Sin poder operar "contado con liqui", Bradesco se da de baja como Agente en la CNV

A poco más de un año de haberse inscripto en el país como Agente de Liquidación y Compensación (ALyC), el gigante brasileño Bradesco dio marcha atrás con sus planes de negocio y pidió a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que dé de baja esa matrícula. La fuerte caída en los negocios y el cepo cambiario modificaron el escenario de los grandes jugadores y anticipan un mercado más reducido.

El dato llamativo es que desde el 21 de septiembre de 2018, cuando se dio de alta como ALyC, el banco brasileño no realizó ninguna apertura de cuentas comitentes, no gestionó ninguna operación ni ha publicitado en forma alguna esa línea de negocios, según se desprende del Acta de la reunión de directorio que presidió Rogles Carreiro De Melo, una de las directoras de la entidad.

Además, según detalló en el acta de la reunión del 27 de noviembre, los directivos esgrimieron que en base al plan de negocios estipulado con vistas al futuro del banco, "tampoco hay viabilidad en comenzar a hacer uso de dicha matrícula ni de comercializar de alguna forma con la misma".

Fue una reunión breve, de no más de 30 minutos y en la cual se aprobó por unanimidad solicitar a la CNV la baja como ALYC. Consultados al respecto, desde la filial local de Bradesco prefirieron no hacer comentarios.

Un mercado cada vez más chico

"Cada vez hay menos negocios. Además, los bancos no tienen permitido hacer contado con liqui, que es una de las operatorias que va a seguir creciendo mientras dure el cepo", comentó un operador del mercado. Además, los bancos suelen canalizar sus operaciones de mercado a través del MAE (Mercado Abierto Electrónico), aunque a septiembre Bradesco sólo registraba operaciones en el mercado de cambios (Forex), donde apenas negoció 3,65 millones de dólares en ese mes.

Los números de Bradesco muestran que al 30 de septiembre registraba un resultado neto de 378,8 millones de pesos, un alza de 147% respecto a los 153,4 millones que obtuvo en el mismo período de 2018. "En lo que va del ejercicio se trabajó en forma conjunta con las áreas operativas, comercial y de tecnología para fortalecer la gestión interna y propiciar una mejor experiencia para todos los clientes logrando una mejora directa en los servicios ofrecidos", explicaron los directivos de Bradesco al exponer su balance en directorio.

Otro de los bancos extranjeros que este año dio de baja su "chapa" de ALyC fue JP Morgan, aunque se debió más que nada a una cuestión operativa y formal. En rigor, la filial local del banco estadounidense tenía dos inscripciones en la CNV como agente y dieron de baja la que usaban menos.

"Eso pasaba mucho con los bancos antes, que tenían inscriptos su Sociedad de Bolsa y el propio banco. Ahora suelen concentrar todo en un mismo agente", explican en el mercado.

El JP Morgan debatió el pedido de baja de la CNV en su reunión de directorio del 16 de julio, en donde justificaron la decisión en "la escasa operatoria de la sociedad durante los útlimos años".

Desde 2015 se redujo sensiblemente el número de ALyC, algo que fue fomentado desde la propia CNV, habilitando al mismo tiempo la posibilidad de operar como Agente Productor o Agente Individual.

A septiembre de este año el número de ALyC habilitadas era de 291, un 16% menos de las 348 que había cuatro años atrás. Del otro lado, hoy hay 528 Agentes Productores, más de tres veces la cantidad que había en 2015, cuando apenas sumaban 167.

Los próximos meses serán clave para el mercado, atentos a la renegociación de la deuda y a las primeras señales que de el nuevo equipo económico a partir del 10 de diciembre. El cepo cambiario, sin embargo, parece seguir firme por lo menos en el próximo año, y esto es un dato impacta de lleno en las decisiones estratégicas de los grandes jugadores que operan en la Bolsa local.