• 20/12/2024

Con precios de remate: ¿es el momento de apostar por los bonos argentinos? Esto opinan en la City

Especialistas del mercado ven un precio de oportunidad en los títulos argentinos. De qué depende que sean una inversión acertada
15/12/2020 - 07:05hs
Con precios de remate: ¿es el momento de apostar por los bonos argentinos? Esto opinan en la City

La jornada financiera comenzó la semana a la inversa de lo que venía siendo hasta el momento: ahora las acciones argentinas caen pero los bonos mejoran.

Así se dio que los American Depositary Receipts (ADRs), o sea las compañías locales que cotizan en Wall Street, se desplomaron hasta 12% pero los bonos subieron 2% afuera con un riesgo país también recortando posiciones. ¿Llegó el momento de los bonos ahora?

Los bonos, bajo la lupa del mercado

Entre los especialistas, hay algunas apuestas que ya se le empiezan a hacer a los bonos. Federico Furiase, director de Eco Go, dice que si el Gobierno da señales de consistencia fiscal/monetaria en estos meses, la política no mete palos en la rueda y el mercado compra el acuerdo con el Fondo, internalizando que no sería difícil alcanzar un déficit de 3% en 2021, los precios de los bonos tendrían margen de recuperación -y no poco- partiendo de paridades en 34/35/ tasas en 17%. Esto, en un mundo donde la deuda "basura" de EE.UU. rinde 4,3% y España rinde negativo a 10 años. 

"Por eso, en estos niveles de tasas en pesos, precios de bonos en dólares en zona de recovery y brecha cambiaria anestesiada por la venta de bonos en dólares contra pesos del BCRA, me gustan los bonos en dólares entrando con pesos", dice.

Los bonos argentinos, con amplio margen de recuperación.
Los bonos argentinos, con amplio margen de recuperación.

Si sale bien, es decir si el Gobierno logra vender una historia financiera al mercado, existe el margen para que los bonos pasen de 35 a 50 dólares en un par de meses, o sea de rendir 17% a rendir 12%, mientras Brasil rinde menos de 3% y España negativo, indicó el economista. 

Los precios de bonos de hoy descuentan una probabilidad implícita acumulada de default arriba del 60% al 2023 asumiendo tasa de recovery del 30% cuando el perfil de vencimientos en dólares con el sector privado es muy holgado hasta esa fecha.

El efecto Bienes Personales

Calcula Eco Go que si las tasas bajan 300 puntos básicos, el GD35 (bono global al 2035) subiría cerca del 30%; en tanto si las tasas suben 300 puntos básicos, el GD35 caería 21%. 

"Dentro del universo soberano, mantenemos nuestra preferencia por bonos en moneda dólar para inversores que busquen posiciones en activos argentinos. Entre los bonos en pesos seguimos prefiriendo bonos CER cortos, para capturar la expectativa de aceleración de la inflación sin estar expuestos a riesgo de suba de tasa", afirman desde Balanz Capital.

Algo que podría jugar en forma marginal a una mejor performance de los bonos en diciembre es que hay gente que por el impuesto de Bienes Personales quiere terminar el año en títulos públicos y eso podría tener cierto efecto puntual.

La capacidad del Gobierno de generar confianza, clave para rendimientos futuros.
La capacidad del Gobierno de generar confianza, clave para rendimientos futuros.

"Esto es porque justamente, los bonos argentinos están exentos de dicho impuesto, por lo cual siempre se ve a fin de año una mayor demanda de estos activos. Aunque es también una realidad que, por otro lado, tras el nuevo Impuesto a la Riqueza y la reestructuración de la deuda realizada en septiembre podría haber un menor apetito por parte de los inversores. En concreto, es un mix de diferentes temas que hay que considerar", afirmó Matías Roig, director de Portfolio Personal Inversiones (PPI). 

El "talón de Aquiles" de los bonos soberanos argentinos es el bajo carry (devengamiento de cupón) que paga estos años y la posición técnica del mercado frente al Gobierno que, claramente, no genera confianza entre los inversores (ni de acá ni de allá).

A pesar de que el perfil de vencimientos de bonos en dólares con el sector privado es muy holgado hasta 2023, la probabilidad implícita acumulada de default para un bono GD35 que vale en torno a 34,9 (yield en torno al 15%) asciende al 62% al 2023. "Esto significa que están muy castigados los bonos argentinos en relación al holgado perfil de vencimientos que tenemos hasta 2023", acota Furiase.