El blue se disparó a $133, mientras el contado con liqui y el dólar MEP avanzaron a paso firme
Las cotizaciones paralelas del dólar que operan en el mercado bursátil aceleraron este miércoles su tendencia alcista, por lo que el contado con liqui y el MEP estiraron la brecha con el oficial al 84%.
Mientras tanto, el dólar blue tiene una suba de $6 y llega a su récord de $133 en las denominadas "cuevas" de la ciudad de Buenos Aires.
Las distintas cotizaciones del dólar mantienen una tendencia alcista. El blue amplía la brecha cambiaria a nuevos máximos de 92%, respecto del oficial mayorista.
Esta histórica brecha cambiaria duplica el promedio de 40% que alcanzó durante el anterior control de cambios del 31 de octubre de 2011 al 16 de diciembre de 2015.
De esta forma, los tipos de cambio implícitos que surgen en la Bolsa anotaron nuevos máximos. El contado con liqui se ofreció a $125,76, y el MEP avanzó hasta los $122,77.
Por su parte, el dólar blue superó sin tomar respiro la barrera de los $130 y se ubicó en $133. Así, en las tres primeras ruedas de la semana el billete que opera en el mercado paralelo, donde el cepo no alcanza, ya sumó $11.
A su vez, el dólar mayorista sumó 8 centavos y cotizó a $67,54, precio al que el Banco Central (BCRA) elevó su ficha de u$s 50 millones en el MULC.
En tanto, el dólar minorista cerró en torno a los $69,83, por lo que el valor del dólar turista, que se calcula con el recargo del 30% del impuesto PAIS, en promedio es de $90,78.
Según la habitual encuesta que realiza el Banco Central entre las principales entidades financieras que operan en la City, las cotizaciones de venta fueron las siguientes:
- Galicia: $70
- Nación: $69,75
- ICBC: $69,70
- BBVA: $70,55
- Supervielle: $69,70
- Santander: $69,50
- Balanz: $69
El dólar blue no tiene una cotización oficial, sino que su valor sale del promedio de cotización en lugares de cambio. El cepo cambiario, medida instrumentada para controlar la cotización de la moneda y cuidar las reservas del Banco Central, reactivó la operaciones en el mercado paralelos, donde los usuarios buscan eludir el tope de 200 dólares mensuales para el ahorro.
A su vez, el riesgo país para la Argentina se ubicó en los 3.051 puntos básicos.
Pelea entre Economía y el BCRA, detrás de la suba del contado con liqui
La suba de los dólares "alternativos" -con el consecuente ensanchamiento de la brecha- genera preocupación en el Gobierno, algo que explicitó el propio Alberto Fernández. "Me preocupa la suba del dólar, pero hay mucha especulación. No hay argumento lógico para que eso pase", dijo el Presidente.
Alberto F. se refería al encumbramiento del dólar blue, que en la tarde del martes alcanzó los $127, un valor impensado hasta hace algunas semanas.
Ese precio es seguido de cerca por las cotizaciones de los "alternativos" y legales "contado con liqui" y "MEP", que sobrevuelan los 120 pesos.
¿Qué ocurre? ¿Por qué si el Banco Central tomó medidas para restringir al máximo los mercados de "contado con liqui" y "Bolsa", las cotizaciones continúan su tendencia alcista?
Un cortocircuito entre el Ministerio de Economía y el Banco Central es la base de esa llamativa circunstancia, que provoca sorpresa incluso en la City porteña.
En concreto: Martín Guzmán y Miguel Pesce no terminan de acordar una estrategia común para sosegar la histeria de los inversores.
Son miradas distintas: el ministro de Economía está convencido de que hay que construir lo más pronto posible lo que en el mercado denominan una curva de la deuda en pesos, que le abriría la posibilidad -más adelante- de armar un mercado sólido en moneda local, con emisiones de títulos en pesos ya sea por parte del Estado o que los protagonistas sean las empresas.
Sin embargo, ese objetivo, a todas luces interesante e incluso audaz para un país que convive con una inflación del 50% anual, choca contra el interés del banquero central de mantener lo más calmo posible el mercado de los "dólares alternativos".
La evidencia, hasta el momento, indica que cada vez que la mesa de operaciones del BCRA interviene con la compra de bonos en el mercado termina dándole "salida" a inversores que ya no quieren esos papeles y van en busca de dólares para remitirlos a una cuenta del exterior.
Muchas veces, esas intervenciones de la autoridad monetaria desembocan en un efecto "no deseado": el salto del "contado con liqui". Tal como sucedió en el comienzo de la semana.
"En un contexto como el actual, con las expectativas totalmente pinchadas y la incertidumbre, los inversores sólo piensan en desprenderse de los bonos, agarrar los pesos e irse al dólar", cuenta un "trader" habituado a esta operatoria.
Lo que está ocurriendo es que los inversores que le venden sus papeles al Banco Central, y que reciben los pesos a cambio, rápidamente escapan de esa moneda y dolarizan su inversión. Ese circuito, en un contexto donde la gran mayoría de los financistas prefiere dolarizarse y desprenderse de los pesos, recalienta el mercado cambiario, lo que se traduce en una suba de las cotizaciones "alternativas" del dólar.
Por ahora está previsto que la prioridad del BCRA mantenga su estrategia de compra de bonos en moneda local. ¿Habrá en algún momento un cambio de planes? Tal vez, como en otras oportunidades, sea la elevada cotización del billete verde quien termine disciplinando a los funcionarios.