Una provincia se quedó sin dólares y los ahorristas compran otra moneda extranjera
La demanda por dólares se multiplicó durante la última semana, eliminando por completo la calma que se había vivido tras las PASO. En algunas provincias la necesidad por conseguir dólar blue es tan grande que ya hay faltante, y la gente se vuelca por opciones insólitas.
Este es el caso de Posadas, en Misiones, localidad que experimenta un faltante de dólares en el mercado informal. La necesidad de la población de realizar negocios al otro lado de la frontera llevó a la aparición de una solución insólita: el guaraní blue.
Medios locales remarcan que la moneda paraguaya era la menos requerida en esa localidad, en la que se elegía al dólar en primer lugar y al real brasileño en segundo, pero ahora dio un salto.
El disparador de esta inédita situación fue la falta de dólares blue y la imposibilidad de miles de personas de acceder al mercado cambiario de manera legal, debido al cepo. Durante estos días el guaraní cotiza a 35 a 1 para la venta, y cada vez son más las personas que lo eligen para escapar del peso.
Actualmente la cotización indica que 7 mil paraguayos equivalen a un dólar, por lo que los argentinos deberán comprar casi 20 mil pesos en esa moneda para conseguir el equivalente a 100 dólares. El cálculo indica que su precio es similar al del dólar blue.
Problema en las empresas
La suba que experimenta el dólar "blue", que viene de marcar un nuevo récord nominal histórico, junto con la incertidumbre por las elecciones, generaron un cambio de reglas en sectores como la construcción y la venta de repuestos y accesorios para vehículos, además de concesionarias.
El salto del billete verde paralelo, sumado a las crecientes expectativas de devaluación, profundizaron el temor de empresarios y comercializadores en general, que ante la incertidumbre respecto de qué pasará con la moneda comenzaron a dosificar la venta de materiales como a generar cotizaciones por lapsos cada vez más acotados.
En ese sentido, referentes de organizaciones ligadas al desarrollo inmobiliario, empresarios e, incluso, vendedores, consultados por iProfesional coincidieron en que se han vuelto cada vez más usuales los "presupuestos que vencen a las 24 horas", además de también proliferan las operaciones que se cancelan directamente en dólares.
Respecto de esto último, referentes de la Sociedad Central de Arquitectos (SCA) afirmaron a este medio que en los corralones "prevalece, para quienes optan por pagar con la moneda norteamericana, una cotización ‘celeste’ del dólar, con un valor intermedio que oscila entre el oficial y el ‘blue’".
Desde la entidad señalaron que no existe impedimento legal para presupuestar o abonar en esa divisa, aunque sí expusieron que el grueso de los comercializadores asienta en su contabilidad la operación "como si se hubiese tomado la cotización del dólar oficial cuando en realidad el parámetro real que se usa es ese ‘celeste’, que es un intermedio".
Por el lado de Grupo Construya, organización que integra a los principales proveedores de insumos para la construcción, señalaron, además, que la reciente parálisis de hornos que llevó a cabo Loma Negra acentuó el temor a los faltantes y el incremento en el valor de la bolsa de cemento –que, aunque se comercializa en pesos, cotiza en dólares para la cadena de ventas–.
Entre los proveedores reconocen que se perdieron los precios de referencia. Al mismo tiempo, señalan que la decisión oficial de restringir aún más los importados, con el efecto que esto tiene en términos de reabastecimiento de determinados insumos, reavivó la especulación en los corralones. Afirman que no faltan puntos de venta que "se sientan sobre los materiales", comercializan a cuentagotas, a la espera de una definición de la tendencia del tipo de cambio.
"Se vive un momento especulativo. Con presupuestos que se cierran por horas y ventas dosificadas a la espera de que los precios peguen otro salto. Lo que ocurrió en estos días con Loma Negra fue contraproducente y generó más miedo. Por otra parte, la situación del dólar alienta, también, la informalidad en las operaciones. Con ventas que se declaran de una forma y se llevan a cabo de otra", dijo a iProfesional Pedro Brandi, titular de Construya.
"Para quienes deciden pagar directamente en dólares, hay tipos de cambio que varían según el corralón o el proveedor. Suele ser un intermedio. Ocurre que el proveedor no sabe si, tras la venta, luego podrá volver a traer el insumo del exterior con rapidez. Entonces no vende todo lo que tiene o, en todo caso, lo comercializa a un precio superior al del dólar oficial porque presume que habrá una devaluación antes de que vuelva a contar con el insumo", añadió.
La cercanía de las elecciones de noviembre talla, también, en el comportamiento de los corralones. En la misma línea que lo expuesto por el titular de Construya, el arquitecto Darío López, presidente de la SCA y socio en Arquitectonika, sostuvo ante iProfesional que "los comercializadores aplican aumentos preventivos porque entienden que el dólar oficial no se mantendrá tranquilo después de las votaciones que vienen".
Instancia de especulación
"La situación de los presupuestos que duran 24 horas es algo que ocurre según el proveedor de materiales para la construcción y el stock con el que este cuente. Muchos vendedores prefieren no ‘soltar’ los insumos hasta que pasen las elecciones. Hoy hay más especulación que faltantes de mercadería", aseguró.
López sostuvo que, aunque quienes importan abonan los insumos a dólar oficial, en el sector entienden que el tipo de cambio a 105 pesos no durará más allá de noviembre.
"Muchos corralones no tienen problemas en aceptar pagos directamente en dólares, por supuesto. Con la cotización intermedia los vendedores de materiales están haciendo una diferencia notable. Recordemos que ellos traen del exterior los insumos a dólar oficial. Pero como todos entienden que el tipo de cambio no va a bajar, sino todo lo contrario, entonces tratan de cubrirse cotizando la divisa más arriba que el oficial", comentó.
El presidente de la SCA expuso que el escenario de incertidumbre cambiaria, combinado con las restricciones a los importados, está generando compras anticipadas y "stockeos" por parte de desarrolladores, constructoras y particulares.
"Hay empresas que están comprando el hierro que utilizarán en seis meses. Y pagan para que los corralones se los guarden por ese lapso. Dan por hecho, también, que luego el material costará más por el salto del dólar. Quienes abonan directamente en dólares pagan un valor intermedio aunque los comercializadores reconocen operaciones sólo en divisa oficial", expuso.
Consultado respecto de este escenario que transita la actividad de la construcción, José Rozados, CEO de Reporte Inmobiliario, dijo a iProfesional que resulta "lógico que se tenga miedo de no poder reponer cierta mercadería atada a importaciones y/o a costos dolarizados".
"Ya ha ocurrido la situación de corralones y fabricantes que contaban con el producto y no lo vendían ni siquiera ofreciendo sobreprecios. Hay buena memoria histórica y hoy se toman decisiones en pos de esa información y los antecedentes ya padecidos", expresó.
En repuestos, dólar "blue"
Por el lado de las casas de repuestos y accesorios para vehículos, comercializadores de neumáticos y autopartes que fueron consultados por este medio reconocieron que los valores que predominan se corresponden con la cotización del dólar "blue".
"En el caso de las cubiertas importadas, quienes encargan el producto recién tienen certezas del precio final una vez que las gomas llegan al local", comentaron a iProfesional desde una casa de repuestos con comercios en el oeste bonaerense.
"Hoy la mayoría de los comercializadores está trabajando casi sin stock y la realidad que los precios varían por costos como el transporte de la mercadería. Al cliente sólo le podemos dar un valor de referencia, un aproximado. Pero lo que deberá abonar de forma definitiva se informa cuando viene a retirar el producto. Aunque se abona con pesos, la cotización es la del dólar paralelo. La semana pasada, por ejemplo, hicimos entregas tomando el tipo de cambio a 195 pesos", añadieron las fuentes consultadas.
Prácticamente el 80 por ciento de los artículos y repuestos que se venden en la Argentina son importados. Tal como ocurre en el ámbito de la construcción, en las casas de repuestos predomina la idea de que el dólar oficial pegará un salto fuerte en noviembre.
Y los comercializadores optan por buscar una diferencia en este momento en tanto entienden que, post elecciones, el cepo a los importados seguirá vigente y las demoras en la entrega de insumos implicarán un desembolso de dólares cada vez más amplio.