REFUERZO DE LIQUIDEZ

Cepo al dólar: hay mayor salida de depósitos, bancos se bajan de las Leliq y Sandleris puso "a full" la maquinita de billetes

En cuatro días, los bancos no renovaron letras por $366.000 M. Tras incumplir su objetivo, el Central negocia con el FMI redefinir la meta de septiembre
FINANZAS - 03 de Septiembre, 2019

En los últimos días, la mayor necesidad de liquidez de los bancos los llevó a no renovar parte de las Leliqs que tenían en cartera, obligando al Banco Central a emitir más pesos. Así, desde el miércoles de la semana pasada, el organismo monetario debió imprimir cerca de 366.000 millones de pesos, y el stock de letras perforó el billón de pesos, hasta ubicarse en $963.485 millones.

Esta fuerte emisión de pesos, en medio de una semana agitada en la City porteña, hizo que el BCRA no pueda cumplir con su meta de crecimiento cero de la base monetaria, uno de los compromisos que le había impuesto el Fondo Monetario Internacional. En el mercado, de todos modos, advierten sobre el riesgo de que esos pesos pueden canalizarse al dólar.

El presidente del BCRA, Guido Sandleris, reconoció que la entidad privilegió aportarle liquidez a los bancos, aunque eso implique emitir billetes en medio de la restricción y hasta no cumplir con la meta de agregados monetarios.

"La volatilidad observada hizo que que los bancos mantuvieran durante agosto niveles de liquidez muy altos, muy superiores a lo habitual y a lo proyectado", explicó el titular de la entidad en la última conferencia de prensa, y agregó: "Nos pareció que era importante que eso suceda incluso fuera de la meta".

Para el analista financiero Christian Buteler "es lógico que frente a esta crisis los bancos se hagan de liquidez para abastecer la demanda que puedan llegar a tener por parte de sus clientes".

"Una de las opciones que puede explicar hacia dónde van esos pesos es a la compra de dólares", advierte.

La sangría de los depósitos en dólares

Desde las PASO comenzó a registrarse un retiro de depósitos en dólares de los bancos, una tendencia que se acentuó el jueves pasado, cuando el canje de Letes trabó la operatoria de los Fondos Comunes de Inversión.

Así, según los últimos datos del Central, al 29 de agosto el stock de depósitos en billetes verdes del sector privado se ubicaba en u$s27.764 millones, una baja de 15,5% respecto a los u$s32.499 millones en que se ubicaban el viernes 9 de agosto, previo a las PASO. Esos u$s4.735 millones que se fueron en 13 días hábiles reflejan una sangría promedio de u$s364 millones por día, mientras que el jueves fue de u$s801 millones.

Si bien todavía no hay datos del viernes, en la city coinciden en que el retiro de depósitos fue mayor incluso a la del día previo. Por un lado, porque esa jornada las reservas registraron una caída de casi u$s1.950 millones y gran parte habría sido por el impacto de la baja de depósitos. 

Por otro lado, por lo que aportaron ejecutivos de distintas entidades públicas y privadas, quienes tuvieron que extender horarios y hasta poner un cupo al retiro de dólares por persona debido a la gran cantidad de clientes que fueron a buscar sus depósitos.

Fabio Rodriguez, director de la consultora M&R Asociados, coincide que esta situación de crisis de confianza empezó por el billete verde pero advierte que "contagió un poco al demanda de pesos, y los bancos empezaron a hacerse de más liquidez por el retiro de depósitos".

Además, agrega, por el problema con la industria de FCI, el Gobierno "llegó a tomar medidas sobre la marcha como la posibilidad de rescates de plazos fijo y darle liquidez a ciertos instrumentos".

Amilcar Collante, economista de Cesur, asegura que "es clave que si los depósitos a plazo empiezan a dolarizarse, los bancos necesiten liquidez para anticiparse a eso".

Además, considera que el hecho de que no renueven sus letras es una señal de que "están previendo que va a haber también algún movimiento brusco en los plazos fijos y quieren estar líquidos".

El destino de los pesos

Al explicar qué hicieron los bancos con los pesos que no colocaron en Leliqs, hay distintas visiones. El propio Sandleris, destacó la importancia de que esos billetes que no lograron renovar no fueron a la economía. "Los mantuvieron en sus cuentas corrientes en el BCRA", explicó desde el Salón Bosch de la entidad.

Unas horas más tarde, a través de un comunicado, el organismo monetario confirmó que por primera vez desde la implementación del esquema de control de la base monetaria, se registró un incumplimiento de la meta y aportó más detalles al respecto. "Este desvío se explicó, en parte, por la actitud precautoria de los bancos que, en un contexto de incertidumbre, derivó en una integración de encajes muy por encima de la exigencia", señaló.

De esta forma, al haber aumentado sus encajes voluntarios de forma precautoria, las condiciones monetarias se volvieron más estrictas, ya que el dinero se mantuvo inmovilizado en las entidades, agregó el comunicado.

Pero en el mercado descreen que hayan dejado de invertir en Leliqs para dejar sus pesos estacionados en el BCRA. Los últimos datos disponibles, muestran que el miércoles 28 de agosto las cuentas corrientes de los bancos aumentó $78.730 millones.

"Me resulta raro que si los bancos todos los días tienen un vencimiento de Leliqs, ahora se estén quedando con la plata y que dejen ese dinero sin que rinda absolutamente nada en el Central, con el nivel de tasa que hay hoy", sostiene Buteler.

Para el analista financiero, obviamente una parte puede ir al dólar y otra también puede ser dinero transaccional que puedan estar necesitando para compensar alguna tenencia de Lecaps que tenían y que ahora no van a cobrar en su vencimiento.

Respecto a la emisión de pesos de las últimas semanas, el Central explicó que "se trata de un aumento transitorio de la demanda de base monetaria, no una expansión por mayor oferta". 

Otro factor que también dificultó que el organismo monetario cumpla con el objetivo que le prometió al FMI fue el "desfase existente entre el ajuste de la meta por las ventas de divisas, que opera de manera contemporánea, y los encajes que los bancos deben mantener depositados en cuenta corriente en el BCRA, que se calculan sobre los depósitos del período previo".

De hecho, los pesos esterilizados por las ventas de dólares que el Central hizo en el mercado de cambios fue modificando la meta base.

Negociación con el FMI, tras no cumplir meta

Sandleris explicó que el hecho de no cumplir con ese compromiso no afecta al acuerdo con el Fondo, ya que las metas de cumplimiento obligatorio son las de fin de cada trimestre, y ésta que no cumplió es "indicativa".

Sin embargo, a raíz de las nuevas condiciones del mercado, el titular del Central adelantó que están en conversaciones con el organismo para redefinir la meta de septiembre. "Prefiero no adelantar lo que son discusiones que están en curso con el FMI. Sí, que (buscamos que) las metas sean consistentes con el nuevo contexto económico", detalló.

Para Fabio Rodríguez, desde ahora comienza una nueva fase en la política monetaria, mucho menos restrictiva que la que venían llevando a cabo hasta ahora. "Seguramente en la negociación que anunció Sandleri con el FMI va a entrar un poco la consideración de esta situación y me parece que va a haber que resignarse ya no a una política de emisión cero, sino algo más en línea con la situación actual", vaticina.

Esta fuerte caída en el stock de Leliqs deja en evidencia la fragilidad del instrumento más usado por el Central para llevar a cabo su política monetaria. "Muchos dicen que las Leliqs son más seguras que las Lebac porque no están a nombre de las personas, sino en poder de los bancos, pero en realidad la plata es del cliente", advierte Buteler.

Y en un momento como el actual, agrega, "si el cliente le pide la plata al banco, éste tiene que dejar de renovar la Leliq". Además, señala que las Lebac tenían un plazo de hasta 90 días, mientras que la letra de liquidez vence en 7 días. "El instrumento de por sí es mucho más riesgoso por la cercanía de los vencimientos", acota.

Lo que viene: menos vencimientos

Esta menor renovación de Leliq, lo que deja también es un desafío mucho menor para el Banco Central de cara a los próximos días, ya que como emitió menos letras, los vencimientos de esta semana son por montos más bajos. Hoy, por ejemplo, enfrenta vencimientos por $190.000 millones, mañana por $200.000 millones y tanto el jueves como el viernes cerca de $165.000 millones por día.

"La última vez que hubo una expansión grande de pesos, en los días posteriores se fue achicando ese movimiento", recuerda Amilcar Collante. "A prioi creo que después de estas jornadas van a venir otras con contracción de base monetaria, que vuelva a aumentar el stock de Leliq", agrega.

La clave, sostiene el economista de Cesur, pasa por la tasa que vaya a convalidar. El cálculo que hace Collante es que bajo un control de cambios, si cae la cotización de los contratos futuros y con eso es menor la devaluación esperada, la tasa de interés implícita también debería bajar y eso se trasladaría al resto del sistema.

"Es esperable que la tasa sea más baja porque hay una demanda artificial de pesos de los que no se pueden ir al dólar", explica.

En ese caso, un tipo de interés no tan atractivo quizá haga que los bancos tampoco se interesen en volver a las Leliqs y prefieran "quedarse líquidos hasta que no se estabilice la situación tengan más certidumbre sobre si lo que pase con los depósitos a plazo", destaca.

Por lo pronto, y de modo atinado, en el Central no están preocupados por el efecto monetario que pueda tener esta emisión en la economía ni por no cumplir con la meta de base monteria acordada con el FMI. La prioridad, en estos casos es que los bancos estén líquidos y ese objetivo debe primar por sobre el resto de las metas para mantener la solvencia del sistema financiero.

Te puede interesar

Secciones