Se disparó la cantidad de ahorristas que compraron dólares en junio: ¿cuántos se refugiaron en la divisa?
Un informe del Banco Central (BCRA) mostró que en el mes de junio hubo 443.000 personas que compraron "dólar ahorro". Esto significa que hubo un 45,7% más en comparación con los 304.000 que habían adquirido divisas para atesorar durante el mes de mayo. Según se desprende del informe, esta fue la primera suba mensual desde agosto de 2020.
De acuerdo con los datos del relevamiento titulado "Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario", las "personas humanas" compraron dólares por un monto agregado de u$s76 millones, en términos netos. En el mes de mayo ya se había verificado un incremento respecto de abril, aunque la suba que se vio en junio fue mucho mayor (6,5% versus 55,1%).
Dólar blue, tensión latente
El clima electoral ya llegó al mercado cambiario y el Gobierno deberá hacer frente a las crecientes presiones ante una mayor volatilidad. Con un dólar oficial planchado, la administración de Alberto Fernández seguirá de cerca los movimientos de los alternativos, principalmente los del blue, que encendió las alarmas en las últimas semanas.
Si bien el dólar en el segmento paralelo se tomó un respiro, las proyecciones de los economistas apuntan a una tendencia al alza en un contexto de elevada inflación e incertidumbre.
Mientras tanto, el mercado seguirá de cerca las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) luego de que en Casa Rosada mostraran voluntad de pago mediante la utilización de los Derechos Especiales de Giro (DEG) que llegarán en agosto.
"Cuando se mira el precio del dólar blue, hay una imagen de incertidumbre por los problemas de la economía y juega muy en contra", evaluó el economista jefe de IERAL Cuyo de Fundación Mediterránea, Gustavo Reyes.
Según aseguró, en la medida en que el nivel de incertidumbre continúe, se puede esperar que el dólar paralelo "al menos siga el ritmo de la inflación". "El blue ajusta por espasmos. Si la incertidumbre crece, avanza el dólar libre", indicó en diálogo con iProfesional.
"Si el Gobierno hiciera un plan, acordara con el Fondo y mostrara cómo se van a solucionar los problemas, el dólar libre debería perder contra la inflación porque si baja el nivel de incertidumbre y miedo, entonces, el blue también", analizó y advirtió que "la economía está llena de controles que dan una estabilidad precaria".
Pese a que la inflación mostró signos de desaceleración en las últimas mediciones, aún es un factor negativo para el blue. "No se puede tener una estabilidad cuando hay una tasa de inflación del 50 por ciento. Tarde o temprano lo va a desestabilizar. Los precios de la economía se mueven casi todo el tiempo. En el supermercado hay distintos precios cada diez días", subrayó.
El escenario internacional
En las presiones cambiarias no solo van a impactar los factores internos, sino que también se debe tener en cuenta lo sucedido fuera del país.
"El plano externo influye en el tema del dólar en un 20 ó 30 por ciento. Es importante y hay cambios muy relevantes para tener en cuenta. Hace un mes y medio, el dólar caía en casi todo el mundo. Luego, se empezó a complicar a partir de la suba de la tasa de inflación en los Estados Unidos por la que hay un debate sobre si es algo transitorio o permanente", manifestó Reyes.
Más allá de las cuestiones financieras y económicas, también se debe seguir de cerca lo ocurrido con la pandemia. "La variante delta trajo algunas alteraciones", resaltó el economista.
Así, en las últimas semanas se reconfiguró el escenario. "El dólar, que estaba cayendo en todo el mundo, empezó a aumentar. Al mismo tiempo la soja bajó. Hay un precio muy bueno, pero no es el que había hace un mes o un mes y medio. Además, la clasificación que le dieron a la Argentina de ´stand-alone´ no viene bien", puntualizó el economista.
La economía en modo electoral
Desde Quinquela Fondos, sociedad gerente de fondos comunes de inversión, destacaron que "en las últimas semanas ya se empezaron a sentir las presiones cambiarias, con mayor volumen operado en el mercado de bonos y con una suba del dólar informal".
"Este es un proceso que se esperaba y que encuentra al Banco Central y al Tesoro con herramientas para atenuarlo. De todas maneras, el mayor o menor uso que se haga de esos instrumentos determinará en buena medida las expectativas de ajustes para el período post electoral", remarcó.
De ese modo, sostuvo que durante el período previo a las elecciones las decisiones a tomar tendrán "impacto gradual y acotado", al buscar llegar sin "shocks significativos" a noviembre. "Es decir que el tipo de cambio oficial mantiene su dinámica actual y que Banco Central, el Tesoro y la Comisión Nacional de Valores van tomando decisiones puntuales para mantener acotada la brecha cambiaria. Esto implica que se pueden acumular desequilibrios", alertó.
"Si se logra superar estas presiones sin acrecentar los desequilibrios, los incentivos para hacer ajustes del tipo de cambio luego de las elecciones serán muy bajos porque está claro que el impacto en precios puede ser significativo. En cambio, si se siguen inyectando pesos y se usan las reservas para pagar deuda por demoras en el acuerdo con el FMI, las presiones sobre el tipo de cambio serán más difíciles de sostener", pronosticó.