Cuenta regresiva: a 20 días de las elecciones, los puntos críticos que condicionarán al dólar
Faltan tan solo 3 semanas para las elecciones legislativas del próximo 14 de noviembre y el Gobierno tiene una gran preocupación: la volatilidad del dólar y la creciente presión sobre el mercado cambiario en general.
A su vez, ese dato sin dudas influye en otra de sus principales desvelos, la caída de la política inflacionaria a raíz del mal dato obtenido en septiembre.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, mantenía como principal ancla de precios al tipo de cambio oficial, que lograba mantener pisado gracias al cepo cambiario. El mercado reconoce que, durante los últimos meses, había logrado cierta calma en los distintos mercados del dólar, incluso en el blue. Pero la pax cambiaria no duró mucho.
La semana pasada fue fatídica para la política monetaria del Gobierno, ya que estuvo marcada por una fuerte suba del blue, de casi $10 en cinco días. Así, de valer $185,50 el lunes pasado, el tipo de cambio ilegal pasó el viernes a cotizar $195.
El dólar paralelo volvió a marcar el valor nominal de octubre de 2020 y este récord "psicológico" acrecentó la preocupación en el oficialismo, dado que esta plaza es termómetro de las expectativas de devaluación y se arbitra con otros tipos de cambio libres, como el CCL, que se negocia en el Segmento de Negociación Bilateral (conocido como dólar SENEBi), el CCL que se compra contra acciones, AL-30 y GD-30 y el MEP, mientras que el oficial sigue jugando su propio juego a un ritmo de apreciación mucho menor.
Todo hace pensar, tal como advierte el economista y director de MyR Asociados, que "las presiones sobre los tipos de cambios financieros y el paralelo persistirán en alza, producto de la elevada incertidumbre política y económica". Esta tendencia alcista se da inclusive en un contexto en el que el BCRA en octubre pasó a acumular divisas en sus intervenciones cambiarias.
Sucede que este factor se percibe como transitorio, ya que obedece a endurecimientos del cepo que serán imposibles de sostener más allá del 14 de noviembre. En este sentido, Rodríguez considera que "el nivel de actividad (vía restricciones para importar) y la inflación empeorarán con la actual dinámica de brecha y expectativas devaluatorias, mientras no aparezcan señales de una estrategia de estabilización mucho más robusta y consistente que la actual".
En este escenario, expertos marcan las cuatro variables críticas que influirán en el precio del dólar blue y que podrían generar más presión sobre el mercado cambiario:
Clave 1: dolarización por incertidumbre electoral
En cuanto al resultado electoral, Juan Pablo Di Iorio, Research Analyst de la consultora ACM, considera que "el mismo no influirá tanto sobre la cotización del dólar paralelo, sino que el alza está asociada más a la tradicional cobertura preelecciones y la mayor emisión monetaria".
Tal como lo señala el economista y consultor de negocios, Salvador Di Stéfano, "vienen las elecciones y el argentino siempre hace preventivamente un resguardo de valor en el dólar".
En ese sentido, el Guido Lorenzo, director de la consultora Labour, Capital and Growth, anticipa que "es esperable que la demanda de dólares siga aumentando y la gente quiera cada vez menos pesos".
El experto cree que "por ejemplo, un blue en $250 ya reflejaría bastante bien la diferencia entre pesos y los dólares que hay en las reservas del BCRA hoy". En la misma línea, Di Stéfano, también espera que siga el alza, pero habla de un techo cercano a los $220 en las elecciones.
"Un elemento que le juega en contra es que se ve la grieta dentro de la coalición de Gobierno y eso hace un gran ruido trae intranquilidad, lo que dispara la búsqueda de cobertura en el dólar. Eso hace pensar que van a ser semanas complicadas en materia del blue", dice Camilo Tiscornia, director de CyT Asesores Económicos.
Lo cierto es que, tal como señala este economista, si bien la tendencia es al alza en el mercado del blue, el manejo que el Gobierno haga de las variables que generan expectativas devaluatorias será clave en los próximos días, como lo que decida hacer con la tasa (aunque asegura que no cree que se vaya a modificar), la posibilidad de hacer actuar a ‘manos amigas’, cómo maneje la emisión, el éxito que logre el Tesoro en las licitaciones de deuda y las medidas que tome en los próximos 20 días.
Clave 2: flujo de importaciones
Otro de los puntos que Di Stéfano menciona como centrales es que "hay un faltante de mercadería muy importante, producto que hay una escasez de mercadería mundial que se suma a las trabas a la importación que se implementaron". Señala que eso hace que, ante el sobrante de pesos que tienen los productores, se vuelquen hacia el dólar como resguardo de valor.
Cabe recordar que, el pasado 5 de octubre, a través de la Comunicación "A" 7375, el BCRA modificó, con vigencia hasta fin de mes, el mecanismo por el cual se realizan el pago anticipado de algunas importaciones con vigencia hasta fin de mes con el objetivo de equilibrar los pagos con los bienes ingresados al país y eliminar los desfasajes que venía observando entre los volúmenes importados y los adelantos solicitados por los importadores, ya que se detectó que, desde junio, se registraban pagos por un valor superior al despacho de mercadería a plaza.
Las nuevas normas consistieron en una reducción a de u$s1 millón a u$s250.000 en el límite de giros anticipados que se pueden hacer al exterior sin nacionalizar la mercadería y también se resolvió aplicar ese tope a los pagos vista (modalidad que, hasta ahora, no estaba limitada). Además, se incluyó en el cupo mencionado a las importaciones de bienes de capital, que estaban exceptuadas hasta ahora. Y, finalmente, se resolvió que cualquier operación superior a los u$s10.000 deberá ser informada al Banco Central 48 horas antes de su realización para su aprobación (hasta ahora el límite era de u$s50.000).
Si bien desde el BCRA consideran que las medidas tomadas han sido exitosas porque desde que se aplicaron llevan comprados más de u$s500 millones, algunos economistas advierten, en línea con lo que describe Di Stéfano que la fuerte suba tras las restricciones a dólares financieros y adelantos de importaciones, a las que se sumaron las medidas de congelamiento de precios, muestra que puede haber un stockeo por parte de comerciantes, lo que hace que los pesos sobrantes vayan al blue.
Y, en ese sentido, otro de los temores que aparecen y que genera incertidumbre es que las trabas a importadores puedan prolongarse en el tiempo (más allá de fines de octubre, como se dijo) o que aparezcan nuevas limitaciones en el corto o mediano plazo.
"Va a ver que estar atentos a la posibilidad de que aparezca algún otro tipo de control para el acceso al dólar", dice Tiscornia. Y asegura que la existencia de esa amenaza también genera presión sobre el blue, que es un refugio de cobertura ‘clásico’ en Argentina ante la incertidumbre.
Clave 3: evolución de las reservas del BCRA
Tiscornia menciona que otro de los temas clave para el dólar de cara a las elecciones es cómo evolucionarán las posibilidades de compra de dólares para el Central. "Es decir, si el BCRA podrá seguir comprando reservas, como está haciendo en los últimos días gracias al refuerzo al cepo a las importaciones, que le permitió revertir las pérdidas que venía teniendo desde fines de septiembre", aclara.
Esto será clave en un contexto en el que el Gobierno enfrenta un fuerte déficit fiscal que lo obliga a emitir entre alrededor $250.000 millones al mes para asistir al Tesoro.
Por otro lado, en lo que respecta al tipo de cambio oficial, todo hace prever que el dólar oficial va a seguir en la trayectoria ya pactada por el Gobierno y el BCRA (con un ritmo de apreciación cercano al 1%, al menos hasta diciembre). Al respecto, Di Iorio, asegura que "la tendencia será a que se amplíe la brecha con un dólar oficial planchado hasta la elección y los paralelos al alza".
De todas maneras, anticipa que dicha alza será con volatilidad, dado que hoy, no solo el tipo de cambio oficial ha dejado de ser referencia para el mercado, sino también los dólares financieros que se negocian contra bonos nacionales intervenidos por el Central. Las nuevas normas de la CNV derivaron en una segmentación del mercado cambiario que hizo que el BCRA perdiera, como consecuencia de ese proceso, control sobre ciertos mercados (en pos de una menor necesidad de reservas para intervenir).
Sucede que la de la Comisión Nacional de Valores (CNV) resolvió, en paralelo a las limitaciones para adelanto de importaciones del BCRA, reducir el cupo de bonos para operar dólar MEP y dólar Contado Con Liquidación contra bonos nacionales y extender los plazos para el canje de los mismos con el fin de combatir la especulación a partir de las diferencias de precio entre los distintos tipos de cambio.
El fin: disminuir la necesidad de intervención del Banco Central para controlar su precio. Pero el efecto colateral fue el desplazamiento de la demanda de dólares hacia otros mercados (como SENEBI, blue y CCL contra GD-30 o acciones y CEDEARs).
Clave 4: las negociaciones con el FMI
Otro punto que Di Iorio considera central para la evolución del dólar es la incertidumbre que existe en torno al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Emilia Val, becaria del CONICET y experta en deuda soberana argentina, señala que "a pesar de que el panorama electoral complicó al Gobierno y puede que no tenga mayoría parlamentaria (recordemos que el acuerdo deberá ser refrendado en el Congreso), las diferentes fuerzas políticas coinciden en la necesidad de cerrarlo para estabilizar las expectativas, tanto de actores locales como internacionales, en un escenario macro y cambiario complicado, contribuyendo además a terminar con la regularización de las relaciones con los diferentes grupos de acreedores que inició con la reestructuración de títulos en manos de privados en 2020, lo que permitiría eventualmente volver a obtener financiamiento internacional".
En este sentido, parece factible llegar a un acuerdo antes de fines de marzo del año que viene, pero una nueva preocupación se coló en los últimos días apropósito de este tema y es que, según, informa Tiscornia, "el FMI está comenzando a analizar la inclusión del planteo del déficit cuasi fiscal en el análisis de los países para llegar a acuerdos" y advierte que el mismo podría ser un tema preocupante para la Argentina.
Así definen los analistas el escenario de cara a las elecciones. Esta semana será clave para conocer el derrotero que llevará a los comicios y el Gobierno concentrará todos sus esfuerzos en intentar domar la inflación, calmar al dólar para que no aliente la expectativa devaluatoria y enviar señales positivas a la población sobre el avance en el diálogo con el Fondo y el combate de la pandemia. Si lo logrará o no, ahí está la gran incógnita.