Apareció la oferta de dólares de los privados y la cotización profundizó su caída hasta $36,98 en bancos
En la última rueda del mes, el dólar cayó de forma abrupta y confirmó la tendencia bajista de todo octubre, donde acumuló un retroceso de 13%.
Esto ocurrió en un contexto en que apareció una gran oferta de divisas para aprovechar los elevados rendimientos en pesos, motivo que le permitió al Banco Central descender la tasa de interés que les paga a los bancos a uno de los niveles mínimos de las últimas cuatro semanas.
Para que las entidades financieras no vuelquen sus pesos a la compra de divisas, la entidad monetaria se encuentra subastando de forma diaria Letras de Liquidez (Leliq) a 7 días de plazo.
Este miércoles adjudicó $154.492 millones a una tasa promedio de corte de 68,05% anual, un descenso de dos puntos porcentuales respecto a la previa. Y se transformó también en el segundo registro más bajo de todo octubre.
En consecuencia, en el rubro mayorista el precio de la divisa estadounidense retrocedió 77 centavos (-2,25%) hasta los $35,95, su valor más bajo desde el 29 de agosto pasado.
En todo octubre registró una baja de $5,30, es decir, cayó alrededor de 13 por ciento.En este marco en el que se registró una gran oferta, igual el volumen total operado descendió 18,5% para ubicarse en torno a los u$s476,7 millones.
"La intensidad de la oferta barrió la débil resistencia de la demanda y provocó una fuerte caída del tipo de cambio, inusualmente en el último día del mes", resumió el operador Gustavo Quintana de PR Cambios.
Y acota: "Desde julio pasado que la cotización de la divisa norteamericana no exhibía una caída mensual".
Por su parte, Fernando Izzo de ABC Cambios consideró que el dólar cayó porque "el mercado estaba muy ofrecido por inversores y bancos desarmando posiciones, para obtener más rendimiento de su capital de trabajo, aunque con distintas estrategias de coberturas y utilizando un menú de colocaciones en pesos que muy pocos mercados a nivel global pueden ofrecer".
En esa tónica, el miércoles fue una jornada muy atípica, debido a que otras monedas regionales, a contramano del peso, se devaluaron. Al menos, ello ocurrió durante el mismo horario en el que operó la plaza doméstica con el mexicano, que llegó a depreciarse 1,1%, aunque luego finalizó la jornada con una apreciación del 0,1%. En cambio, el precio del real brasilero ascendió 0,7% para ubicarse a 3,72 unidades por dólar.
Esta contracción se reflejó en el microcentro porteño, debido a que las pizarras de las principales entidades mostraron una cotización promedio de $36,98, según el habitual relevamiento que efectúa el Banco Central. Cifra que representa una baja de 80 centavos respecto al valor del día anterior.
En el Banco Nación la cotización al público descendió 80 centavos para ubicarse a $35 para la compra y $36,80 para la venta.
El precio máximo encontrado en las ventanillas de la City llegó a los $37,25 en el Santander, seguido por los $37,10 del HSBC y después en $37 se ubicó un grupo numeroso de entidades.
En el mercado marginal, el blue se negoció con una baja de 25 centavos a $35,75, por lo que se ubicó $1,23 por debajo (-3,3%) del promedio minorista oficial.
Por el lado de las cotizaciones en el mercado de futuros del Rofex para lotes pactados con vencimiento a fines de diciembre, se ubicaron con tendencia a la baja en los $38,99.
Cabe recordar que a partir del primero de noviembre, tal como estaba estipulado, se actualizará 3% el valor de la banda cambiaria en la que no intervendrá el Banco Central en el mercado, fijada el mes pasado entre $34 y $44. Es decir, el piso ahora pasará a ser de $35,02.
"Con el piso de la banda en $35,02 y un dólar en $36 nos vamos acercando al momento en el que el BCRA estará habilitado a comprar. La tasa de Leliq ya en 70%, la sintonía fina por ahora está funcionando. Brasil ayuda", resume el analista Gustavo Neffa de Research For Traders.
Además, las reservas internacionales del Banco Central pegaron un salto el martes, ya que cerraron a u$s54.042 millones, es decir, aumentaron unos u$s6.175 millones respecto al día hábil anterior.
El notorio incremento en las tenencias del BCRA se debió a que el Gobierno recibió ese día el desembolso del Fondo Monetario Internacional (FMI) por u$s5.631 millones, en el marco del nuevo acuerdo Stand By con la Argentina aprobado el último viernes por un paquete que incluye una ayuda total por u$s56.300 millones, que se destinarán a engrosar las reservas.
De esta forma, volvieron al nivel más elevado registrado el 29 agosto pasado, cuando las tenencias de la autoridad monetaria se ubicaban en u$s54.301 millones.
A nivel general, desde el plano político y económico la situación es compleja, debido a la notoria caída de la actividad económica, la inflación elevada y la evidente incertidumbre porque el año que viene habrá elecciones presidenciales.
A ello se agrega la misión que tiene el Gobierno de reducir el importante déficit fiscal, en un contexto social que no es propicio para realizar nuevos recortes.
"Las buenas noticias vienen por el lado de los resultados fiscal y externo que muestran progresos importantes. La intensidad de la recesión es la contracara de la velocidad de ese ajuste, y todavía no hay certezas de la actividad haya tocado un piso", indica un informe de Consultatio.