El crudo pronóstico de una consultora internacional: "más inflación y mayor tensión" con el dólar en el corto plazo
La indiscutible derrota que sufrió el oficialismo en las PASO, enciende diversos escenarios para el futuro de la Argentina, tanto políticos como económicos, según destaca un nuevo informe de la consultora y auditora PwC Argentina.
Por lo pronto, sostiene que se genera una mayor incertidumbre respecto a cuál será el camino que elegirá el Gobierno desde lo económico, en un marco en el que se aumenta el gasto público y en el que el Banco Central posee cada vez menos reservas netas en dólares para hacer frente a los compromisos.
Algo que, según esta consultora internacional, tiene como "resultado esperable más inflación y mayor profundización de la tensión en el mercado de cambios".
Y desde lo político también puede haber cambios sustanciales, debido a que se destaca que si se llega a mantener en las elecciones legislativas de noviembre la misma tendencia que hubo en los resultados de las PASO, la fuerza gobernante podría pasar a ser la segunda minoría en la Cámara de Diputados. Algo que le quitaría la potestad de mantener la presidencia de este cuerpo.
Otro dato que se agrega a este panorama es que, de repetirse los números de votos de septiembre, se mantendría el contexto en el que ningún bloque partidario posee quórum propio.
Asimismo, además se encuentra en riesgo para el Gobierno la posibilidad de mantener el quórum propio en la Cámara de Senadores.
Todo un escenario positivo porque promete un mayor equilibrio de fuerzas desde lo político, y que podría haberse tomado como favorable para el mercado.
"Sin embargo, la mejora en las variables financieras fue efímera. El ruido político dentro de la coalición gobernante despertó dudas sobre el rumbo económico y de gobierno en el cortísimo plazo", opina José María Segura, economista jefe de PwC Argentina.
Las medidas instantáneas que tomó el Gobierno se fundamentaron en cambios en el gabinete, con figuras que no implicaron una sostenida renovación.
Y, al mismo tiempo, se anunció el final de la mayoría de las restricciones que permanecían vigentes por la pandemia, "aún cuando la situación sanitaria no mostrara trayectorias diferentes" de lo que se venía evidenciando antes de las elecciones.
Economía bajo la lupa
Los resultados electorales desfavorables para el oficialismo también ocasionaron que se anuncien diversas medidas desde lo económico.
"En los últimos días se han sucedido una serie de anuncios de medidas cuyo fin último es inyectar capacidad de compra de corto plazo en buena parte de la población", dice Segura.
Entonces, agrega: "Respecto a las elecciones PASO de medio término anteriores, la economía actual se encuentra mucho más deteriorada y el partido gobernante ha dado a entender que si eso mejorara podría, sino revertir, al menos achicar el margen de pérdida en las elecciones generales del mes de noviembre".
Por lo que reflexiona que la disyuntiva que aparece no es si habrá más gasto, sino "cuánto más, siendo el principal límite la capacidad de financiación de dicho aumento".
Lo concreto es que el acceso al crédito en pesos se ha ido restringiendo, y "lo más probable es que se acuda al financiamiento vía emisión monetaria por parte del Banco Central", consideran desde PwC.
En conclusión, en un contexto donde la inflación ronda el 50% anual y las reservas monetarias netas de la entidad reguladora no crecen, incluso disminuyen, el "resultado esperable será más inflación y mayor profundización de la tensión en el mercado de cambios", sostiene Segura.
Y concluye: "El quamtum del gasto financiable es, en esencia, lo que ha generado la tensión política. Que no se hayan producido cambios en las principales figuras de la gestión económica, indicaría que, por ahora, se mantendría expansivo pero acotado".
Asimismo, según el proyecto de Ley de Presupuesto que presentó el Gobierno días atrás, la única conclusión más concreta que puede extraer este experto es que, en la medida que no se descontrole, el plan es que el "ajuste se siga haciendo por recaudación de más impuesto inflacionario".
De acuerdo a la opinión de Segura, un aumento del gasto descontrolado podría llevar, en el mejor de los casos y sin ninguna garantía de llegar a esa fecha, "a revertir el resultado electoral, pero a costa de comprometer seriamente el control de la economía a mediano y corto plazo".
En definitiva, la reflexión para PwC es que para que exista un mediano plazo por delante, no se puede perder ese control.
Es que si se cuenta con un mediano plazo, existe la posibilidad de establecer una ruta.
"Partiendo de niveles tan bajos de valores de activos y salarios, un pequeño cambio en las expectativas puede dar marcha al motor", alienta el economista jefe de PwC.-