El dólar más barato del mercado, en la mira de todos: ¿cuánto más se podrá sostener?
El MEP viene con una tendencia a la baja. Cerró la semana pasada en $138,50, que fue su valor mínimo en lo que va del año, y, durante los dos primeros días de ésta, que es corta porque jueves y viernes se celebra la Semana Santa, recuperó casi $1,5 y volvió a los $140, con unos centavos de diferencia entre el precio de compra y el de venta.
Así y todo, se mantiene como la cotización más baja del mercado, apenas por debajo del blue, que también reconfirmando su tendencia amesetada, que lleva varias semanas.
"La brecha está anestesiada hace unos meses vía intervenciones del BCRA, que está administrando los pagos de importaciones y viene comprando dólares en el mercado de cambio oficial y está vendiendo bonos que compra en dólares y los vende contra pesos", señala al respecto, Martín Vauthier, director de EcoGo.
¿Por qué está el dólar "de moda" está bajo?
El dólar MEP o también llamado "dólar bolsa" es una opción válida y legal para quien quiera hacerse de billetes verdes sin límites, más allá del famoso cupo de u$s200 que se venden en el mercado oficial de cambios.
La sigla MEP significa "mercado electrónico de pagos", ya que en ese recinto virtual es donde se lo negocia. Quien quiera operar en este segmento del mercado deberá cumplir con algunos requisitos, como tener una caja de ahorro en pesos y otra en dólares en un banco, a nombre de la misma persona o titular y poseer una cuenta comitente en una sociedad de Bolsa o ALYC, que se puede abrir a través de la página de algunas de ellas.
El economista Federico Glustein, apunta que el dólar bolsa cae por dos motivos principales:
1. Por el desplome de los bonos
El bono AL30, utilizado para arbitrar dólar bursátil, se desplomó el 25 de marzo y continúa su tendencia a la baja desde octubre de 2020, donde tocó su techo.
"Este derrumbe de bonos argentinos se acerca al 30% desde el canje debido a problemas macroeconómicos locales, como el desmoronamiento del 9,9% del PBI de 2020 y el elevado déficit fiscal, así como las señales confusas a los mercados realizados por las autoridades nacionales, además del resultado de la pandemia y la elevada liquidez global", señala Glustein.
Y asegura que, a medida que la economía se recupere y se note el plan económico del Gobierno, la inestabilidad del valor de los bonos se irá reduciendo, así como si se llega a un entendimiento con el FMI, lo que ayudaría mucho.
Hay que recordar que el MEP identifica a la cotización del dólar que surge de una operación con bonos soberanos en la Bolsa porteña y funciona como un tipo de cambio alternativo que, a diferencia del blue, se puede operar de manera completamente legal.
2. Las expectativas sobre el dólar
El segundo motivo que cita tiene relación con las expectativas sobre el tipo de cambio y la oferta de dólares. "Como hay precios elevados de las commodities de granos y buenos datos de cosecha, la presión sobre una potencial devaluación disminuye y también se percibe que habrá disponibilidad de oferta de moneda extranjera. Sumado a esto, la reducción de salida de moneda extranjera por turismo en 2021 y el ingreso de liquidaciones de exportaciones le permitieron al BCRA comprar dólares, acumulando solo en marzo, u$s1.300 millones en reservas internacionales y u$s2.700 millones en tres meses", detalla.
En igual sentido, anticipa que se podría acelerar para fin de mes y hasta abril la acumulación de reservas dado que en estos dos meses se realizan las habituales liquidaciones de los gruesos de cosecha.
En tanto, el director de Épyca Consultores, Martín Kalos, coincide en señalar la influencia de la caída de los bonos nacionales, debido a que "la incertidumbre reinante respecto de la política fiscal y el sendero de crecimiento y recuperación económica que va a tomar el país".
Advierte que está claro que la Argentina no tiene espacio para sostener déficits abultados durante mucho tiempo y que en este momento está haciendo uso del espacio que tiene para que la reducción de ese índice negativo sea gradual.
Vauthier coincide en que el comportamiento de los papeles nacionales es central para la dinámica de los dólares financieros. "La caída de los bonos tiene que ver con la situación actual que vive la Argentina de incertidumbre económica por la falta de rumbo. Eso genera que los bonos tengan paridades muy bajas y, mientras no aparezca un cambio del Gobierno, que dé más certidumbre fiscal, monetaria y financiera, incluso después de la reestructuración de deuda exitosa, el riesgo país se mantendrá muy elevado, los bonos, muy bajos y continuarán la restricciones en las importaciones, medida que repercute en la actividad y los precios", asegura.
Una apuesta a la baja, pero no tanto
Glustein sostiene que "la caída del MEP es buena para el Gobierno -por eso interviene- y le permite anclar las expectativas devaluatorias".
Sin embargo, advierte que no lo podrá sostener en el mediano plazo porque la percepción de que está barato puede aumentar la demanda, lo que generaría una sangría de reservas, pero a un dólar erróneamente cotizado a la baja.
Así, prevé que su valor se irá corrigiendo en el tiempo para que no haya una brecha grande con el solidario, que hoy es del 14% a favor de este último.
En este sentido, surge la famosa pregunta de si es un buen momento para ir hacia el MEP y la respuesta, según Kalos no es unívoca. "Depende del plazo en el que se espere tener una ganancia. Yo creo que éste no es un buen momento para entrar al dólar si la persona espera tener una ganancia en el corto plazo, pero si se está dispuesto a esperar un plazo más largo y a aceptar una eventual fluctuación, que seguramente la habrá", advierte.
Según el experto, si se trata de una apuesta a mediano plazo, entonces sí es una buena elección porque considera que, en algún momento, los dólares financieros van a empezar a subir en línea con la percepción de riesgo que haya cuando empiecen a consolidarse candidaturas, alianzas, disputas internas, encuestas y resultados electorales. Esto se debe a que muchas personas empezarán a tomar cobertura frente a la incertidumbre que se perciba en ese contexto.