Dólar "puré", negocio imbatible: la brecha entre solidario y blue ya permite ganar casi 20%
En una semana en la que la incertidumbre está a la hora del día, al cierre de las operaciones del martes el dólar blue cotizó a $219,50 para la venta. Con este nuevo avance, la cotización paralela volvió a ampliar la brecha respecto al tipo de cambio oficial, marcando ahora una diferencia de casi 110% en relación al mayorista y de cerca de 100% en comparación con el promedio minorista.
Para quienes compran dólares pensando en el mediano o largo plazo, ese es el precio que se tiene en cuenta, pero para aquellos que buscan hacer una diferencia en pesos de corto plazo, se diría en el día, el que importa es el precio de compra, que se ubica en los $215,50. Si bien este último dato no tiene la difusión del de compra, es clave para hacer el denominado "puré".
El denominado "dólar puré" o como se dice en la jerga "hacer el puré" surge de comprar dólar ahorro o solidario, es decir aquel que permite el cupo mensual en el mercado formal (en este caso u$s200 por mes y por persona), o dólar MEP o Bolsa, para luego venderlos, a un precio mayor (dólar blue), en el mercado paralelo (cuevas).
En épocas de bolsillos flacos, para muchas personas esta operación se ha convertido de un tiempo a esta parte en una fuente adicional de ingresos, que se hace mucho más atractiva en aquellos momentos en los que se amplía la brecha entre este último y el blue, como sucedió esta última semana.
A manera de ejemplo, según la última cotización disponible, el dólar solidario cotizaba en las pizarras de los bancos a $180,67, mientras que el blue comprador lo hacía a $216,50.
Quien supere todos los obstáculos que fue sumando la AFIP a lo largo del tiempo para poder hacerse de esos u$s200 debe hacer una "inversión" de $36.134 para hacerse en cuestión de minutos y sin mayores trámites de $43.300. Es decir que se obtendría una ganancia de más de $6.700, equivalentes a casi el 20% diario.
Esta rentabilidad está teniendo su correlato en forma casi inmediata en la cantidad de gente que comenzó a volcarse en las cuevas tanto en la Capital Federal como en el Gran Buenos Aires, donde el fenómeno se hace mucho más evidente pues muchas de ellas operan directamente con locales a la calle bajo la apariencia de casas de cambio autorizadas o en muchos casos en pequeños negocios en los que se incrementó notablemente el número de personas esperando ser atendidas.
A diferencia de lo sucedido en ese segmento, quienes operan con dólares MEP están prácticamente afuera del negocio, pues por estos días su cotización se colocó en un punto intermedio entre las puntas compradora y vendedora del blue. De esta manera, quienes operan en este segmento recuerdan con cierta melancolía lo sucedido en no hace más de algunos días, cuando la diferencia entre ambos llegó a elevarse hasta por encima del 2,5%.
Entonces, quien compró u$s1.000 comenzó pagando $203.700, para obtener por la venta en el mercado marginal un total de $209.000. De esta manera, la ganancia fue de $5.300.
El derrumbe de los márgenes se produjo apenas se conocieron las nuevas restricciones impuestas por la Unidad de Información Financiera que estableció que los agentes bursátiles podrán solicitar a sus clientes declaraciones juradas de Ganancias y Bienes Personales para operar en el mercado de capitales.
Ante este nuevo avance, fue lógico que el precio del dólar MEP trepara en forma sustancial hasta los 216.70 pesos por unidad.
Una vez más, la pregunta es por qué sube el dólar, no solo en el mercado paralelo, sino también el resto de los denominados dólares financieros, como el MEP o el contado con liquidación.
La respuesta es evidente y pasa por la falta de avances en el tan mentado acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, en un contexto de elevada inflación, déficit fiscal desbordado, con importante emisión monetaria, más la débil posición de las reservas del Banco Central.