Atención inversores: el Bitcoin se encamina hacia la temida "cruz de la muerte", ¿qué significa?

Lark Davis es un experto neozelandés en el criptomonedas, que tiene unos 830.000 seguidores en Twitter y 480.000 en YouTube, por lo que sus opiniones son tomadas en cuenta a lo largo de todo el mundo.

Recientemente Davis advirtió que el Bitcoin podría enfrentar serios problemas en el muy corto plazo, ya que según su opinión se está acercando a lo que los analistas técnicos denominan la "cruz de la muerte".

Cuando menciona la cruz de la muerte, el experto hace referencia a un evento que marca el punto en el que lo que solo podría ser un retroceso a corto plazo se convierte en una tendencia bajista a más largo plazo.

¿Cuándo se produce este fenómeno? En el momento en que la línea que muestra el promedio de los precios de las ultimas 50 ruedas cruza desde arriba el promedio de 200 días y se ubica por debajo de la misma. Y en otro tweet muestra el gráfico que en su opinión estaría preanunciando el fenómeno. 

"Bitcoin está a punto de tocar la muy temida 'cruz de la muerte'. ¿Pero tiene importancia?", escribió el analista en un tuit publicado este jueves.

La respuesta la dio él mismo, ya que a continuación escribió que "Bueno, ya ha habido 8 cruces de la muerte en la historia del bitcoin. De los cuales cuatro marcaron el fondo aproximadamente y 4 llegaron antes de liquidaciones del orden del 30, 60, 61 y 65%".

Finalmente, abrió un interrogante sin respuesta al menos en el corto plazo al preguntar: "¿Qué nos depara la cruz de la muerte número 9?".

La criptomoneda viene enfrentando desde principios de año fuertes presiones vendedoras

Haciendo un poco de historia sobre esta cuestión, cabe señalar que la última vez que el Bitcoin enfrentó una situación similar fue en junio del 2021.

En esa oportunidad, el precio de la criptomoneda se desplomó hasta aproximadamente u$s28.000 por primera vez desde comienzos de ese año, perdiendo así un 56% de su valor desde el máximo de 64.000 dólares registrado un mes antes.

Más allá del mercado de criptomonedas, la cruz de muerte ha proporcionado una señal bajista antes de grandes recesiones económicas en la historia, como en 1929 o 2008. Sin embargo, no es infalible, pues también puede proporcionar señales falsas, como por ejemplo sucedió en 2016.

Los motivos de esta caída del Bitcoin podrían ser varios, pues van desde los cambios de política monetaria que impulsará la Reserva Federal para combatir las crecientes tasas de inflación hasta el conflicto de Kazajistán que afecta directamente a la minería de criptomonedas.

Precisamente, los planes de la Reserva Federal hacen que se observe a las criptomonedas con mayor pesimismo, como un activo aún más de riesgo de lo habitual, no solo por la esperada reducción de la liquidez a nivel global sino también por su reciente anuncio referido a las criptomonedas.

Al mismo tiempo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) señalaba que los criptoactivos ya no están al margen del sistema financiero.

"Dada su volatilidad y valoraciones relativamente altas, su mayor movimiento conjunto pronto podría plantear riesgos para la estabilidad financiera, especialmente en países con una adopción generalizada de criptografía. Por lo tanto, es hora de adoptar un marco regulatorio global integral y coordinado para guiar la regulación y supervisión nacional y mitigar los riesgos para la estabilidad financiera derivados del ecosistema criptográfico".

 

Según los medios especializados en criptoactivos esta tendencia también se replicaría en otros tokens como Ether y hace que las proyecciones más optimistas para este año comiencen a ser puestas en serias dudas.

"Solo el 5% de los clientes de JPMorgan Chase & Co. ahora prevén que Bitcoin alcance los u$s100.000 para fines de 2022", detalla Bloomberg.

Más allá de estos nubarrones en el horizonte, el bitcoin ha disfrutado desde el comienzo de la pandemia en 2020 hasta finales de 2021 de una trayectoria muy exitosa, impulsada por el respaldo de empresas como Tesla o Square, figuras prominentes como George Soros o Tim Cook, instituciones financieras y pequeños inversores, aunque sigue existiendo recelo entre las autoridades.

Es por ello, que si bien son tiempos complicados para este mercado, anteriormente se han producido otros baches y no se deben descartar sorpresas que lo reaviven.