El dólar, un mal negocio: cuánto perdieron los que apostaron por el billete paralelo el último año
A diferencia de lo sucedido el año pasado, en los primeros seis meses de 2021 el mercado cambiario no muestra mayores oscilaciones en las cotizaciones de los diferentes segmentos que lo conforman, es decir el dólar mayorista, el minorista y su extensión "solidaria", el dólar MEP, el contado con liquidación y el blue.
De hecho, prácticamente han cesado por completo las voces que alertaban sobre un posible retraso de la cotización oficial, pese a que el Banco Central viene convalidando subas de las cotizaciones por debajo de la inflación, al tiempo que logró recomponer parte de las reservas ante la venta de divisas provenientes mayormente del sector agroexportador.
No obstante, en el caso particular del blue, que según los analistas es el canal más frecuentado por el pequeño ahorrista para hacerse o vender billetes verdes, el impacto que produjo la abrupta suba registrada en la tercera semana de octubre sigue estando presente en la memoria y, por qué no, en el bolsillo de quienes optaron por esta opción cuando el precio rozó los 200 pesos, para luego derrumbarse y estabilizarse en niveles similares a los actuales.
En este contexto, es interesante observar cómo les fue a quienes compraron dólares en ese mercado para atesoramiento en un período más extenso, tomando como referencia los últimos días hábiles de cada mes.
Del gráfico se desprende que entre fines de marzo de 2020 y octubre pasado, la cotización más que se duplicó, llegando a tener incluso un pico el 23 de ese mes, cuando rozó los 200 pesos por dólar.
Pero a partir de ese momento, su precio se movió con una tendencia decreciente que se prolongó hasta la actualidad, con un mínimo de $141 en marzo, para luego retomar una tendencia levemente alcista, que lo lleva a los niveles de fines de enero.
Si bien a simple vista, podría decirse que todas las compras realizadas hasta agosto del año pasado tuvieron un precio menor al actual y por lo tanto, permiten obtener alguna diferencia de cambio, en un contexto de alta inflación, es interesante observar que pasó con el precio de compra de cada momento actualizado por el Índice de Precios al Consumidor.
De la simple lectura del gráfico surge que los resultados obtenidos están muy lejos de las expectativas de los compradores, con la sola excepción de marzo del año pasado, pues los precios ajustados por inflación van de un mínimo de $179 en abril de 2020 a un máximo de $217 en octubre, que se eleva a $254 si se considera el máximo de la serie.
Números que duelen
Este mismo gráfico permite hacer otro tipo de análisis: por ejemplo, ¿cuánto pierde cada inversor en términos de dólares desde que los compró hasta la actualidad?
En términos generales, si se considera el período que va desde abril 2020 a enero 2021, la pérdida promedio supera el 21 por ciento.
En este contexto, quienes llevan la peor parte son los que compraron dólares en octubre, pues están asumiendo una pérdida real del 29%, mientras que los que lo hicieron en noviembre y diciembre, enfrentan una caída en promedio el 24 por ciento. Pero si lo hicieron al precio máximo la merma es de nada menos que del 40 por ciento.
Como contrapartida, solo habrían resultado favorecidos quienes compraron en marzo de 2020. Por su parte, si se consideran los resultados de este año, la peor parte la llevan las compras de enero (-15.5%).
¿Qué pasó con el que depositó en un plazo fijo?
A partir de estos resultados, surge la pregunta acerca de qué hubiera sucedido si en vez de comprar dólares blue se hubiese destinado ese dinero a constituir un plazo fijo.
Para ello se puede plantear cómo le fue a quien invirtió en cada momento un equivalente a u$s1.000 y lo fue renovando a la tasa del mercado hasta la actualidad.
Considerando una tasa promedio mensual cercana al 3%, según surge de la información estadística del Banco Central, quien lleva la peor parte es quien compró en octubre, pues con esta mini bicicleta financiera, hoy podría comprar 300 dólares más que en esa oportunidad.
Pero no es el único que desaprovechó una oportunidad, pues salvo marzo de 2020 y hasta enero de este año se podría haber incrementado el poder de compra entre u$s100 y 300 dólares.
Ya en 2021, el saldo sería levemente favorable para los meses de marzo y abril.
En cuanto a lo que pueda suceder de ahora en más, fuentes del mercado afirman que esta suerte de "pax cambiaria" en la que la estabilización de la brecha es un punto central, podría extenderse algunas semanas más, aunque todo dependerá de como evolucionen hasta las PASO y las elecciones de medio término, una serie de factores económicos, políticos y sanitarios.
En tal sentido, el ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó recientemente que entre los objetivos del gobierno está la "reducción de la brecha cambiara y remarcó que hay "condiciones" para lograr una sólida estabilidad macroeconómica.