Al Banco Central se le hace cada vez más difícil contener al dólar y en el mercado ya descuentan un endurecimiento del cepo
Aun con el cepo cambiario, al Banco Central se le está haciendo cada vez más difícil contener al dólar. Con ventas más agresivas, intervenciones estratégicas y la ayuda de los bancos públicos, el organismo monetario busca ponerle un techo en $58 a la cotización mayorista y evitar un nuevo salto en la divisa en la previa de las elecciones presidenciales.
Además, a estas ventas en el mercado de cambios se suman a los pagos de deuda y a una sangría de depósitos en dólares que no se detiene, lo que acelera la caída de las reservas y redobla la presión sobre el BCRA. Ocurre que, mientras contiene el precio oficial a costa de fuertes intervenciones, la brecha respecto al resto de las cotizaciones es cada vez mayor, reflejando el verdadero valor que el mercado le pone a la divisa.
En la City coinciden en que en las próximas semanas el equipo de Guido Sandleris se verá obligado a endurecer aún más el cepo cambiario, reduciendo el monto máximo permitido a los ahorristas.
"Últimamente, está jugando fuerte el BCRA. Por lo general, todos ponen posturas de 1 o 2 millones de dólares y el que pone fichas grandes es el Central. Vi partidas grandes, de u$s10 millones, u$s20 millones, con lo cual veo que están jugando fuerte", explica Leonardo Svirsky, a cargo de la mesa de operaciones de Bull Market Brokers. "Están marcando la cancha, en $58 está vendiendo bastante. Puede ser que ese sea el techo", agrega.
Según los últimos datos del organismo monetario, el 30 de septiembre y el 1 de octubre la entidad tuvo que realizar las intervenciones diarias más importantes desde que instauró el cepo, con ventas por u$s204 millones cada día.
Pero no sólo los números muestran que la tarea de contener al dólar se torna cada vez más difícil para el Central. Según explican en la mesa de dinero de un banco local, al organismo monetario se lo ve mucho más activo en el mercado, con posturas desde el momento de la apertura, buscando contener cualquier amenaza de disparada.
Un mercado sin oferta privada
Además, el Nación y el Provincia, los bancos más grandes del sistema, también participan cada vez más del mercado, siempre del lado de la oferta, para ayudar al BCRA y ser prácticamente los únicos que ponen posturas de ventas.
"Hoy en día, el Gobierno sigue siendo el principal oferente. Ya sea por el Central o por el Tesoro", sostiene el analista financiero Christian Buteler. "Puede ser discutible la efectividad que tiene el cepo como medida en cuanto a evitar la salida de dólares. Pero con lo que sí es 100% efectivo es con el ingreso voluntario de divisas. Una vez que se puso el cepo nadie más trae un billete", acota.
El analista considera que la mayor presión de las últimas ruedas se dio más que nada por una oferta cada vez más retraída y no tanto por un aumento en la demanda, "si bien el goteo del minorista se mantiene firme", comenta Buteler.
Otro factor que le aporta algo de combustible a la compra es la baja de tasas cada vez más abrupta que está impulsando el BCRA desde las subastas diarias de Leliqs. En la última licitación, el rendimiento ya perforó el 70% anual, un recorte que de a poco se trasladó a las tasas que pagan los bancos por los plazos fijos.
"Lo que no sabemos es cómo va a reaccionar el inversor ante menores tipos de interés en pesos con una inflación que seguirá por encima del 50% anual", se pregunta el economista Salvador Di Stéfano en su último informe semanal. El último dato disponible, agerga, indica que el stock de Leliq suma $ 1.142.158 millones, lo que implica una suma de u$s19.748 millones. "Si este monto de pesos se libera en el mercado y va contra el dólar, arrasaría con todo lo que encuentre en la plaza", advierte.
Para Martín Kalos, economista jefe de Elypsis, la demanda de dólares persistente que hay en el mercado es producto de la cobertura de riesgo frente a la crisis actual y a la incertidumbre de mediano y largo plazo.
"Todavía no conocemos cuál es la política económica que puede hacer un nuevo presidente y, mientras tanto, el mandatario actual no está en condiciones de llevar adelante una política que permita superar esta crisis", destaca Kalos.
En ese sentido, el economista considera que hoy en día "estamos entrampados en la espera de una decisión institucional respecto de qué políticas se van a aplicar en los próximos meses".
Todo o nada para frenar al dólar
El equipo de economistas de Delphos Investment sostiene en su informe diario que las intervenciones del BCRA para frenar el avance de la divisa, se han transformado en la principal medida antiinflacionaria de cara a fin de año.
"La alta volatilidad cambiaria, sumada a la incertidumbre política y económica respecto de la próxima gestión, impiden el buen funcionamiento de la economía y afectan a las decisiones de largo plazo", argumentan, y ponen como ejemplo el Índice Construya, un parámetro del sector de la construcción, que en septiembre sufrió una caída mensual de 6,7% y acumula una baja de 12,8% en los primeros nueve meses del año.
Según explica Federico Furiase, director de Estudio Eco Go, hay que seguir atento a cómo siguen las reservas del BCRA, que vienen cediendo por tres grifos: vencimientos de deuda, dolarización de cartera que implica venta de billetes verdes en el mercado y salida de depósitos en la misma moneda que pegan por el lado de los encajes.
"Eso, en un contexto de riesgo país de 2.000 puntos básicos, y combinado con un riesgo donde probablemente el BCRA se vea obligado a monetizar para hacer frente a la brecha fiscal de pesos que está concentrada en diciembre de aproximadamente $240.000 millones, genera un riesgo alto de que la brecha aumente y que se endurezcan los controles de capitales", advierte Furiase.
Otros que ponen la luz de alarma sobre la brecha cambiaria y un cepo más restrictivo son los economistas de Delphos Investment. "A menos de tres semanas para las elecciones, se amplía nuevamente la brecha entre el tipo de cambio spot y el contado con liquidación, que superó el 16%, lo que implica una diferencia en torno a los $10", destacan.
Un cepo más duro, lo que ven todos
"Esperamos novedades cambiarias para luego de las elecciones del 27 de octubre ya que consideramos que estamos en un modelo cambiario de transición que no es sostenible en el tiempo, salvo que la negociación con los acreedores externos sea sumamente dura", agregan en su informe diario y advierten: "Seguir pagando la deuda e intervenir diariamente con u$s70 - 100 millones para contener la suba del dólar oficial no es sustentable".
Que el BCRA le dé una vuelta de tuerca más al cepo es un escenario que todos en la City dan por descontado. "Mientras no se calme la crisis y no haya cierta estabilidad de perspectivas de inflación, de devaluación, que es lo que hoy todavía está volátil, van a seguir teniendo la necesidad de usar el control cambiario y de ajustarlo", sostiene Kalos, de Elypsis, que desde el día uno del cepo advertía que se los controles se iban a ir endureciendo.
"Veo que este sendero alcista del dólar se va a mantener, que el cepo probablemente se vaya a incrementar, y seguramente los u$s10.000 permitidos hoy van a terminar siendo mucho menos en los próximos días después de las elecciones, quizá para evitar el efecto electoral (negativo) de endurecerlo", aporta Buteler.
Leonardo Svirsky, de Bull Market cree que hasta las elecciones la mesa del BCRA "va a seguir jugando fuerte" para ponerle un techo al dólar y sostiene que si el resultado de los comicios le da una victoria abultada a Alberto Fernández sobre Mauricio Macri "al Central no le va a quedar otra que endurecer el cepo".
Quedan diez días hábiles hasta las elecciones y cada rueda será una batalla para el BCRA, que no sólo deberá contener al dólar sino administrar bien los billetes verdes para seguir teniendo poder de fuego.
"Hacia adelante veo que la demanda minorista va a continuar, como no estamos en meses de fuerte liquidación, las exportaciones no van a ayudar mucho y los días previo a las elecciones siempre lleva a dolarizar carteras", asegura Buteler. Además, agrega, después de lo que pasó en las PASO no sería nada raro que esa dolarización sea más importante.
Rascando la olla del BCRA
"Estamos todos haciendo cuentas para ver si alcanzan o no los dólares. Están llegando muy justo, demasiado, al punto que el Gobierno tuvo que usar divisas del FMI que teóricamente eran para reforzar las reservas y no se podían tocar", advierte el analista financiero.
El Gobierno sabe que contener al dólar es clave de cara a las elecciones, ya que una nueva disparada podría reavivar la inflación, después de dos meses con subas de precios de más del 4%.
Además, el valor de la divisa es un termómetro que va más allá del impacto concreto que genere. "Si la gente ve que el dólar está estable siente que está todo tranquilo, por más que la bomba esté a punto de explotar", grafica un operador que ya vivió varias elecciones y que recuerda que ningún gobierno devalúa en un año electoral, "salvo el actual, que tenía las manos atadas por el FMI".