La inflación se acelera y un experto le pide al Gobierno una medida urgente: que deje de emitir pesos
Tras los datos de inflación de octubre, que alcanzó el 3,5%, y el pronóstico poco alentador que se presenta para noviembre, el plan del Gobierno de llevar la evolución del precio del dólar retrasado respecto de la suba de precios y que le había permitido iniciar un proceso de desaceleración desde abril y hasta agosto (cuando perforó el piso del 3% y se ubicó en el 2,5%) se ve deslucido. Y varias voces señalan la necesidad de un replanteo en ese sentido.
Una de ellas es la del economista especializado en inversiones, Christian Buteler, quien advirtió en estos días en su cuenta de Twitter, seguida por miles de usuarios, que "el precio que debe controlar el gobierno es el del peso y eso se logra controlando la cantidad que se emite".
Y no es el único que apunta en ese sentido. De hecho, recientemente, un comunicado del Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió sobre la fuerte emisión monetaria en el país. Sucede que, el mes pasado, Argentina registró un nuevo récord nominal para la Base Monetaria y los pasivos remunerados, que llegaron a los $7.269.096 millones, lo que representa un 2,6% de incremento en 1 mes y acumula un crecimiento del 36,8% en los primeros nueve meses del año.
Muchas estrategias, pocos resultados
Así lo reflejó Buteler en un tweet reciente. Y, en otro, el economista consideró que "no podemos seguir discutiendo el impacto de la emisión en la inflación", ya que asegura que economías que crecen más que nosotros emiten menos y que esa diferencia se debería anotar en la inflación.
En su análisis, advierte que, la Argentina lleva un sendero de alta inflación hace por lo menos una década y que se ha probado con:
- Atraso cambiario
- Pisar tarifas
- Precios máximos
- Precios cuidados (y sus variantes)
- Caída del salario real
- Aumento de retenciones
- Prohibición de exportaciones
- Apertura de importaciones
- Ley de góndolas
En diálogo con iProfesional, señala que "los resultados muestran que todas esas estrategias fracasaron y con la única fórmula que no probamos en serio fue con equilibrar el resultado fiscal a los efectos de no necesitar financiamiento que termina siendo emisión de pesos, ya sea de manera directa o producto de cambiar los dólares que entran como deuda que se toma al exterior".
Aunque muchas veces se han anunciado desde los sucesivos gobiernos nacionales intenciones en ese sentido, Buteler asegura que se dice, erróneamente, que en el Gobierno de Mauricio Macri se dejó de emitir, pero, señala que "es mentira".
Según explica, "los números del BCRA reflejan que nunca se dejó de emitir y, aunque hay media biblioteca que quizás desaconseja esa política, es algo que nunca hemos hecho, salvo en la época de la Convertibilidad, que no permitía incrementar la base monetaria a menos que estuviera la contrapartida de dólares necesaria para justificarla".
Incluso menciona que el Gobierno de Néstor Kirchner, cuando el nivel de crecimiento era muy alto tras una fuerte recesión, también se caracterizó por un nivel de emisión relativamente bajo comparado con el de los últimos años.
Bajar la emisión, una solución
Así, considera que ordenar las cuentas fiscales y bajar la emisión de pesos sería el camino correcto para que la inflación baje.
"Yo no digo que la inflación sea un fenómeno monocausal. Puede haber muchas causas para la suba de precios: uno de ellos puede ser un aumento de costos, por ejemplo, de los insumos en dólares, si hay devaluación, o de servicios públicos, como el gas o la electricidad, que se trasladan a precios", aclara el economista. Sin embargo, advierte que otra cosa es que haya una suba generalizada de precios sostenida en el tiempo, como sucede en Argentina.
Y cree que, para que todo suba, tiene que haber un exceso de pesos que convalide ese aumento generalizado. "Entonces, yo creo que, en las últimas décadas, en nuestro país, la inflación ha volado y hemos probado muchas políticas, pero, nunca, con un real cese de la emisión de dinero", repite.
No obstante, reconoce que un plan de ese tipo no se puede hacer de un día para el otro porque se requieren dólares suficientes que lo sostengan y, hoy, el país no los tiene. "Entonces, lo ideal sería ir desarmando de a poco los controles a medida que se da una reducción de la emisión: si se establece un cronograma para ir desarmando el cepo y se arma un plan económico acorde, que haga que todo fluya hacia el mismo lugar, se podría, incluso, generar más confianza y tendría que hacerse de manera paulatina", opina.