Sorpresa por el dólar "contado con liqui": ¿qué hubo detrás de su repentina y momentánea caída?
El viernes de la semana pasada, un hecho sorprendió al mercado: la cotización del dólar contado con liquidación (CCL) se dio vuelta con fuerza en los últimos minutos de operaciones y cayó 3,4% de $153 a casi $147. Se trató de su menor valor en tres semanas y esto cortó una racha de varias subas consecutivas.
El también denominado dólar cable se convirtió, por unos días, en el más barato del mercado. Pero duró poco, porque la situación que se revirtió este lunes, cuando subió algo más de 3 puntos y, "así, se ubicó arriba del MEP y se ajustó al precio al que tendría que haber cerrado el viernes", explica una fuente del mercado de capitales.
Este martes, el CCL ya se ubica en un precio "normal" de $152,60, mientras que el MEP ronda los $149,55.
Los especialistas coinciden en que fue extraño el movimiento del CCL, dado que, en una situación atípica, se despegó de la performance del dolar bolsa.
Cabe recordar en este punto que el CCL suele cotizar algo por encima del MEP porque, en ese caso, las divisas resultantes de la operación con este dólar se depositan fuera del sistema argentino, en un banco extranjero a elección del inversor.
Tranquilidad interrumpida
Lo cierto es que, desde hace unos tres meses, el mercado cambiario está bastante tranquilo, a pesar de la brecha existente entre el dólar oficial y los financieros y el ilegal. "Si se ve la foto general, venía subiendo la cotización del CCL, pero el gobierno logró conseguir una cierta estabilidad cambiaria. Se mantiene entre $145 y $155 bajo políticas monetarias restrictivas", señala Fernando Dirazar, director de Del Sur Capital Markets.
Si bien opina que esta pax cambiaria será transitoria, afirma que uno de los elementos clave para que esto suceda fue, sin dudas, el hecho de que se hayan relajado las restricciones a la compra de dólares en la bolsa (MEP), es decir, la reducción del "parking" a 24 horas.
¿Una jugada del Gobierno?
Para muchos en el mercado, lo sucedido el 5 de febrero pasado fue "una operación para bajar el precio en los últimos minutos de la rueda" y hay quienes sospechan que fue una jugada del oficialismo. ¿Para qué? Con el fin de reducir la brecha cambiaria y avanzar hacia una convergencia entre las principales referencias.
Y es que, para el Gobierno es preocupante cuando sube la cotización de este dólar financiero porque, habitualmente, su valor pone un piso para la cotización del blue.
"Recordemos que se espera que en febrero, después de 2 meses tranquilos que suelen ser demandantes de pesos por el pago de aguinaldos, impuestos y vacaciones, empiece de vuelta algo de presión sobre el dólar", detalla un asesor bursátil.
Se trata de una tendencia habitual en esta época, por lo cual, deduce que, quizás, estén al tanto de esto en el Gobierno y hayan tratado de calmar la brecha cambiaria antes de que se empiece a calentar.
Asimismo, una baja muy fuerte de éste dólar que tenga su origen en volumen de venta de bonos baratos, estaría subsidiando la salida de capitales del país, dado que las divisas resultantes de la operación se depositan fuera del sistema argentino, en un banco extranjero a elección del inversor. Sin embargo, los que saben señalan que "mientras se trate de un hecho puntual, no es tan nociva la baja".
La pregunta, entonces, podría ser: ¿por qué si lo quisieron bajar desde el Gobierno, el lunes ya lo dejaron subir?
"Cuando lo presionan hacia abajo por la fuerza, tiende a subir porque la gente ve barato al dólar y, además, muchos productores del campo están en proceso de liquidación de cosecha y compran dólar MEP o CCL", explican fuentes especializadas. Eso, para algunos, es lo que hizo que el CCL recupere terreno.
¿Un error de privados?
Para otros, en cambio, lo que pasó fue que alguien en algún ALYC se confundió de título y por eso se desplomó el CCL. No descartan que se trate de una intervención sobre el AL30C que no se vendió contra pesos.
Recordemos que, para acceder al CCL, se suele comprar bonos AL 30-C (la C es de dólar cable), se venden y lo resultante de la operación se deposita fuera del sistema argentino. En enero de este año, la Comisión Nacional de Valores (CNV) limitó transitoriamente a 100.000 la cantidad de bonos soberanos nominados en dólares que los clientes de las casas de bolsa pueden vender (de los cuales los más populares son los AL30-C) para adquirir dólar CCL.
Por otro lado, puede tratarse de una estrategia para bajar la cotización del dólar cable para presionar a la baja las cotizaciones oficiales y el paralelo y desestabilizar la política cambiaria actual.
Pero, más allá de las teorías y explicaciones, la realidad hoy indica que el CCL está de nuevo en su curso. Durante las próximas semanas, el mercado estará atento a que se pueda dar una situación similar a la vivida. Quizás no suceda, pero hay consenso en que, más allá de lo que pueda considerarse como una operación aislada del Gobierno o de un privado, la deuda pendiente para el oficialismo, hoy es alcanzar una brecha más baja cambiaria (hoy, ronda el 70%) para evitar las distorsiones que las diferencias en el tipo de cambio generan en la economía nacional.