Wall Street ahora cree que habrá menos volatilidad del dólar, pero advierte sobre riesgos latentes
Los anuncios realizados este lunes por el Banco Central, que ponen punto final a la flotación cambiaria, fueron bien recibidos en Wall Street.
Los bancos internacionales sabían que con esta volatilidad del dólar y la situación de pánico financiero que empezaba a emerger, las chances oficiales de mantenerse en el poder se iban acotando día a día.
Ahora, con el poder de fuego discrecional que tendrá Guido Sandleris, en el mundo financiero esperan más tranquilidad con el dólar.
Uno de los grandes bancos que salió a emitir esta opinión fue el JP Morgan. En un reporte de este lunes dice que "a pesar de que la incertidumbre política es alta y creemos que los mercados continuarán operando volátiles hacia las elecciones presidenciales de octubre, esperamos que el tipo de cambio encuentre más estabilidad en las próximas semanas".
De hecho, el JP Morgan mantiene su pronóstico de un dólar a $50 para fin de año.
"Tuvimos previamente ajustes a nuestros pronósticos por la debilidad ante grandes riesgos binarios por las elección de este año. El ajuste del BCRA de la zona de no intervención señala que puede ser más contundente limitar para limitar la debilidad del peso para contener las presiones inflacionarias en el mediano plazo", sostiene el banco.
En la misma línea, desde Goldman Sachs afirmaron que el cambio de una intervención en el mercado de divisas "estricta y limitada basada en reglas a una intervención discrecional y abierta puede contribuir" a reducir la volatilidad del mercado de divisas.
Pero Goldman agrega que la eficacia de la nueva estrategia "está limitada por la cantidad limitada de reservas disponibles para la intervención y probablemente también por limitaciones/restricciones establecidas en el marco del programa del FMI".
"Debido a una más fuerte postura intervencionista del BCRA se espera que la banda de la (ahora casi muerta) zona de no intervención ralentice el ritmo de depreciación", coinciden desde BNP Paribas.
Pero alertan que su principal preocupación es que podría haber una subestimación de la reacción de los agentes locales. De acuerdo con los cálculos de BNP, las reservas netas liquidas (disponibles) internacionales son menos de u$s20.000 millones, una cantidad similar a la potencial dolarización de los seguros contra default (CDS), depósitos a plazo y cuentas de ahorro.
Y dicen que los últimos informes del BCRA muestran que los depósitos a plazo empezaron a disminución. "Además, la quema de reservas rápidamente hará que las necesidades financieras en adelante haga que vuelvan las expectativas de depreciación. Por eso nuestra visión bajista se mantiene", remarca la entidad europea.