El Banco Central cumplió una semana sin perder reservas: ¿qué claves explican esta racha que no ocurría hace meses?
Este martes, el Banco Central logró completar una semana sin pérdida de reservas. Compró u$s1 millón durante esa jornada y, así, acumula adquisiciones por cerca de u$s25 millones en los últimos siete días. Si bien se trata de una seguidilla de embolsos pequeños, tal como lo ve el economista Federico Glustein, lo positivo es que "las compras durante jornadas consecutivas no sucedían desde octubre pasado, cuando realizó cuatro al hilo, aunque por mayores volúmenes".
Los números detrás del dato de reservas
Y, sin dudas, la clave para entender esta tendencia está en la dinámica de liquidación de exportaciones del campo que se está dando por estos días. "En esta época del año se liquida el trigo, que está en temporada (la llamada cosecha fina), la soja que los productores tenían guardada en los silos cosechada entre mayo y junio de este año y el maíz, que goza de buenos precios internacionales y hay mucha oferta por estos días", explica a iProfesional Pablo Adreani, consultor especialista en agro y analista de mercados agrícolas.
Así, el experto revela que, en las últimas tres semanas (desde la última de noviembre a las dos primeras de diciembre), los productores vendieron 1,4 millones de toneladas de trigo de la cosecha nueva, 1,4 millones de toneladas de maíz y 860.000 de soja.
"Teniendo en cuenta que el trigo tiene un precio FOB de u$s300 por tonelada, el del maíz está en u$s250 y la soja cotiza u$s480, esos volúmenes equivales a un total de U$s420 millones en trigo, u$s362 millones en maíz y u$s412 millones en soja. Cerca de u$s1.200 millones en total", detalla Adreani.
Esto se suma a los casi u$s300.000 liquidados entre lunes y martes de esta semana, según datos del equipo económico. En total, al día de hoy, las exportaciones del campo de las últimas tres semanas y media suman u$s1.500 millones.
Estos números reflejan una buena dinámica de ventas al exterior ya que, al 30 de diciembre del 2020, el productor se quedó con 20 millones de toneladas, que liquidó este año y en 2021 estaría conservando 7 millones, según indica Adreani. "El nivel de liquidación depende de los precios y del volumen de la cosecha del año. En 2021, la cosecha ha sido menor que en 2020 y lo que va haciendo el productor es vender porque necesita la plata para comprar insumos. Ve sus necesidades de caja para pagar insumos y flete. Digamos que responde a la necesidad de venta que va teniendo para cubrir compromisos", aclara el consultor.
En consecuencia, anticipa que, conforme vaya avanzando el calendario, la liquidación de exportaciones va a ir mermado. "El productor vende, más o menos, hasta mediados de enero y, luego, hay un parate hasta que comienza la cosecha gruesa nuevamente en abril o mayo del año próximo", informa.
De este modo, espera que, para lo que queda de ese plazo, se vayan a liquidar cerca de 2,5 millones de toneladas de trigo, 800.000 de maíz y 1 millón de soja. "Esto, en términos de divisas equivale a u$750 millones de trigo, u$s200 millones de maíz y u$s480 millones de soja", indica Adreani. Es decir, u$s1.400 millones en total a los que, si se les adicionan los u$s1.200 millones que mencionaba antes, da un total de u$s2.600 millones.
Se trata de una cifra u$s900 millones inferior a los u$s3.500 millones que esperaba el BCRA, aunque Adreani aclara que habrá que esperar a ver el cierre de balance de los productores al 31 de diciembre, que se suele conocer en la primera semana de enero para tener el dato definitivo de este año y ajustar la previsión para el resto del período.
¿Cómo se conforma el poder de compra del BCRA?
Pero lo concreto es que son datos alentadores para el BCRA en un momento en el que necesita reforzar sus reservas para enfrentar los compromisos de deuda que tiene a futuro (el primero vence mañana y es un pago de u$s1.900 millones al Fondo Monetario Internacional).
Recordemos que, para calcular el volumen operado de compra o venta de dólares por parte del BCRA, el total diario liquidado debe ser contrastado contra el nivel de importaciones registradas en la jornada. "Las importaciones se descuentan de las exportaciones y el resultante es lo que el BCRA logra embolsar", explica Esteban Marzorati, ex director de Importaciones de la Nación.
En ese sentido, señala que, si observamos el comportamiento de las importaciones en diciembre a lo largo de los años, la dinámica suele ser menor a la del resto del año, en parte, debido a una mayor demanda de pesos para otros destinos (como pago de aguinaldos, vacaciones y bonos en las empresas), que redunda en una menor derivación de divisas para la importación de productos.
Sin embargo, según fuentes del equipo económico, este año, diciembre pareciera que va a ser récord de importaciones en el año, en parte por el parate que hubo en octubre, que hizo que muchas operaciones se retrasaran, y también por una expectativa de que desde enero se acelere el ritmo devaluatorio del peso.
Eso explicaría por qué, aunque esté reinando cierta paz cambiaria post elecciones, el BCRA no logra realizar compras más grandes de dólares por estos días en una etapa del año en la que, tal como describe Marzorati, "habitualmente, tiene necesidad de tomar una posición menos activa que en otros meses". Sin embargo, a medida que se acercan las fiestas de fin de año, el ritmo importador tiende a bajar y eso relaja un poco más la cuerda.
No obstante, el ex funcionario advierte que, una vez pasado diciembre, es esperable que cambie el escenario y se tienda a revertir la dinámica de demanda de pesos hacia un mayor requerimiento de dólares. Y, desde ese momento en adelante, habrá que ver cómo hace el BCRA para cuidar sus reservas.