Dólar récord y sin freno: escaló hasta los $31,47, en una semana agitada por el impacto de Brasil

La situación económica local es tan frágil y sensible que cualquier hecho doméstico o internacional puede generar la reacción de los mercados. En este caso, el cambiario cerró una semana imparable en el que tocó un nuevo precio máximo, contagiado por la volatilidad que tuvo el real en Brasil, que en la jornada previa se devaluó 1,9% y este viernes fluctuó nuevamente. Aunque, luego del cierre de la plaza argentina, finalizó el día con una leve apreciación, al igual que las otras monedas emergentes.

La demostración del impacto que causó la "tormenta externa" en el ámbito doméstico es que el volumen total operado el viernes fue el menor registrado durante agosto para una jornada, lo que significa que, más allá que la demanda supera a la oferta, no existe un apetito "desesperado" por la divisa. 

También hay una decisión oficial, más allá de pequeñas intervenciones del Banco Central en los plazos cortos de futuros, de dejar flotar libremente la moneda para no volver a vender dólares de las reservas con el intento de frenar el incremento imparable del valor de la moneda estadounidense.

Bajo este panorama, en toda la breve semana que acaba de concluir el tipo de cambio mayorista finalizó con un incremento de $1,1 frente al cierre del viernes pasado, lo que representa una escalada de 3,5%. 

Y si se toma en cuenta el comportamiento general, en todo el mes la devaluación del peso es de 12,8% y en 2018 acumula 65,7 por ciento.

Así, en la plaza mayorista, el billete negociado en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), se disparó 41 centavos para cerrar a $30,90, marcando de esta manera un nuevo récord histórico.

Este impulso del precio del dólar fue contenido, en parte, por el Banco Central con "puntuales incursiones en los mercados de futuros, que apenas dieron algún respiro muy transitorio al salto experimentado en la fecha", dijo el analista Gustavo Quintana de PR Cambios.

Justamente, según Fernando Izzo de ABC Cambios, la plaza se cubrió con operaciones a futuro de dólar (NDF) en el Rofex, al operarse "el volumen más alto del mes pactado" al totalizar u$s1.347 millones.

La tendencia alcista de la divisa estadounidense fue la característica de toda la semana, impulsado por la devaluación de las monedas emergentes, especialmente de Brasil por los ruidos y temores políticos a dos meses de sus elecciones presidenciales.

También incidió que a nivel local hubo mayor demanda que oferta, pese a que el volumen total negociado en la plaza sigue siendo marginal. De hecho, este viernes cayó 17% respecto a la rueda previa hasta los u$s414,5 millones, lo que implica el menor registro en todo agosto.

En el segmento minorista, en las entidades del microcentro el precio promedio fue de $31,47, cifra que representa un alza de 49 centavos, según el relevamiento diario del BCRA.

En el Banco Nación, la cotización al público avanzó 40 centavos para ubicarse a $30,40 para la compra y $31,40 para la venta.

En tanto, el valor máximo encontrado en las ventanillas de la City fue $31,60 en el ICBC, seguido por los $31,50 del Galicia.

Desde el mercado paralelo, el blue se vendió en las cuevas con un alza de 65 centavos a $31,65, por lo que se acomodó al valor de las pizarras. Incluso, se ubicó 18 centavos (0,6%) por encima del promedio oficial minorista.

"Somos un país con defensas bajas, cualquier enfermedad que anda dando vueltas te pega", dijo economista de la consultora de Orlando Ferreres, Fausto Spotorno, respecto a que la Argentina seguirá expuesta a los shocks externos.

Y agregó que la inestabilidad continuará porque "hay muchos fondos internacionales que tienen activos argentinos que ya no los quieren tener".

El clima económico para los países emergentes no es del mejor. Un nuevo informe sumó pesimismo sobre la situación financiera argentina: el Banco BNP Paribas de Brasil recomendó a sus inversores no correr riesgo argentino, o de hacerlo, apostar a una nueva devaluación en el corto plazo, ya que da por hecho que el Banco Central no podrá defender el valor actual del peso.

"Argentina parece quedarse sin dólares para defender al peso" y por tal motivo, desalienta a sus clientes a posicionarse en activos no dolarizados del país. Puntualmente, recomienda entrar al país "en corto", es decir en una posición vendedora, indicó la entidad financiera en su informe.

Por lo pronto, la demanda de divisas sigue siendo sostenida pese al notorio aumento en el precio del billete estadounidense, mientras los ingresos de dólares, que ya eran bajos, han mermado sensiblemente en el último tiempo.

En cuanto a esto último, el miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) difundió que se registró un saldo comercial negativo de u$s789 millones en julio, un dato muy superior al esperado por analistas. Con este déficit comercial, el Intercambio Comercial Argentino (ICA) acumula 19 meses consecutivos de caída.

Por otro lado, la compra bruta de dólares en los bancos ascendió a u$s3.693 millones en julio, según el informe mensual del Banco Central, monto virtualmente igual al de junio cuando hubo una corrida cambiaria. 

Esas compras fueron realizadas por 1.350.000 clientes, lo que representa un aumento de 240.000 clientes respecto a lo observado en junio.

"Una posible explicación para el aumento de las compras brutas de billetes en moneda extranjera podría encontrarse en el cobro del sueldo anual complementario", indicaron desde el BCRA, al referirse a la influencia estacional del medio aguinaldo.

En detalle, en cuanto al dólar, el ex presidente del Banco Nación y economista Carlos Melconian fue enfático esta semana en una charla en público: "El tipo de cambio tiene que ser tal que la tía no compre más dólares y que el cadete no se vaya a Itaparica o South Beach. Ese es otro tipo de cambio que no es el de $30".

Al respecto, el economista José Luis Espert advirtió esta semana que si el valor del dólar sigue escalando, ”va a terminar subiendo un 80% respecto al año pasado”, por lo que estima que puede llegar a situarse en $34 para fin de año.

En este sentido, en el mercado de futuros del Rofex se operaron u$s1.347 millones, de los cuales casi el 42% se pactó entre agosto y septiembre con precios finales de $30,85 y $31,73, respectivamente, con tasas al cierre de -8,4% y 26,8% anual.  

Para fin de año, el precio negociado a diciembre fue de $34,15, cifra que representa para los inversores una suba adicional de ahora al final del 2018 de 10,5 por ciento.

"Las tasas bajaron respecto del jueves, dado que el BCRA volvió a operar en los futuros. Así, los plazos subieron un promedio de 25 centavos, sin acompañar la suba del spot, donde el dólar gano 41 centavos", resumieron desde ABC Cambios.

En cuanto a los rendimientos en pesos, este viernes se mantuvieron estables en el mercado secundario de Lebac, ya que al plazo de 26 días la tasa de interés fue de 44% anual.