Se viene la nueva política monetaria del Banco Central: Pesce planea convocar al Copom en breve
El ajuste monetario de Guido Sandleris tiene las horas contadas. A poco de asumir como presidente del Banco Central, Miguel Pesce ya diseña la estrategia para modificar la política monetaria que su antecesor había diseñado en conjunto con el Fondo Monetario Internacional y cuyo pilar se basaba en el crecimiento cero de la base monetaria.
En las próximas horas el nuevo banquero central convocará a una reunión del Comité de Política Monetaria (Compom), en la cual se va a definir la nueva estrategia monetaria de la entidad. El paso previo -que se espera se concrete entre miércoles y jueves- es la designación del nuevo vicepresidente o al menos de un director, para que pueda sesionar el directorio, que necesita de un mínimo de cinco miembros.
Su amistad con Alberto Fernández pudo más que su bajo perfil y antes de ir al BCRA el mendocino estuvo en el acto de asunción del presidente ante la Asamblea Legislativa.
El plan de Pesce es ir a un esquema de metas de agregados monetarios más amplio, como M2 o M3, y definir una banda, similar a la que se aplicó durante el Gobierno de Néstor Kirchner y el primer mandato de Cristina Fernández. De todos modos, en estas horas están terminando de definir la política monetaria y no descartan recurrir a otras opciones.
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El agregado monetario M2 abarca el circulante en poder del público y los depósitos totales en caja de ahorro y en cuenta corriente en pesos, y si bien forman parte de la Base Monetaria excluye a las cuentas corrientes de los bancos en el BCRA. Bajo ese esquema, y en base a la expectativa de la demanda de dinero, el Copom define un límite inferior y un límite superior y el organismo monetario trata de encausar el M2 en esa banda, a través de movimientos en la tasa de referencia.
Después de la renuncia de Sandleris y los dos vicepresidente (Gustavo Cañonero y Verónica Rappoport), que se sumaron a las de los directores Marcelo Castro y Horacio Liendo, sólo quedaron tres integrantes de la vieja gestión: Francisco Gismondi, Enrique Szewach y Fabián Zampone. También sigue como gerente general Nicolás Gadano, aunque no integra el directorio.
Barajar y dar de nuevo
De todos modos, según pudo saber iProfesional, Alberto Fernández planea remover por decreto tanto a los tres directores como al gerente general, aunque pueda mantenerlos por unos días para que haya quórum en el directorio. El primero que se menciona en el entorno albertista para acompañar a Pesce es Arnaldo Bocco, quien primero sonaba para ser director y timonear la Superintendencia de Entidades Financieras y ahora es candidato a ser vicepresidente.
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Se espera para este miércoles un aluvión de decretos en el Boletín Oficial, entre los cuales estará la designación de Pesce como presidente y no se descarta que ahí mismo aparezca alguno de los directores que lo acompañarán. En el entorno de Alberto mantienen un gran hermetismo respecto a esos nombres, donde la idea es que todos los miembros del BCRA sean de su propia tropa, imitando la estrategia de Néstor Kirchner.
Si bien aún no está oficializada su designación, este martes la web del BCRA ya ponía a Pesce como presidente de la entidad.
Una vez conformado el directorio, las primeras medidas que Pesce tiene en carpeta implican una baja en los encajes y el regreso de la línea de préstamos a la inversión productiva, aunque esta vez los fondos serán destinados a capital de trabajo. Ese recorte en los encajes implica un menor costo de fondeo para los bancos, y es la carta con la que Pesce busca fomentar la baja de tasas.
Respecto al cepo, nada hace pensar que hay un cambio en los controles, que en las últimas horas fueron confirmados no sólo por el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, sino también por el propio presidente. Pesce comparte esta visión sobre el cepo y sabe que mantenerlo es clave para poder bajar la tasa sin que genere presión sobre el tipo de cambio oficial.