Guzmán habló sobre las criptomonedas: qué dijo sobre los impuestos a estos activos digitales
El ministro de Economía, Martín Guzmán, y el representante argentino en el Fondo Monetario Internacional (FMI), Sergio Chodos, participaron de la cumbre de ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20 del año, que tuvo lugar hasta el viernes en la ciudad indonesia de Yakarta.
Allí, el Gobierno argentino insistió con sus demandas para bajar los sobrecargos del FMI a países con créditos excepcionales y dar mayor flexibilidad en el financiamiento a países de ingresos medios, en el contexto de la pandemia de coronavirus y del acuerdo definitivo que negocia la Argentina con el organismo de crédito. Guzmán también se refirió al tema de los criptoactivos, al manifestar que "coincidimos en la importancia del desarrollo de un marco de reunir la información que garantice el pleno cumplimiento de las obligaciones tributarias".
En otras palabras, el ministro no se manifestó en contra de las criptomonedas, sino que, en cambio, quiere reforzar los esquemas que permitan cobrar impuestos.
Guzmán en la cumbre de ministros del G20
El titular del Palacio de Hacienda intervino de manera virtual como orador principal en la sesión de Tributación Internacional, en donde afirmó que la Argentina considera que "la solución global para abordar los desafíos fiscales derivados de la digitalización de la economía es un paso importante en la acción de abordar uno de los peores problemas de la economía global, el de la elusión fiscal global". "El trabajo que se viene realizando en el desarrollo de los detalles técnicos de la solución será crucial para su efectividad", agregó.
En este sentido, el Ministro hizo hincapié en la necesidad de "asegurar la transparencia en la metodología y en la información utilizada para evaluar el impacto fiscal de la solución global, brindando así la certeza de que cada jurisdicción contará con una herramienta válida y actualizada para realizar dicha evaluación, antes y durante su implementación".
En segundo lugar, Guzmán resaltó "las especificidades técnicas relacionadas con los compromisos de abstenerse de tomar medidas unilaterales y procedimientos eventuales para someterse a mecanismos obligatorios y vinculantes de solución de controversias que aún están pendientes de definición, a fin de respetar las idiosincrasias de las diferentes jurisdicciones, para que las economías desarrolladas y en desarrollo estén en pie de igualdad en el proceso de toma de decisiones".
Asimismo, el titular de Economía explicó que "dado que no tendremos una idea precisa de cómo funciona el sistema hasta que esté en práctica por un tiempo, debería incluirse un mecanismo de revisión y adaptación de los elementos de la solución global". Ante los Ministros y Presidentes de Bancos Centrales del G20.
"Mejorar la arquitectura tributaria internacional"
Por último, Guzmán sostuvo que "Argentina reconoce la muy importante labor de este comité para mejorar la arquitectura tributaria internacional y se mantiene abocada a buscar soluciones a las injusticias históricas de la elusión y evasión tributaria global, que han venido perjudicando los procesos de desarrollo económico y social, para poder construir una economía global más inclusiva, dinámica y sostenible.
En el encuentro, los representantes del G20 debatieron acerca de los desafíos que enfrenta la arquitectura financiera internacional y destacaron, a través de su Comunicado, los avances en la revisión de la política de sobrecargos del FMI. "Tomamos nota de la actualización del Fondo Monetario Internacional sobre la política de sobrecargos y observamos las oportunidades que tiene el Directorio Ejecutivo del Fondo para debatir cuestiones relacionadas, incluso en el contexto de la próxima revisión de la posición de ingresos del Fondo", se definió en el Comunicado.
Al mismo tiempo, el G20 hizo un llamado al FMI para establecer un Fondo Fiduciario de Resiliencia y Sostenibilidad (RST por sus siglas en inglés) para las Reuniones de Primavera 2022, y que trabaje junto a sus miembros para garantizar que este operativo para las Reuniones Anuales 2022, y para que apoye la implementación de este fondo en estrecha colaboración con el Banco Mundial.
En otro sentido, los Ministros y Presidentes de Bancos Centrales discutieron las perspectivas económicas, y las estrategias para avanzar en el lema de la presidencia de "Recuperarse juntos y recuperarse más fuerte". En relación a este punto, se coincidió en que los principales riesgos para la economía a nivel global son las tensiones geopolíticas, las vulnerabilidades macroeconómicas y financieras y el impacto del cambio climático y tendrán que ser monitoreados.
Finalmente, los miembros discutieron sobre la necesidad de reforzar la coordinación entre los Ministros de Finanzas y de Salud para fomentar la prevención, preparación y respuesta a futuras pandemias y participaron de un Seminario de Alto Nivel donde se debatieron las estrategias para fomentar el Refuerzo de la Arquitectura Sanitaria Internacional.
En la Reunión participaron de manera presencial en representación de la Argentina el Director Ejecutivo por el Cono Sur en el FMI, Sergio Chodos; la Secretaria de Asuntos Económicos y Financieros Internacionales, Maia Colodenco y su asesora Eugenia Arioua.
G20: las criptomonedas, un riesgo para la estabilidad
El Consejo de Estabilidad Financiera, creado por el G20, advirtió en un informe de que los activos digitales, o criptomonedas, podrían amenazar pronto la estabilidad financiera mundial.
A través de un duro informe elaborado recientemente, el Consejo indica que los riesgos que plantean las criptomonedas podrían "intensificarse rápidamente". Además, el organismo pidió una acción urgente para garantizar la contención de una crisis en el mercado de activos digitales.
El Consejo de Estabilidad Financiera, que hace recomendaciones a los países del G20 sobre normas financieras, instó a los responsables políticos a actuar rápidamente en la elaboración de normas que cubran el mercado de activos digitales, dado el estrecho vínculo con el sistema financiero tradicional.
"Es evidente que hay un mayor grado de urgencia", expresó dicho Klaas Knot, el gobernador del banco central holandés que se convirtió en presidente del consejo con sede en Basilea en diciembre, describiendo cómo la junta había estado previamente "cómoda" diciendo que no había riesgo material en este mercado debido a su tamaño y la falta de conectividad con los mercados financieros tradicionales.
"No sólo ha habido un rápido aumento en la escala, sino también, los puntos de contacto con la intermediación financiera tradicional han aumentado y por lo tanto necesita más atención por parte del Consejo de Estabilidad Financiera", agregó. Algunas partes del mercado de las criptomonedas y sus conexiones con el resto del sistema financiero, son difíciles de evaluar debido a las "importantes lagunas de datos", expresó el organismo.
Punta del iceberg en cuanto a capitalización
"Eso significaría que podríamos estar sólo viendo la punta del iceberg en cuanto a capitalización, lo que supone un peligro para la vigilancia de la estabilidad financiera", analizó.
Hasta el momento, los reguladores mundiales han recibido a las criptomonedas con diversas medidas, entre las que se incluyen una severa represión en China y los esfuerzos de España o Reino Unido por restringir los anuncios de criptomonedas y registrar a las empresas de criptomonedas para que cumplan con las normas de blanqueo de capitales y lucha contra el terrorismo.
El Consejo de Estabilidad Financiera está trabajando en normas globales para los activos digitales, que según Knot deberían "avanzar bastante en 2022". "Hay un fuerte impulso por parte de todas las jurisdicciones que sienten que estos riesgos están evolucionando rápidamente", explicó "Si tienes un servidor, puedes llevarlo bajo el brazo y ponerlo en cualquier parte del mundo y empezar a emitir estos activos, ¿no?", ironizó.
Entre las consecuencias, resaltó que pueden generar "desajustes de liquidez, riesgos crediticios y operativos que hacen que las monedas estables sean susceptibles a corridas repentinas y perturbadoras de sus reservas, con el potencial de extenderse a los mercados de financiación a corto plazo; el mayor uso del apalancamiento en las estrategias de inversión; riesgo de concentración de las plataformas de negociación; y la opacidad y falta de control regulatorio del sector".
El valor de mercado de los criptoactivos, como el Bitcoin y Ethereum, pasó de unos 350.000 millones de dólares a principios de 2020 a más de 3 billones el año pasado. Desde entonces ha caído a poco más de 2 billones de dólares.