo de cambio, al menos por el momento. 

Esto se da en un marco en el que el FMI no está pidiendo un salto devaluatorio fuerte, ya que sabe que sería un riesgo para la macroeconomía Argentina, y el objetivo del BCRA es, tal como lo anticipó Miguel Pesce, presidente de la entidad, hace algún tiempo, calibrar la gestión del tipo de cambio para garantizar la competitividad de los productos argentinos en el exterior a mediano plazo.

Miguel Pesce viene llevando el precio del dólar por atrás de la inflación.

Precio del dólar: así evoluciona

"Si la inflación es tanto, el tipo de cambio subirá de una manera similar", indicaban desde el Gobierno tras la firma del acuerdo con el FMI. 

Sin embargo, en un contexto de descontrol de precios, hay consenso en el mercado respecto de que la evolución del dólar seguirá a la inflación desde atrás, aunque sí se prevé que se acerque un poco más que el año pasado, cuando el IPC le sacaba 2 puntos porcentuales de ventaja todos los meses.

Esta es la visión del director de la consultora Analytica, Claudio Caprarulo, cuando asegura que será difícil que le gane, aunque sí es esperable que el dólar se siga apreciando.

¿Por qué? Porque el Gobierno se enfrenta al desafío de mantener un delicado equilibrio entre inflación, tasas y apreciación del dólar. Eso hará que, tal como se está dando en estos días, el crawling-peg se acelere entre un 2% y un 2,5% mensual en estos primeros meses del año y se vaya tomando un poco más de velocidad (aunque, si la inflación se desacelera a partir de mayo como prevé el Gobierno, ese ritmo también podría atenuarse hacia fin de año).

En otras palabras: la estrategia del BCRA no es dejar mover al dólar al mismo ritmo que la suba de la inflación, sino que lo hará subir  en la medida justa en que se pueda lograr una mejoría en las cuentas y las reservas. "Es una discusión que se viene con el actual registro de inflación mensual, pero habrá que ver qué se viene tras la aprobación del acuerdo con el FMI y si eso disipa las dudas en el panorama macroeconómico", señala al respecto Botto.

Sucede que el Gobierno no quiere meter presión sobre la inflación, menos en un momento en el que ese índice muestra niveles muy elevados por estos días (recordemos que en febrero fue mucho más alta que la de enero y se ubicó en un 4,7% y para marzo se espera que sea del 5%).

Si sube mucho el dólar, la inflación se espiralizaría.

Aceleración del dólar: lo negativo y lo positivo

Tal como señala el economista de EcoGo Lucio Garay Méndez, "corregir más fuertemente el atraso del dólar lleva a que los precios de los bienes dolarizados suban con mayor fuerza" y eso influye en los valores de la economía.

Sin embargo, mientras como bien confirma el economista Federico Glustein una aceleración más fuerte del crawling-peg "redunda en un incremento de la inflación por costos en bienes intermedios, presión sobre expectativas y cambios en los valores de los bonos atados a pesos, con lo cual habría que subir la tasa", hay algunos elementos que, a la vez, requieren una aceleración de la apreciación gradual del dólar.

Así lo sostiene Glustein cuando asegura que la aceleración del tipo de cambio impacta en varios ítems:

  • La balanza comercial, porque, si se atrasa, hay una mayor demanda de importaciones, afectando las reservas.
  • La brecha del dólar: porque si se aprecia en la justa medida ayudaría a reducir la brecha con las cotizaciones financieras y caería la demanda potencial.

En palabras del economista jefe de Inviu, Diego Martínez Burzaco: "No hay que seguir atrasando el tipo de cambio porque de esa manera se sigue ampliando la brecha del dólar y, por otro lado, no se genera ningún incentivo a ampliar el abanico de exportaciones y eso nos hace totalmente dependientes del campo y de los precios internacionales".

Advierte que ese es un riesgo muy grande porque cualquier factor exógeno, como es ahora la guerra, puede alterar el precio de los commodities.

El Gobierno necesita más dólares para cumplir con sus compromisos con el FMI.

Más dólares para las reservas

Garay Méndez señala que, "en un contexto de baja demanda de pesos, un abaratamiento del dólar implica que te saquen todos los dólares de las reservas (vía mayores importaciones, deuda o salida de capitales) o que esa demanda de dólares no convalidada por no tener acceso al mercado oficial se traslade en una mayor brecha".

Martínez Burzaco alerta que "así, no se permite generar el proceso de acumulación de reservas del BCRA que se necesita para hacer frente a cualquier cuestión cambiaria en un momento en el que la situación está muy complicada en términos del balance para el regulador financiero".

Y Caprarulo agrega el hecho de que los compromisos de deuda, tanto con el Fondo como con acreedores privados, van a requerir una acumulación de dólares que no se consigue desde hace muchos años.

Te puede interesar

Secciones